CAPITULO 6

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La cara de Nina no tenía precio. Creo que si me esforzaba un poco podría escuchar los engranajes de su cerebro esforzándose por asimilar mis palabras.

En los últimos años había sobrepasado su historial con creces a pesar de ser menor que ella. Si, somos un par de promiscuos sin control.

Aunque debo reconocer que los cuatro años que estuvo de esposa intachable inclinaron el marcador a mi favor y la convirtieron a ella practicamente en una santa. - Te contaré que después que Viktor calentó el party diciéndo que había remodelado una de sus habitaciones especiales y la estrenaríamos hoy con un juego de roles. Me vi en la penosa necesidad de conducirlos a la salida.

Tuve que reírme, se podía ser más desvergonzado.

- Me imagino Ky la verguenza que debes haber pasado. La odisea que representó para ti ocultar el desespero por irte fué tal, que no se te ocurrió avisarme tan siquiera - dije fingiendo indignación.

- Hay Nina por favor, deja el drama. Sabía de antemano que te irías con Rob. Puedo continuar o nos detenemos a debatir quién de los dos dejó quemado al otro primero - Se limitó a sacarme la lengua en actitud infantil y no pude evitar sonreír, siempre era tan, tan ella- Bueno como te decía, cuando llegamos a su casa nos dirigimos al salón. Mientras Viktor nos contaba su brillante idea, nos tomamos unas copas.

Como debes deducir ya el escenario estaba listo. Solo faltaba ultimar los detalles para recrear la situación de forma tal que nos excitara a los tres. Una simpleza si me preguntas.

De más está decirte que estaba impaciente. No es la primera vez que participo en un trío. Pero nunca había participado en una historia de esas y estaba loco por vivir la experiencia y más, cuando ya nos había dicho lo que haríamos.

No recordaba que Ky fuese tan baboso. Estaba convencida que estaba dilatando la historia para martirizarme. Si hubiese sabido que se tomaría al dedillo mi frase de: no omitir detalles me hubiese mordido la lengua en aquel momento. Aunque no pensaba hacerlo ahora tampoco- Ky me van coger las calendas griegas, navidad, año nuevo. Y todavía no sé de que va todo.

- Amor, tienes un arte para destruir lo bello. No seas deseperada, la paciencia es una virtud sabías?

- Lo que tu digas, cariño. Ahora deja de andarte por las ramas.

- La habitación recreaba una consulta Odontológica. Cariño, salvo por algún que otro detalle hubiese sido la gemela de la mía. Nunca imaginé que Viktor fantaseara con eso. En fin, Julio era el paciente, Viktor el asistente y como es lógico yo debía representarme a mi mismo. Cuando todo quedó orquestado. Comenzó el show.

Comienzo de la Narración

Estaba organizando el material que utilizaría Ky en la supuesta consulta, cuando él entró.

- Buenos tardes Viktor, confirmó la cita con el paciente de esta tarde - Por un instante se me perdieron los papeles. Mi mente quedó en blanco, se veía tan caliente con ese vestuario. Este se ajustaba a su cuerpo como un guante. Por encima de la tela se podía apreciar el resultado de horas dedicadas al gimnasio. Debo recordar preguntarle como logró meterse en esos pantalones, por Dios. Esto apenas comienza y ya quiero penetrarlo.

Podía ver el deseo danzando en la mirada de Ky. Ninguno sabía como estaría vestido el otro y me complació ver que su ropa le quedaba mejor de lo que había imaginado. A pesar de que no visita el Gym posee buen cuerpo y esa pose de niño fino y educado. Siempre me han insitado a corromperlo. Ya habría tiempo para eso - Si Dr. Morris. Casualmente está en la sala de espera aguardando su turno.

- Hágalo pasar - logré articular a duras penas.

Cuando pasó por mi lado para salir de la habitación enmudecí por completo al observar que nada cubría su glorioso trasero.

Crisálida Donde viven las historias. Descúbrelo ahora