Capitulo 6 - Pasado

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<<De pronto ella se volvió en la luz de su oscuridad, porque no hay luz sin oscuridad>>

POV.

Emilie estaba viendo toda la casa detenidamente como si de ello dependiera su tiempo sin prestar atención a la mirada expectante de los tres vampiros y la bruja.

—Entonces... ¿Qué rayos eres? —dijo Faye rompiendo el silencio.

—Un vampiro con habilidades especiales —bromeo — claro que no, eso no existe— rio— Soy un demonio.

Madison tenso su mandíbula ya que los brujos no eran amigos de los seres sobrenaturales mucho menos de los demonios.

— ¿Por qué salvaste a Adam? —interrogo esta vez Lewis.

—Porque el tema de la cura es algo que ha llegado hasta mi mundo— los miro a los tres— erradicar a los vampiros seria como un sueño hecho realidad.

Adam soltó una sonrisita burlona ya que solamente Madison tenía una dosis que ya estaba destinada para Haley.

—¿Qué es tan divertido? —protesto la rubia que le lanzo una mirada de muerte a Adam.

—Solo hay una dosis y no se harán más —dijo seguro— así que olvida de tu mente la idea de erradicar a mi especie que no pasara.

Emilie sonrió, le encantaba ver que Adam no le tenía miedo, usualmente cuando oían demonio la mayoría corría.

—Entiendo, pero —dirigió su vista a Madison— ¿puedes hacer más?

La bruja estaba temblando, pero no quería que la rubia notase su nerviosismo, lastimosamente era tarde Emilie se estaba mofando por la actitud de la brujita que temblaba al solo verla.

— ¡Bu! — rio Emilie al ver como la brujita retrocedió unos pasos y la miro mal.

Hubo un momento de silencio incomodo, realmente Emilie había causado impacto, es decir no te encuentras con un demonio todos los días, pero para bien o para mal había salvado a Adam de los ataques del aun desconocido hechicero.

Esa noche Emilie se quedo a dormir allí, no tenia ningún lugar al cual ir y necesitaba esperar un tiempo para que el amuleto que le tele transportaba al infierno se llenara de magia.

Lewis se levanto más temprano de lo normal ya que tenía demasiada sed y se acerco a Emilie quien dormía plácidamente en el sofá, como si no lo hubiera hecho hacia tiempo.

El se acerco al sofá y la vio dormir más de cerca, luego oyó el crujir que hacia el piso de madera cada vez que alguien bajaba las escaleras, se giro y vio a Madison.

—Maddie— suspiro aliviado.

—Tengo que hablar contigo—contesto Madison susurrando.

Lewis empezó a caminar hacia la cocina, se sentó en una silla y miro expectante a Madison.

— ¿Qué ha pasado? —la miro expectante.

— ¿Quién es Haley? —pronunció la rubia.

William tenia las manos llenas de sangre, usualmente cuando el salía a cazar lo hacía bien drenando a muchas personas en bares, por alguna razón tenía el mal habito de desmembrarlas y enterrar en lugares diversos los miembros, antes solía hacerlo solo pero había estado enseñándole a Haley esa nueva manera de diversión que la vampiresa aun no le terminaba de convencer.

—Creo que terminamos por hoy— dijo William sonriendo victorioso mientras enterraba el brazo de la chica.

Haley estaba pensativa pues en pocas horas debía ir con William a atacar a Adam, lo cierto es que ella no quería hacerlo pero debía ya que si Adam seguía con ese plan de la cura sus días como vampiresa estarían contados.

— ¿Qué tienes cielo? —interrogo William notando la falta de atención de Haley.

—No entiendo porque tenemos que lastimar a Adam, creo que con... simplemente matar a la bruja está todo hecho.

—Te equivocas— protesto— es un traidor, y los traidores deben pagar.

William era alguien demasiado terco que no iba a cambiar de opinión y Haley tenía miedo de insistir ya que sabía lo que era capaz de hacer si colmaban su paciencia.

Lo que la joven deducía de su vida mortal de William es que básicamente era una persona con trastornos mentales.

El y Stephen habían nacido en Francia pero hace poco que se habían mudado a la ciudad. William le había contado que una bruja había experimentado con ellos y los había convertido en una especie de híbridos entre hechicero y vampiro.

Salir vivos de ese lugar era como un trofeo de guerra para ellos, desde entonces ambos habían tenido que huir ya que los brujos querían exterminarlos.

Stephen a diferencia de William odiaba ser lo que era el hubiese deseado tener una esposa e hijos pero desgraciadamente es nunca fue, ni será.

William no se podía ver así mismo como humano esa idea le causaba repudio, desde pequeño había destacado en la magia pero nada era suficiente para su exigente padre que constante mente se casaba con una mujer diferente ya que constantemente asesinaba a sus esposas golpeándolas hasta matarlas.

William había heredado la magia de su madre quien se volvió la primera víctima de su padre. Desde entonces William sentía un repudio especial hacia los humanos y por eso mismo insistía en matarlos de forma sanguinaria ya que en cada uno de ellos veía a su padre.

Stephen por otro lado no había tenido una infancia difícil sus padres y el estaban de acuerdo con que lo mejor para el era ocultar su magia así que él nunca mostro rastro de su magia.

La bruja DeverClade estaba llevándose a los niños mayores de cada familia para "ayudarlos" con su magia, Stephen iba a pasar desapercibido pero William lo delato ante la bruja quien se lo llevo con ella sin el consentimiento de sus padres.

De los 100 niños que fueron llevados a ese lugar solo sobrevivieron Stephen y William que asesinaron a la bruja y huyeron.

Desde ese día su vida se resumió en huir siempre de las brujas que querían exterminarlos.

Y ahora con la existencia de la cura tenían un arma más certera.


DEVOTAMENTE   ENAMORADO DE TIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora