La Fuerza del Cielo

Las lágrimas de mi vida

Muchas Gracias a aquellos que les haya gustado mi historia, gracias a ustedes se me vino un poco de inspiración para el primer capitulo, espero que les guste.

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En la gran ciudad de Namimori se encontraba cierta pareja en un hospital, obviamente por que la esposa de dicha pareja se encontraba en momento de parto, lo cual alboroto a su marido y ahora mismo vemos como el hombre ronda de un lado para otro preocupado tanto de su hijo como de su amada esposa.

- Señor Sawada- se escucho la voz de un hombre que salia de la sala donde se encontraba Nana, el hombre media al menos 1,75 cm con un cabello negro muy sedoso y unos ojos de color azul. El hombre esta vestido como cualquier otro doctor en medio de un parto con una bata de color verde al igual que el gorro de su cabeza que hace poco se había quitado - Todo esta bien ahora ya puede ver a su esposa e hijo -

Iemitsu entro en la sala sin pensarlo dos veces y se quedo maravillado con tal escena ante sus ojos, al ver a su amada con un niño en sus brazos, el cual estaba dormido pacíficamente.

- Oh cariño, acércate el también quiere conocerte - sonrió la mujer de pelos castaño corto al percatarse de la presencia de su esposo.

El hombre pudo ver a su primogénito ere un pequeño niño de unos pocos cabellos castaños de un tono mas claro que el de su madre, de una piel ni tan clara ni tan morena, con un sonrojo en sus mejillas por ser recién nacido. Por haber llegado al mundo.

El hombre rubio de piel morena se fue acercando a sus dos amores para abrazarlos de todo corazón, aunque poco después se escucho como el niño se iba despertando de su profundo sueño, el pequeño observo con sus ojos color miel a sus padres por primera vez en su vida y en vez de llorar como todos los recién nacidos el les sonrió con pequeñas risas.

Esta acción provoco una gran calidez y calma en sus almas que los hizo llorar de alegría.

- Tsunayoshi- pronuncio Iemitsu mientras tomaba al pequeño de los brazos de Nana - Tu nombre sera Tsunayoshi ¿Te gusta? - la respuesta a esta pregunta fue la gran sonrisa que les regalaba su pequeño niño - Decidido, Tsuna nosotros nunca te abandonaremos.

- Eso es cierto Tsu-kun, nosotros nunca te vamos a abandonar no importa lo que suceda, siempre estaremos a tu lado - afirmo la madre del bebe que aunque no podía hablar o escucharlos comprendió el mensaje que les transmitía.

-Tsuna/Tsu-kun te queremos mucho - dijeron los dos al mismo tiempo provocando mas lagrimas en sus rostros tanto de ellos como el del niño.

Después de ese momento paso una semana para que Nana pudiera salir del hospital con su hijo a su nuevo hogar, en el tiempo que paso mimaron mucho a su niñito los tres se divertían como si no tuviera un final, pero eso no duro mucho tiempo ya que se rompió fácilmente.

Las palabras de sus padres no eran mas que palabras porque no cumplieron la promesa que le hicieron al cielo, de "Nunca abandonarlo" .

Al pasar el tiempo notaron que su pequeño ángel era un inútil no hacia mas que llorar todo el rato y de vez en cuando se tropezaba con cualquier cosa que se encontrara, en un principio ellos aceptaron a su hijo tal como es ya que ellos lo habían traído a la vida, ellos no tienen el derecho de culpar lo solo el de apoyarlo y de amarlo, pero....... todo cambio al enterarse de que Nana estaba embarazada otra vez y así fue como nació el hermano pequeño de Tsuna, Hiroshi.

Hiroshi no era como Tsuna el era mas tranquilo y soportaba los ruidos fuertes, el no tropezaba o destruía las cosas como Tsuna ademas que al parecer el jefe de Iemitsu, Timoteo Di Vongola, le informo que Hiroshi es el sucesor de Vongola, el se convertirá en el Décimo Vongola y además presenciaron lo potentes que eran las llamas de Hiroshi, esto fue cuando Tsuna tenia 6 años y Hiro 5 años. Este fue el inicio del sufrimiento de Tsuna, al pasar el tiempo hasta su edad fue lo que les tomo a Nana e Iemitsu darse cuenta que su hijo era un bueno para nada fue hay cuando empezaron a torturarlo, cada vez que regresaba a casa o cuando Hiro salía con sus amigos a jugar sus padres lo aprovechaban para mal tratarlo. Tsuna nunca se quejo, nunca se resistió en realidad lo hizo una vez pero al hacerlo sus padres casi lo matan por eso no volvió a hacerlo, con el tiempo Tsuna fue aprendiendo a como curarse sus heridas como cocinar e incluso se aprendió todas sus materias pero nada de eso satisfacía a sus padres.

Casa de los Sawada - Actualidad

- ¡Mama! -  un niño de unos 6 años con un poleron de color amarillo y unos pantalones verdes, portando una mochila roja en su espalda, llegó corriendo hasta donde se encontraba su madre - ¡Mira, mira! ¡Tsuna obtuvo un 100 en su examen de Matemáticas! - 

Su madre ni siquiera le miro, solo le dedico unas pocas palabras.

"Que bien, sigue así"

Esto entristeció al castaño, ya que se había esforzado mucho para aquel examen pues era de una de las materia mas difíciles de su año escolar, estaba apunto de llorar pero se contuvo a ello.

"Las lágrimas no resolverán los problemas, solo debo seguir la corriente"

Era lo que siempre pensaba el pequeño, a pesar de su corta edad era muy maduro.

- ¡Mamiii! - grito una voz chillona llena de emoción, que no tardo en llegar al lugar. 

Si, se trataba de Hiroshi.

El era como Tsuna solo que su cabello era un poco mas corto y de un tono castaño oscuro, a comparación con el de su hermano mayor, sus ojos eran de un café oscuro como los troncos de los arboles, vestía una camisa anaranjada y unos jeans azules.

- ¿Qué sucede,Hiro-kun?¿Por qué estas tan feliz? - pregunto la madre de los castaños dándose media vuelta y agachándose para estar a la altura de su hijo menor, ignorando por completo a su hijo mayor. 

Así era siempre la vida de Tsuna.

- ¡Mira! Obtuve un 100 en Historia y no tuve que estudiar nada - dijo con orgullo Hiro con su pecho bien alto. 

- ¡wooooooooow! Ese es mi Hiro-kun - expreso con una sonrisa sus felicitaciones - Como recompensa haré un banquete esta noche.

-Si, Gracias Mami -abrazo Hiroshi a Nana y ella le correspondió el abrazo

- De nada - Nana le estaba acariciando su cabeza con mucho cariño.

Tsuna fue ignorado en todo momento, al punto que ni se percataron de que este salió de la casa.

El ya estaba acostumbrado de ese trato de parte de su familia, para el esto ya no era nada anormal pues antes pensaba que de esa forma eran las familias normales. Mas equivocado no podía estar, por eso el estaba preparado para cualquier obstáculo en su camino pero..... aun así...... el sufría y lo sigue haciendo es por eso que cada vez que esta solo, el ocupa ese tiempo para desahogarse de todo lo que ha tenido que pasar.

Tsuna se encontraba en una mansión abandonada en una de las montañas de Namimori en donde entro y se fue directo a una de las habitaciones , al entrar salto hacia la cama que se encontraba ahí y empezó a llorar, lagrimas caían de sus ojos cada vez mas pareciera que nunca tuvieran fin.

Llorando y gritando el estaba solo sin nadie, sin nadie que lo consolara o...

"Escuchara las lagrimas de su vida de sufrimiento que ha estado aguantando durante eso 6 años de su vida"

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Perdonen por accidente lo publique antes de que terminara el capitulo, soy principiante no se enojen ¿ok? 7-7

Bueno espero que les guste el capitulo, ya que pronto llegaran personajes a nuevos a la historia

???: ¿Te refieres a nosotros?

Zera: Eh? !¿Que haces aquí?¡ ESPERA AL PRÓXIMO CAPITULO

???: EEEEEEEHHH? Bueno..... Chicos nos vemos, una pista soy alguien del pasado , bye bye - Se va corriendo

Zera: ESPERA!!! Maldito 7-7 , Nos vemos en el próximo capitulo. Yo mientras voy a torturar a alguien hasta la muerte

???: f- fue un placer conocerlos

                                                                                      ~ZeraChrono16~