— Mm, Harry. —toqué suavemente el hombro de mi amigo, quien hablaba animadamente con Niall.
Giró para verme.—: ¿Qué pasa, Li?
— Tengo que volver a casa. —musité mirando hacía mis manos. Bufo molesto.
— Mira, Liam. No puedes hacer siempre lo que el quiera. Ese chico te está dom-
— ¡Él solo quiere asegurarse de que estoy bien! —grité, atrayendo la atención de todo el grupo. Harry me miró con decepción y preocupación a la vez.
— ¡Pero Liam, por su culpa casi no puedo estar contigo! ¡Eres mi mejor amigo y me preocupo por ti! —gritó el rizado frunciendo ligeramente el ceño. Llevé las manos a mi cara, para después mirar a Harry.
— Perdoname...—lo abracé. —Yo solo debo irme. -musité con la cabeza recostada en su pecho. Acarició mi espalda con delicadeza y asintió.
— Está bien, Liam. Pero si necesitas cualquier cosa no dudes en llamarme ¿si? —asentí besando su mejilla. Me despedí de los demás chicos, y soltando un largo y pesado suspiro comencé mi camino al apartamento que compartía con Zayn. Mi novio.
Coloqué mi flequillo de lado y con nervios abrí la puerta de la casa. Todo estabas a oscuras. Quizás todavía no había regresado.
Cuando encendí las luces, me llevé el susto de mi vida. Allí estaba, sentado en uno de los sillones con la mirada perdida y los puños apretados. Oh joder, casi se me sale el corazón del pecho. ¿Cómo es que no pude verlo?
— ¿Dónde estabas? —soltó de golpe. Mordí mi labio inferior con nervios. Posó su fría mirada en mi cuerpo, mirándome de arriba a abajo, hasta conectar nuestros ojos. Lo vi levantarse y dirigirse hacía mi. Tenía miedo.
— Con Harry.
«No tienes porque darle explicaciones, Liam»
— Ese chico no me gusta nada. —murmuró sin apartar la vista de mi. Sus ojos pardos resaltaban el odio que tenía hacía mi amigo adquiriendo un tono mas oscuro.
— Pues te jodes. —no me di cuenta de lo que acaba de decirle hasta que sentí su puño impactar en mi mejilla. Mis ojos se humedecieron , pero no solté ni la mas mínima lágrima. No me convenía verme débil y vulnerable delante de Zayn.
— Estoy hasta los putos cojones de tu actitud, Liam.
— Yo también, Zayn. No pienso soportar ni unos mas de tus abusos ¿Te queda claro? —el moreno dio un golpe en seco a la pared, poniendo un brazo a cada lado de mi cuerpo, dejándome totalmente acorralado.
— Si lo hago es porque no me obedeces, y siempre haces lo que te salga de los huevos.
— Tu no eres quien para decirme lo que puedo o no hacer, Zayn Malik.
— ¡Eres mio, maldita sea! —otro golpe en la pared. Cerré los ojos con fuerza rezando porque algún día todo volviera a ser como al principio.
— No soy un maldito objeto. —murmure mirando mis pies.
— Lo que eres es una maldita puta. ¿Te crees que no sé lo que te traes con ese amiguito tuyo? —lo miré con asco, en este momento el miedo se había convertido en ira. Estampe mi mano en su mejilla.
— ¡Primero me controlas, abusas de mi debilidad, me alejas de las personas que quiero! —lo di un empujón alejándolo de mi. — ¿¡Y ahora tienes los santos cojones de decirme que te soy infiel y llamarme puta a la cara!? ¿¡Tu quién mierdas te crees que eres!? ¡Estúpido cerdo!
Pensaba salir corriendo a mi habitación pero me lo impidió tomandome del brazo y pegándome a su pecho. Intente zafarme de su agarre cuando dos toques a la puerta hicieron que nuestra discusión llegara a su fin.
Caminó hacía la puerta, y la abrió.
— ¿Se puede saber a qué vienen esos gritos? —la vecina de al lado se encontraba al otro lado de la puerta, con los brazos en sus caderas y el ceño fruncido.
— No es asunto suyo, señora. —y sin decir nada mas, el moreno le cerró la puerta en sus narices. Mañana me disculparía con ella, sin duda, Zayn era un maleducado.
— Idiota. —murmure para mi mismo, cruzando los brazos sobre mi pecho.
— Cállate si no quieres que te rebiente la cabeza, Payne. —soltó en un gruñido. Blanquee los ojos, provocando otro gruñido por su parte. Como un perro ¿vieron?
— Cierra la boca, no quiero escucharte mas por hoy. —me encaminé hacia la habitación que compartíamos sin descruzar los brazos y sintiendo sus pasos detrás de mi.
Tomé asiento en la cama, cruzando las piernas y mirando hacía la ventana de nuestro pequeño cuarto. Por el rabillo del ojo pude ver al estúpido de mi novio, apoyando en el marco de la puerta y su penetrante mirada puesta en mi.
— Vete.
— Liam.
— Qué te vayas.
— Pero...
— ¿Acaso quieres que te compre unos audífonos, abuelo? —rodé los ojos por milésima vez en el día, el en cambio atrapó su labio inferior entre sus dientes.
— Me pone verte enfadado. —lo miré perplejo y agarré lo que primero pillé; un cojín, y se lo lancé. Para mi desgracia lo atrapó en el aire.
— ¡Eres un cerdo! —exclamé con la cara completamente roja de la vergüenza. Con una sonrisa burlona se tumbó a mi lado, atrayendome a su pecho. Intente separarme pero me apegó mas a el, dejándome totalmente inmovilizado. Me rendí, soltando un pesado suspiro y dejando que me abrazara por la cintura. Recosté mi cabeza en su pecho.
— Eres muy bipolar, ¿lo sabías? —murmure levantando la cabeza ligeramente, para mirarlo a los ojos.
— No puedo controlarlo.
— Uhm...
— Te quiero, ángel.
— Yo también, Zy.
~•~
Perdón por haber actualizado tan, tan tarde pero casi ni tengo tiempo para wattpad :( El instituto es una mierda ¿sabían?
¡Estoy triste! ¿Liam va ha ser papá? :( Tengo un lío tremendo en la cabeza.
Bueno, perdón de nuevo. Disfruten de la foto de multimedia porque dios asdfghjklñ (♥ω♥*)
Aroa se despide ♥♥♥
(Mi nombre es raro, lo c)
