Nunca Me Olvides [PAUSADA]

Capítulo 7.

Ema.

Nunca me di cuenta de la sensación de vacío que había en mi interior. Pensé que lo tenía todo: padres que me aman, amigas con las cuales contar, una vida estable y tranquila en fin, esas cosas. Sin embargo, estaba equivocada. ¿Es posible que con solo estar con alguien te sientas justo, es decir, completo? Esto no se me cruzo por la mente hasta ahora, esperando impaciente a que sea la hora del descanso para poder verlo. Para poder ver a Alex. Seguro piensas que es porque me estoy enamorando, desde ya te lo niego. Admito que Alex me gusta y todo, es un chico bueno, esta bien, no tan bueno es, pero trata de comportarse y más ahora que somos amigos. El punto, es que cuando me encuentro a su lado, ¿cómo decirlo?, se siente correcto, que todo está como debería estar. Debo estar loca, pero así es como lo veo. Hace una semana que Alex y yo nos hicimos amigos oficialmente, desde entonces en los recreos siempre estamos juntos con nuestros respectivos amigos. Camila y abril no lo podían creer, decían que Alex nunca antes se lo había visto con chicas a no ser que sea para tenga un momento de diversión, pero ya ven, la gente cambia.

Lo que me tiene preocupada de este nuevo grupo de amigos que creamos es que puede haber repercusiones, Camila y yo nos percatamos que el amigo de Alex, Federico, gusta de nuestra amiga Abril. Se lo veía más atento con ella, es muy tierno y todo de como Federico la trata, la hace reír y le tira piropos pero no por eso nos sentimos en plena confianza. Abril está ilusionada con él y nos alegra de que empiece a tener más confianza en si misma, pero no se sabe de las verdaderas intenciones de Federico, no quiero que juegue con mi amiga.

Protegere a mis amigas a como de lugar.

Hablé con Camila por teléfono la noche anterior y quedamos en que, como yo soy más cercana a Alex que ella y Abril, lo encararia para advertirle que si su amigo hace sufrir a la nuestra, la amistad que construimos se va derechito al excusado.

Sonó por fin el timbre del recreo. Salimos contentas con mis amigas del salón para ir al zoom. En la entrada del zoom los chicos ya nos están esperando.

-Caminan como tortugas-es lo primero que dice Alex cuando estamos frente a frente, se pone a mi lado y me pasa su brazo por mis hombros.

Nos sonreimos como si fuéramos cómplices de algo.

-Chicas-dice Federico saludandonos antes de pasarle su brazo a los hombros de Abril .-Hola, preciosa. Ten, te compré esto-le da una barra de chocolate.

-G-Gracias...-responde Abril, sonrojada como siempre, ella y Federico se van juntos al zoom.

-Iré a comprar algo, ¿ustedes quieren algo?-pregunta Cami.

-Yo quiero un agua saborizada de pera-del bolsillo de mi campera saco un billete de veinte pesos y se lo entrego.

-Hecho, ¿y vos Alex?

-Nada, después me compro-dice mientras utiliza su celular, miro de reojo y creo que está mandando un mensaje.

-Vamos al patio de afuera, nos alcanzas-digo a Cami.

-Okey, los veo ahí-y se va.

Este es momento, debo aprovecharlo.

-Oye...

-Che-decimos al mismo tiempo. Nos reímos por nuestra sincronía.

-¿Que ibas a decir?-le pregunto, ya nos encontrábamos en el patio de afuera.

-Primero vos-me dice con una sonrisa.

-Bueno, la verdad es que Cami y yo estamos un poco preocupadas por la amistad que tiene Federico con Abril. Si me entiendes, ¿verdad?