El viejo Whiteman empezó una vez con un: Oh! Capitán, mi Capitán!
La textura del libro me hace preguntar acerca de cada página gastada y leída.
Pensamientos ajenos que abofetean los sentimientos extranjeros del corazón.Vida, me tienes aquí sentado, con lágrimas en el pecho e ideas sin nacer.
¿Por qué sueño el presente? Y ¿ por qué vivo el futuro?
Y ¿ qué hay del pasado que no percibí?La historia glorifica a reyes, más nunca a los guerreros cuyas manos pintadas de rojo clavaron una piedra en la historia.
Si el viejo Whiteman estuviera aquí, me diría: ... Mi capitán; caído, frío y muerto.
ESTÁS LEYENDO
Borges: Mujeres, poesía y Belleza
PoetryRecuerdo como tu mano permanecía junto a la mía, sin tocarse, solo... Poemas