Everyone Loves Stiles

Parte 16

Derek sintió el quejido antes que oírlo.

Más tarde se daría cuenta de lo extraño que era en el fondo aquello y que nunca antes había tenido una conexión tan profunda con otra persona, pero en ese momento solo pudo correr hasta el sofá en que Stiles seguía dormido y sufriendo una pesadilla.

La manta con que le había tapado cuando tuvo que levantarse y ya no pudo seguir proporcionándole calor ahora solo tapaba parte de su cuerpo. El pecho sudoroso quedaba a la vista y nunca le pareció tan pálido como estaba ahora. Si acaso cuando aquel odioso ser, el Nogitsune, seguía emperrado en usar a un mortal para conseguir su objetivo de venganza.

- Stiles – Derek se arrodilló junto al sofá pero se obligó a no zarandearle para despertarle en seguida. Simplemente depositó una mano en su pecho - Shhh. Tranquilo.

Stiles siguió moviéndose y murmurando por lo bajo, mas no salió de su boca una sola palabra entendible. Tan solo gemidos y sollozos ahogados que aumentaban de velocidad al mismo tiempo que nuevas gotas de sudor empapaban su pecho desnudo. Derek apretó un poco más la mano al tiempo que cogía con delicadeza una de las manos de Stiles.

En cuanto sus dedos estuvieron en contacto Stiles soltó un quejido más alto que el resto, al tiempo que abrió los ojos de par en par y se incorporó en el sofá.

- Tranquilo – no soltó la mano por mucho que Stiles intentó liberarse, todavía confuso – Tranquilo, estoy aquí.

- ¿Derek? – preguntó, más confuso que antes, sorprendido por encontrarle tan cerca.

- Estoy aquí – llevó la mano libre hasta la mejilla y la apretó con cuidado - Sólo ha sido un sueño.

Stiles tembló ante el contacto de la mano pero en seguida colocó la suya propia sobre la de él, apretándola con fuerza para no dejarla escapar. Y cuando tuvo claro que no lo haría, pasó los dos brazos por el cuello de Derek y le abrazó con todas sus fuerzas, sintiendo en seguida los brazos de Derek por su espalda, estrechándole con menos fuerza de la que realmente desearía.

No se separó de él hasta que Stiles no dejó de temblar, casi cinco minutos después.

- ¿Estás bien? – preguntó mientras se sentaba en el sofá, sin ninguna intención de alejarse de él.

- Sí – Stiles se restregó la cara, luchando por terminar de alejar la mala sensación – Dios. Espero que estas pesadillas acaben pronto o acabaré volviéndome más loco de lo que ya estoy.

- Es difícil lidiar con las cosas que hemos visto... Requiere su tiempo.

- Tiene gracia que eso lo diga justo el tipo que se murió.

El comentario se clavó en el pecho de Derek como si hubiera sido una bala en vez de palabras.

- Lo siento – murmuró en voz tan baja que apenas se oyó.

Y por si no hubiera sido ya extraña la respuesta de Derek, lo fue aún más el hecho de que bajara la vista cuando habló, como si le diera vergüenza confesar algo así.

- ¿Por qué lo dices como si fuera culpa tuya? No creo que nadie que se muera lo haya hecho a posta.

- No – admitió, aún serio - Pero si no hubiera actuado como lo hice no habría acabado así.

- Vamos. Siempre has tenido complejo de héroe... - trató de animarle, todavía sin tener muy claro por qué debía animarle - Y te aseguro que si no fuera así no me habría fijado en ti. Así que ni se te ocurra pedir perdón por ser como eres.