C'est L'amour

Conflicto

Titulo: Conflicto

Personajes: Marine, Adrianna, Allen, Nina

Ship: Aldrien 

Palabras:  1242

Corrió cuando los rumores llegaron a sus oídos, dejo los libros en la mesa de la biblioteca y agarrando su bolsa corrió hacia el patio, apenas salir del lugar le dio una vista de lo que pasaba, un escalofrió le recorrió la espalda y bajo apresurada las escalas, la multitud de personas le impedía ver lo que pasaba dentro, por lo que a empujones intentaba pasar

-¡No puedo creerlo! Eres un traidor- La voz de Marine se escuchó molesta, furiosa, lo único que impedía que se iniciara una pelea a puño limpio eran Ivana e increíblemente Chris

-Marine escúchame, no es como tú lo piensas- Allen trataba de calmarlo, su mejilla estaba hinchada por el golpe que había recibido, Nina le retenía con esfuerzo, sabia lo mucho que le dolía esa situación a su amigo

-¿Qué está pasando?- Adriana por fin llego hasta adelante, asustada de todo ese escándalo, quiso acercarse pero Kim le detuvo -¡¿Qué haces?!

-Si te acercas lo vas a empeorar, espera un poco- La alta deportista le miro seriamente, casi sintiendo pena por la situación, Adriana quiso preguntar pero otro grito le llamo la atención

-¡Me quitaste a la mujer que amaba! ¡¿Qué clase de amigo eres?! ¡Sabias lo mucho que la amo y aun así te atreviste! –Las palabras se clavaban en el pecho de Allen como agujas venenosas, el moreno de grandes ojos ámbar sentía impotencia, por más que intentaba, su mejor amigo no escuchaba nada

-¡Nadie te quito nada!- Esta vez la fuerte voz de la modelo se hizo escuchar y un silencio sepulcral quedo en todo el patio, Kim retiro lentamente su brazo para que la mujer de cabellos dorados caminara libremente, su mirada fría y dura se chochaba con los azules de Marine, el joven dejo de sentir la ira casi por arte de magia, sorprendido, dolido- No soy una propiedad, Marine- Las palabras salían con agresividad de su boca, su relación no era muy buena últimamente pero aquel escándalo, aquello fue lo que rebaso el vaso y más, ella ya no consentiría cosas así, nunca mas

-Adriana...-La voz de Allen murió en un apenas audible murmullo

La joven modelo camino hasta estar frente al alto joven de tez clara, una batalla directa entre el más intenso verde y el zafiro, lo siguiente que vieron fue la mano de la chica elevarse y abofetear a su compañero, quien retrocedió un par de centímetros estupefacto

-¿Cómo puedes decir que me amas así de fácil? ¿Crees que por que somos compañeros desde hace 2 años me conoces? ¿Crees que por que hemos hecho trabajos juntos me conoces? ¡¿Crees que por comprar una revista o ver un maldito video sabes quién soy?! –La voz de Adriana se hizo cada vez más fuerte, Marine se encogió ligeramente en su lugar, al igual que el resto de los presentes, exceptuando a Nina y Allen, incluso Chris miro hacia otro lado con claro arrepentimiento

-Yo...-Marine ni siquiera sabía que decir, no podía decir nada

-No digas nada... No gastes más palabras- La chica se volteo con elegancia y camino a paso apresurado hacia Allen, tomándole la mano y junto con su mejor amiga retirarse de aquel lugar hacia la enfermería, agradecía enormemente que las clases hubieran terminado hace poco y que los alumnos luego del espectáculo se disiparan tan rápido como llegaron

-Perdón...-Adriana salió de sus pensamientos ante la voz llena de dolor detrás suyo, el moreno cubría su rostro mientras dejaba caer un par de lágrimas llenas de impotencia, toda esa situación había explotado de la peor forma y no podía con todo el dolor que sentía. Nina decidió dejarles solos para que hablaran, ella volvería a buscar los bolsos que se habían quedado en el salón

-Oye... no me pidas perdón, no fue tu culpa... ambos sabíamos que tarde o temprano esto pasaría- Ella con el mayor cariño posible, aparto las manos de su amado y le levanto el rostro, besándole las mejillas para quitar el rastro de lágrimas- Si hay algún culpable soy yo, yo te pedí demasiado... te obligue a mentirle a todos y si esto ha sucedido hoy, ha sido enteramente mi responsabilidad...-Allen la abrazo con fuerza, escondiéndose en el cuello de la ojiverde

-No me obligaste a nada, yo sabía lo que venía al enamorarme de ti, al estar contigo, te amo Adriana, no me arrepiento de nada, de nuestras noches de platica, de tus besos, de tus risas, incluso de tus chistes malos, esos momentos que solo yo puedo disfrutar, lo que conozco de ti y nadie más conoce... Solo... es duro, duele mucho... no quiero perder a Marine, es mi mejor amigo...- Adriana sonrió con tristeza y acaricio el colorado cabello del moreno, a modo de consuelo, el abrazo se volvió más fuerte por parte de Allen, su corazón quería explotar

-No lo perderás, solo esta alterado... necesita tiempo para asumirlo... Por ahora lo mejor es darle su espacio, para que pueda calmarse... Ya llegara el momento de hablar, confía en mi... ahora déjame ver ese golpe ¿sí?- Se separó para poder revisar el rostro de su amado, y luego de ponerle hielo en la hinchada mejilla le beso con amor, al menos había logrado sacarle una sonrisa ese día. Ella sabía que necesitaría más que eso para poder quitarle la tristeza, pero de momento era lo único que podía hacer, siguió acariciando el cabello de su novio lentamente; se quedó hasta tarde ese día en la escuela, agradecía tener esa tarde libre y no tener que explicarle a su padre donde estaba, pero ese pequeño alivio no le quitaba el miedo y el dolor del problema, ese enorme problema que se había vuelto una bomba de tiempo, y más que ser culpa de Allen, era suya

No era solo un problema de Adriana y Marine, lo era de Kitty y Lord, no era algo nuevo, la relación de ambos héroes se vio dañada desde hacía tiempo, un largo tiempo donde mantener a flote el equipo era difícil, con Kitty con el corazón roto de la peor forma, con palabras crueles que no solo rompieron sus ilusiones, sino la bella amistad que tenían ambos, pero el detonante había sido cuando las identidades habían quedado al descubierto, todo había sido peor desde entonces, eran situaciones incomodas, y los intentos de Marine por arreglar algo que no tenía una solución, no de esa forma, no de esa manera forzada

La luna por fin llego a su punto más alto, la medianoche estaba allí y la modelo cerraba la puerta con cuidado de no hacer ruido, las dos tazas de chocolate caliente fueron puestas en la mesita de café que tenía frente al sofá, también habían galletas y otros bocadillos y sin faltar el queso de su Kwami, que comía como si no hubiera mañana

-Ya está aquí- En la enorme ventana el reflejo de Lordbug se hizo presente, ella no tardo en acercarse a la ventana y abrirla con lentitud, ella había decidido llamarle, sería la persona madura de los dos, así que sonrió ligeramente, una sonrisa sincera y dolida

-hola Marine-

-Hola... Kitty...- Y así fue como comenzó una noche larga y llena de una plática amarga pero necesaria, ambos sabían que si seguían así el conflicto terminaría por destruirlos, y por destruir el equipo que siempre habían sido, por el bien de París, por el bien de todos y de su amistad, el conflicto terminaría esa noche, doliera lo que doliera