Tú y yo, una historia sin fin!

Malditos celos!

Al parecer toda mi familia se empeño en ir a la procesión del viacrucis, yo la verdad no creo en eso de las religiones, obviamente creo en Dios pero opino firmemente que la iglesia es sólo una mafia que busca gobernar al mundo y por eso no me apetece ser partícipe de este tipo de eventos, como se que Stiwar tampoco irá me decido por ir a buscar algo de ropa a mi mochila, y meterme a la ducha., Quizá hoy me haga el día al lado de el. Cuando salgo del baño me visto con un jean, una playera negra y unas sandalias del mismo color! Me peino y me maquillo un poco, para luego proceder a bajar a casa de mi primo.

Nuevamente me vienen esos lindos recuerdos de mi niñez, es increíble el estado de tranquilidad que me produce estar en este lugar, rodeada de la naturaleza, siento como si no necesitará nada más que estar caminando entre bosques y montañas, bajo la esplendorosa luz del sol, viendo como pastan las vacas y los caballos., Voy escuchado las canciones que me dedicó Derek, no puedo parar de hacerlo me siento tan plena y enamorada! En este momento sólo me falta el, tenerlo a mi lado, poder agarrarlo de mi mano y caminar con el en medio de este majestuoso paraíso, paraíso que me alimenta el espíritu, no se si es por que desde niña pertenezco a este lugar o por que sencillamente amo la naturaleza, sus sonidos y la tranquilidad que me proporciona.

Cuando llegó a casa de Stiwar lo llamó con un grito que hizo eco a través de las montañas, el de inmediato sale no hubo necesidad de tocar la puerta., Me entrega un casco de los dos que tiene en sus manos y procedemos a subir por una colina hasta llegar a casa del tío Tomás en donde esta parqueada la moto. Mientras vamos subiendo recordamos nuestra Infancia, nuestro supuesto "Amor" según Stiwar yo fui quien terminó con todo cuando me metí con Ian, y pues si, el cada seis meses esperaba ansioso en su pueblo a que yo llegara a pasar vacaciones, eso fue así por dos años y medio aproximadamente, pero luego apareció Ian y todo terminó, comencé una relación con el y eso implicó terminar mi "Extraña e inocente" relación con mi príncipe azul., La cara de Stiwar no está en su estado natural, "Risueña" creo que aún le afecta lo que pasó ocho años atrás. El es un chico muy dedicado a su estudio y a su trabajo a esto sumándole que es bastante serio y tímido, imagino que esto ayuda a que no pueda conseguir una buena mujer para su vida, quizá el no se preocupe por más que por sus ocupaciones.

Siempre se a sabido que en el corazón nadie manda y este es mi único argumento a la hora de defenderme si alguien me pregunta el por qué no me di una oportunidad con Stiwar, yo me enamoré perdidamente de Ian, el me enseñó otro mundo, a su lado supe que era el verdadero amor, con mi primo sólo fue un romance de niños, simple gusto, ganas de verlo cada seis meses y bla bla bla.

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Llegamos al pueblo y buscamos un parqueadero para dejar la moto y proceder a buscar un restaurante son más de las dos y media de la tarde y tenemos demasiada hambre, esa es una de las cosas que tenemos en común Stiwar y yo! Comemos por tres.

Caminamos bastante, como es viernes santo y este pueblo es uno de los más visitados por los fieles creyentes, todos los restaurantes están llenos, la gente sale de la procesión y van a cualquier lugar con su familia para comer, le hemos dado ya dos vueltas al parque del pueblo, cada vez el hambre es más grande pero se nos olvida al ver tanta gente que nos ocasiona risas, lo sé! Iremos al infierno por reírnos de los demás, pero sencillamente tengo para decir en nuestra defensa que hay personas muy chistosas, el niño que se cae de la silla, la señora que se dobla el pie caminando por estar distraída., Stiwar es el maldito diablo en persona, pero así lo adoro, con el puedo ser yo misma sin miedos, sin tabús y sin hipocresía.

Como todos los restaurantes están a reventar y al parecer también nuestra cabeza del dolor por el hombre y el fuerte sol que está haciendo en esta tarde, optamos por ir por la moto y recorrer la autopista principal haber si hay algún lugar con mesas desocupadas.