Ella No

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No supe de que forma pude haber iniciado peor aquel día.

Primero me llega la noticia de que Annabeth vuelve al campamento, un guerrero caído me lo informó una semana antes de que ella pudiera llegar.

De algún modo logre persuadir a Percy para que se encontrase lejos del campamento aunque no me tranquilizó en absoluto.

Tenía miedo.

¿Y si todo se perdía? ¿Percy querría volver a estar con ella para dejarme? ¿Se enojará porque estoy con su ex-novio?

Muchas preguntas comenzaron a acudir a mi sin ningún consentimiento, me alegro que en ese momento Jason pidiera entrenar para al menos distraerme del tema.

Aunque me distraía del combate para pensar en ello, por lo que Jason estaba algo decepcionado.

—Vamos Nico, estas peleando sin ganas— aún sabiendo la situación Jason quería ayudar a distraerme de ese tema.

—No puedo hacerlo Jason, estoy muy preocupado respecto a Percy y la llegada de Annabeth, ¿qué crees que pasará con mi relación ahora? Después de todo eran la pareja perfecta del campamento, aquellos que Afrodita se esmero en juntar y todos deseaban tener una relación como la suya alguna vez, el ejemplo de que no hay que dejarse llevar por las partes divinas al momento de enamorarse de alguien, ambos declarados heroes del olimpo. Dime Jason ¿qué haré ahora? Incluso si Percy llegara a elegirme ¿cómo me trataría luego todo el mundo al saber esto? Nadie quiere a un hijo de Hades— mis palabras dejaron salir todas mis antiguas preocupaciones junto a las nuevas.

Nunca superé las constantes personas hablando mal de mí sólo por ser un hijo de Hades.

Era como ser la basura dentro de todo el lugar y en esos momentos, luego de las guerras transcurridas, me seguían tratando de igual forma. Ahora tenía amigoa los cuales me apoyaban, pero aún así me hacía sentir mal tener que mentirles diciendo que todo quedo en el atrás.

Lo único que quedo finalmente atrás era yo.

—No digas eso— Jason enfundo las espada especial de entrenamiento que ahora usaba cada campista debido a un cambio de reglas en el campamento [La verdad era un recorte de presupuesto que hizo el señor D, pero no quería que se enterara todo el mundo].

—Digo la verdad.

[...]

—¡Chicos me alegra verlos!— Annabeth finalmente nos había venido a saludar a todos.

Para algo de mi suerte al parecer los chismorreos del campamento aún no llegaban a sus oídos, desde que Percy me había besado frente a todos era un tema frecuente de conversación —al igual que la explicación de porque evitaba la cabaña de Apolo—.

—¡Annie!— le devolvió el saludo Piper mientras luego el resto imitamos su acción.

—¿Por qué te habías ido?— pregunto luego de un rato de conversación random Jason.

Annabeth cambió su cara por una mucho más triste y luego de suspirar volvió su sonrisa.

—Mi madre me obligo a irme por un tiempo, según ella debía regirme mejor y también me puso algunas pruebas difíciles. No sabía si estaría bien para regresar así que... — su voz se cortó un poco —. Terminé con Percy debido a que no sabría que ocurriría, además a mi madre le agrado la idea, pero no lo hice por ella. A todo esto ¿dónde esta Percy?— preguntó finalmente.

Agradecí un poco que en el grupo nadie dijera nada de lo que paso durante este tiempo, quería tener el valor de decírcelo yo en algún momento.

—Mi bro fue a ver a Sally, admitió que la extrañaba un poco— Jason fue el que respondió a la pregunta.

—Que alegría— comentó ella aliviada —. Pensé que estaría muy mal con esto. Después de todo volví a arreglar las cosas con él.

—¿Qué?— pregunté mordasmente y con algo de ira.

—Vine a arreglar las cosas con Percy, Nico.

—¡¿Después de dejarlo completamebte destrozado así como así y pensar que podrías volver y hacer como si nada hubiese pasado?!— deje estallar mucha furia en mi interior sin medir alguna de mis palabra —. Yo acompañe a Percy mientras tu te ponías a prueba — hice comillas —, como tu les dices.

—Nico, te estas pasando, no era para tanto— ella se puso sería y firne ante mi enfrentamiento.

—No me importa— dije de forna casi escalofriante mientras usaba mi peor mirada —. No dejaré que le hagas algo a mi novio.

Ella soltó una exclamación de sorpresa y los demás miraron hacia otro lado.

—Creí que habías superado a Percy, Di Angelo— ella también intentó optar por una actitud aterradora.

Escuché como alguien ae acercaba y ponía una mano en mi hombro.

Esa misma persona que estaba atrás mio exclamo por la sorpresa.

—¿Annie?— preguntó consternado Percy haciendo que todos mis temores tomaran el control de mi persona.

[...]

Coshita...

No molestes.

Aw... cosita.

¡¿Qué les hice?!

Aw...

¡Paren es raro!

Yo soy rara, Percy no quería ser semidiós y tú eres emo.

Mira, yo no quería ser semidiós.

¡Ya conozco el inicio! Los odio.

Aw... nos ama.

Solo Un AbrazoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora