Cuenta un cuento

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Os contarè la historia de un amor real; en un bosque espeso y frondoso un mago existió. Triste y solitario había recorrido aquel idílico lugar por millones de años. Vio vivir y morir generaciones enteras de seres, y aunque agradecia su inmortalidad, cada noche se estaba llenando de soledad. Envidiaba a los que morian,  a los que amaban, y a los que morían por amor. Un día una bella mortal cautivò su corazón; su pulso se acelerò y sus pensamientos desató.  Con el tiempo nació entre ellos aquel sentimiento llamado amor. Era perfecto, tranquilo y amistoso. Ella una simple mortal  sabía que su sueño pronto terminaría, pues al final que son 70 o 100 años en comparación con la eterna vida. Eso les angustiba pués al final de esta era, ella sería cenizas, y él, sería un mago triste y solitario. Le juró que la amaría hasta el resto de sus días, cada instante, cada segundo, cada minuto. Como se tenía destinado  ella murió 55 años después, fue eternamente efímero, algunos instantes que le dio el universo, y que lo llenaron de alegría. Han pasado seis eras desde aquel fatídico día de primavera, y pese al tiempo aquel mago continúa enamorado de aquella chica, y cada dìa sin excepciòn flores lleva a su tumba, adorna la escultura que talló entre piedras y cal, y agradece por haberle dado aquellos años de felicidad.

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