Miedo

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—disculpe, ¿esta bien? — YiXing ladeo su cabeza con un deje de preocupación. El hombre frente a él estaba tomando su rodilla mientras mantenía el cuerpo encorvado.

—es solo mi rodilla, me he lastimado durante un baile y ahora molesta. — respondió el pelinegro con una suave sonrisa.

— ¿necesita ayuda? — el chico del hoyuelo sonrió tomando el portafolio del moreno y ofreciendo su mano para ayudarlo a levantar.

—eres muy amable. — el mayor se irguió con porte elegante, haciendo notar la diferencia de altura. — ¿puedo saber tu nombre?

—soy Zhang YiXing, un placer ¿y usted?

—por favor llámame señor Park. — el mayor correspondió la sonrisa del chico de ojos azules y camino a la par. —YiXing, tus ojos son preciosos. ¿Quién te los dio?

El chino sonrió con ternura. —no estoy seguro pero creo que son de mi padre.

Park sonrió asintiendo. —de verdad son preciosos. — el mayor se tomó el atrevimiento de apartar uno de los mechones oscuros de sus ojos y acaricio las finas pestañas.

—muchas gracias, señor Park. — el chico se inclinó y le extendió al hombre su portafolio.

—a ti por haberme ayudado. — el mayor inclino su cabeza y se subió al taxi que había detenido momentos antes. —estaré ansioso de volverte a encontrar, buena suerte YiXing.


YiXing asintió despidiéndose con la mano. Aquel hombre le había dado una extraña sensación pero no había comentado nada para no ofenderlo. Miro su palma y por alguna razón comenzó a agitar su cabello. Como si el tacto de ese hombre fuera peligroso y dañino para él. Se sintió repentinamente muy mal, retrocedió hasta que su espalda choco con la pared y se dejó caer.

Fue como si un miedo irracional e intenso surgiera desde la punta de su cabello hasta la punta de sus pies. ¿Por qué no lo había visto antes? ¿Por qué se sentía así después de que aquel hombre se fuera?

Quería levantarse pero sus piernas no le obedecían. El miedo se volvió pánico. Algo dentro de él le decía que tenía que correr muy lejos, ponerse a salvo, huir.

— ¿Qué sucede, cariño? ¿Te sientes mal? — el castaño que lo había ayudado días atrás estaba de nuevo frente a él. —te ves muy pálido.

YiXing dejo que el otro muchacho acariciara sus mejillas y lo levantara. Quiso responderle algo cuando vio pasar a un JongIn con lentes oscuros. Jadeo buscando aire, enfoco su mirada en el moreno con todo el ruego de que volteara hacia él.

El castaño sonrió y enfoco su mirada en el vástago. No tardó en ser notado y posteriormente en ser mirado con recelo. JongIn se acercó rápidamente, fulminando al chico con la mirada rojiza de un vampiro en defensiva. Al acercarse lo suficiente, su gesto fruncido se transformó en uno de desconcierto y preocupación. Paso de largo al castaño y se arrodillo frente a YiXing.

—Xing, ¿Qué sucede? — Kai lo tomo de las mejillas, sobresaltándose por la alta temperatura y la errática respiración del menor. — ¿Qué carajos le hicis...?— su reclamo se desvaneció en cuanto giro hacia el desconocido que ya no estaba.

—K-Kai...— jadeo recargándose en el pecho del moreno. —quiero ir a casa...

El moreno dejo su ceño fruncido y se levantó agarrando al menor de la cadera. —tranquilo, iremos a casa.

Humanitas *[SeXing/KaiLay]Where stories live. Discover now