Mi Nuevo Vecino

IV - ¡Él no es mi vecino!

Dedicado a Dayana_54

Desde hace varias semanas, el apartamento K-306 parecía estar deshabitado; No me había topado con absolutamente nadie hasta hoy por la mañana.
Me topé con una de las pelirrojas en la pista de ejercicio.
Le reste importancia, me coloqué los auriculares y comencé a correr.
No sé porque siempre que tengo los auriculares puestos, siento que todo el mundo me habla.
Esta vez hice caso omiso y aunque sentí que alguien me hablaba en verdad, continúe corriendo sin voltear.
Minutos después la pelirroja se paró frente a mi con una radiante sonrisa.

—Tu eres la vecina de enfrente ¿Cierto?

Me detuve y mientras le correspondía la sonrisa, dije:

—Así es, Zoé Battle, mucho gusto.—Le tendí la mano.

—Un gusto Zoé, mi nombre es Danna Bowen.—Correspondió a mi saludo

—¿Cómo sabes que vivo frente a ustedes?

—Oh, mi hermana y yo te vimos salir enfadada de tu apartamento hace unos días, cuando ayudamos a organizar el apartamento de Leo.

—¿Leo? —Pregunté pensando por un momento en el joven de calzoncillos amarillos

—Si, Leo es el dueño del apartamento, lo estamos arreglando para cuando regrese.

—¿Regrese?

—¡Parece que te hablo en japonés! Ven, vamos a sentarnos.

Llegamos a la banca donde estaban sus cosas y nos sentamos; Nos giramos de tal manera que quedamos frente a frente y ella continuó:

—Leo es el dueño legítimo del apartamento, pero en estos momentos esta en Moscú terminando unos asuntos de negocios. Le pidió a su hermano Adam que se hiciera cargo del apartamento. Le estamos preparando una fiesta sorpresa por su regreso.

—Y ¿Cómo es que compró el apartamento estando tan lejos? —Pregunté intentando no sonar indiscreta.

Ella se cruzó de piernas y comenzó a hablar conmigo como si me conociera desde hace años.

—Verás, él y Adam lo habían visto por internet y a Leo le encantó, dijo que quería, ya sabes, independizarse y estar lo más lejos posible de sus padres. Pero como él debía irse a Moscú, nos pidió especialmente a Adam y a mí que nos hiciéramos cargo.
Dijo que confiaba ciegamente en el estilo de ambos, ¡Nos conocemos desde hace mucho! Leo es muy perfeccionista; Sus padres educaron a ambos para luchar siempre por obtener lo mejor.

Me sentí rara de cierta forma, pues sentí que era de mal gusto que ella me contase todas esas cosas, sin embargo lo tomé por el lado amable, pues eso significaba que yo le inspiraba confianza.
Sin embargo, no era sólo eso lo que me hacía sentir rara, si no también el hecho de que el joven que había visto semidesnudo hace unas semanas, no era realmente mi vecino, si no el hermano del que sería mi vecino legítimo.

Ya sabía que Adam (Según ese era su nombre) era demasiado joven como para pagar un apartamento así.

—Y ¿Cuando vendrá ese tal Leo? —Pregunté.

—Oh, según su último mensaje, dentro de dos semanas a partir de hoy, el sábado para ser exactos. ¿Te gustaría venir a la fiesta? Anda, sería un honor que nos acompañases.

Después de pensarlo un rato, dije que si aunque estaba segura de que no asistiría.

—Perfecto, te espero entonces, un gusto conocerte —Se levantó y se despidió de mi dándome un beso en la mejilla.

Me sentí mal por mentirle diciéndole que asistiría a su reunión, pero en verdad no quería ir.

Admito que me daba curiosidad conocer a Leo, pero ya habría tiempo para eso. Al final de cuentas, viviríamos el uno frente al otro durante un buen tiempo. Además yo jamás había asistido a una fiesta de esa índole, con personas como ellos ¡No encajaría ni a golpes!
Definitivamente no asistiría.
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Las flameantes pelirrojas en multimedia. (Collen Dengel - Izquierda - Danna Bowen) (Suzanne Dengel - Derecha - Ada Bowen) :3 (Creo que no se nota mucho la diferencia :v )