Prólogo.

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Ya es de noche. Tengo miedo. Hace mucho frío y me duele todo mi cuerpito. Ese hombre malo a vuelto a lastimarme. Nose porque lo hace. Dice que soy una niña mala pero no es verdad. Me porto bien. Pero igual me lástima y me deja encerrada ente lugar oscuro y helado. Se escucha el ruido de la puerta. ¡No! Tengo mucho miedo. Es ese hombre malo. No quiero que me siga lastimando. Mi cuerpito me duele pero hago lo posible por esconderme detrás de unas cajas. Tengo mucho miedo. No quiero que me lastime más.

-¿Hola? Tranquila soy yo.

Me asomó despacito y lo veo. Estoy feliz. No se ha olvidado de mi.

-Aquí estoy-murmuro.

Él sonríe cuando me ve, viene corriendo hacia a mi.

-Perdón por llegar tarde es que tenía que asegurarme que estuvieran durmiendo-dice sacando su mochila.

Le sonrio.

-Descuida, me alegro que estés aquí.

Como del emparedado que me trajo. Tenía mucha hambre. Él cura mis heridas y me pone banditas. Es un niño bueno. Jugamos un poco pero tratamos de no hacer mucho ruido para que el hombre malo no se despierte. El tiempo pasa y me siento triste porque se que él se tiene que ir.

-Prometeme que regresaras-digo triste.
-Te lo prometo.

Sonreimos y sellamos nuestras promesa juntando nuestros deditos.

-Ya lo prometiste así que debes cumplir-digo.
-Lo voy a cumplir-sonrie.

Se va y yo vuelvo a quedar sola en la oscuridad. Pero ya no tengo miedo porque se que lo tengo a él. Camino hasta el medio del cuarto oscuro y me acuesto en el piso. Hace frío. Pero yo no tengo frío. Estoy calentita, ahora tengo una mantita. Me lo trajo él. Él siempre viene después de que el hombre malo me hace daño. Es el único que es bueno conmigo. Sólo espero que siga siendo así siempre. Que venga a verme cuando estoy sola. Que me cure cuando estoy herida. Pero por sobre todo.

Que nunca me olvide.

Nunca Me Olvides [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora