La Gordita de Jin ✔

Capítulo 11

Narra Jin

Llegue nuevamente al apartamento y fui a prepararle los medicamentos a ___ y de vez hacerle un té de menta. Escuche la ducha encenderse y mientras se preparaba el té fui a chequear a ___.

Había llenado la tina con agua muy caliente y estaba casi dormida dentro de ella. Me senté en el borde, tomé su mano y la besé.

-¿Quieres ir al hospital?

-No. Estoy segura que no es nada serio. Lo más seguro solo fue que el guiso me hizo daño.- Acaricie su mejilla con mi otra mano y mordí mi labio inferior.

-Jin no es nada serio, de veras. Te prometo que si en la mañana amanezco de la misma forma me puedes arrastrar al hospital.- Su dulce sonrisa alivio un poco mis nervios.

-De acuerdo. Sal antes de que enfríe el agua, no quiero que te de una gripe.-

Sali del baño para darle algo de privacidad y fui a servirle su té y a darle la medicina. Cuando fui al cuarto, estaba recostada en nuestra cama. Le di el té y las píldoras. Sin ninguna pregunta se las tomó.

-Jin...Llevo ya cuatro dias con vómitos pero no te he dicho nada...no quería preocuparte.- Suspiré y me cambie la ropa a mi pantalón de dormir. Me acosté al otro lado y la tomé en mis brazos.

-Si amaneces vomitando iremos al medico.-

-Jin, no quiero que pienses..

-Hablaremos en la mañana, estamos cansados.- Su labio inferior tembló levemente y ella se acostó del otro lado, con su espalda hacia mi.

•••

Pasaban las semanas y ___ seguía ocultándole a Jin que estaba enferma. Su peso continuaba disminuyendo aun cuando ella había dejado de hacer dieta y ejercitarse. Lo que ella no sabia era que Jin sabia que algo andaba mal. La piel alrededor de sus ojos se oscurecía cada vez que la miraba y se estaba poniendo palida, su apetito disminuia, solo estaba tomando mucha agua. Una noche que Jin había llegado cansado del trabajo, había encontrado a ___ tirada en el suelo. Rápidamente llamo la ambulancia para que la vinieran a recoger.

•••

Narra Jin

Llegamos al hospital y rápidamente llevaron a ___ sala de emergencias. Iba a entrar con ella pero la enfermera me detuvo.

-Señor, necesito que se quede en la sala de espera. Vamos a estabilizar a su esposa y ubicarla en una habitación. Tan pronto este lista, el médico vendrán a buscarlo.- Gruñendo, corrí mis dedos por mi cabello y asentí.

-De acuerdo, gracias.

Tome asiento y no pasaron 35 minutos, cuando entro un médico. El tipo se notaba un poco cansado y preocupado, lo que elevó mis niveles de ansiedad por las nubes.

-¿Se encuentra el esposo de ___?- Me levante y fui a donde el.

-Buenas noches, soy el Dr. Kim Nam Joon. Lamento decirle que su esposa esta severamente deshidratada a causa de Hiperemesis Gravidica. No es muy común en una mujer embarazada pero tampoco es desconocido.

No lo podía creer...

-...¿Que? ¿___ esta embarazada?- El Dr. Kim me miró con rareza.

-Si, tiene 8 semanas y 4 dias de embarazo, en otras palabras tiene 2 meses ¿Acaso no lo sabia?

-No...no, ella no me había dicho nada. Bueno hace un mes atrás me había dicho que estaba atrasada en sus dias pero no pensamos que fuera algo raro. Ella ha estado en dieta y rebajando de peso, pensamos que coincidía con eso.- Mis ojos se llenaron de lágrimas y una enorme sonrisa transformo mi rostro.

-¿De veras esta embarazada, doctor?

-Si. Puedes pasar a verla. Esta en el cuarto 412A. Estaba dormida cuando llegue.- Le di las gracias al doctor y fui de prisa al banco de elevadores para subir a ver al amor de vida que cargaba nuestro bebé en su vientre.

Soy el hombre más afortunado del mundo. No tan solo estoy con la mujer que mas amo en la vida sino que en menos de 6 meses ¡Sere papá!