Fuera de lo Común

Capitulo 5: ¡Hay que encontrar esa chica!

Eran las 9:00 en punto y aun seguía hablando con la señora Carnegey.
—Una pregunta— me mira Carnegey.
—Dime— puse mi atención en ella.
—¿No se supone que a esta hora estés en la escuela?— ella me mira curiosa
—Si se supone pero necesitaba aclarar  dudas que solo usted podía comprender— le sonreí.

—Bueno ¿piensas venir todos los días aqui?— ella se entrelazas los dedos.
—No solo hoy, y algunos jueves porque después sospecharían, es la primera vez que falto, así que no creo que le den importancia ya que soy muy responsable y estoy al día con mis trabajos—
Ella asiente.

Respire profundo —Lo que hay que darle importancia es encontrar esa chica ¿como era Esmeralda?—
—Era de baja estatura, pelo largo color negro mas o menos—
—Buscare en mi escuela una chica asi, y usted como siempre esta asomada a la ventana y por aqui pasan muchos jóvenes pues si ve una parecida a ella, me llama aquí esta mi numero— le entregue mi numero celular en un papel arrancado de mi libreta.

—De acuerdo, no hay problema— agarro el papel Carnegey.
—Bueno me tengo que ir, ha sido un privilegio conocerla y me voy para la escuela, quizás puede que encuentre la chica— me despedí.

Salí del asilo y me fui a la escuela.
Ya era eso de las 12:10 am y era hora de almorzar. Siempre me la pasaba solo así que nadie notaria mi presencia, pude estar en mi esquina de siempre escuchando música y muy animado cogí una libreta vacía y empece a escribir sobre todo lo que ha pasado. Al principio de la pagina de la libreta puse "Un misterio de el viejo puente" y empece a documentar a escrito todo, cada detalle cada minuto cada cosa incluyendo porque llegue la segunda vez al puente, también sobre la señora Carnegey y por supuesto de Lionell y Esmeralda.

Paso media hora....
Seguí escribiendo, hasta que por mi esquina donde estaba sentado pasa Katherine y sus amigas. Katherine se me acerca a mi, mientras que sus amigas me miran con una mirada que pude percibir como  si fuera raro y loco, créanme esa mirada la conozco a la perfeccion.
—¡Hola, Mark! ¿Que haces?- ella me habla animadamente.
—Estoy escribiendo garabatos ¿y tu?- respondi cortante.
-Ahhhh okay yo estoy con mis amigas, como ves ¿que escribes?- ella mira mi libreta.
Sus amigas se fueron al ver que Katherine me hizo conversacion.
-Estoy haciendo una historia de aventura- dije.
—¿Puedo verla?— Katherine se sento al lado mío.
—Si, No— quería que me diera su opinión pero luego recordé que no podia ver lo que escribía. Estaba asustado porque contaba cuando la vi con ese chico.

—¿Estas Bien? ¿Porque no puedo verla?— me miro extrañada.
—¡Porque no!- le respondí de mala manera.
Me levante de la esquina mía y guarde mis cosas y me fui del lado de ella.
Ella me persigue — ¿Estas molesto conmigo?•
—No lo estoy solo dejame en paz— no la veía.
—Eres un idiota —Ella se fue.
Rápido me dije a mi mismo —Eres un estúpido siempre la cagas—
Me revire y me dirigía a donde ella —Katherine, lo lamento no quize ser duro contigo es que han pasado cosas en mi vida dolorosas—
—¿Pero acaso te hize algo yo?— ella me mira molesta –¿Te hice algo verdad?—
Baje mi cabeza —No sé—
Katherine me ve —Cuéntame que te hice—
Suspiré —Bueno ayer después de clases en el pasillo, te vi con un chico abrazada y me sentí mal—
Ella rueda los ojos —Eres tonto, ese es mi amigo desde pequeños nos criamos juntos, somos como hermanos—
–Perdón, no sabia nada— hice una mueca
Katherine me observa —¿porque te enojaste?—
Inmediatamente negué —No por nada— respire profundo —de hecho si me molesto muchisimo verte con el porque... porque... porque...—
Ella ríe —te quedaste con ese porque... No sera ¿porque te gusto?—
Me sonroje —Creo nose, te conocí ayer y estuvo tan genial hablar contigo que pense por un momento mal—
Ella me sonríe —eres tierno ademas de que vi que te gusta escribir y me pareciste simpatico—
—Gracias, pregunta ¿te gusta alguien?"— estaba curioso
—No, no me gusta nadie—Rápido sonreí y me quede hablando con ella.
—¿Quieres ir a la cafeteria? hoy tienen la batida super big— me emocioné.
—Si ¿porque no? — me sonrió.

Estuvimos hablando mientras caminábamos, cada momento era bueno.