In my dreams [ImJaebum]

Cerca (pt2)

-No puedo seguir pagando mi habitación, así que aquí tiene lo que corresponde por esta noche.

Le dije a la joven recepcionista del hotel, luego de haber pagado la que sería la última noche en aquel lugar. Todavía pensaba en lo sucedido en el lugar de comidas. ¿Quizá existía una razón para que ella saliera disparada de la manera en que lo hacía? Quiero decir, no solamente pasaba en los sueños, sino también en la realidad.

"...Necesitábamos conocernos para saber lo que es el amor." Le dije alguna vez en uno de los sueños. Ahora no estaba tan seguro. Me frustraba el hecho de haberla tenido tan cerca en tantas oportunidades, pero nunca haber llegado a saber su verdadero nombre, o tal vez, escuchar su voz. Tenía tantas expectativas acerca de esa mujer. Quería saber si la sensación de mi cuerpo cerca del suyo era la misma, si sus manos acariciarían mi rostro de la misma manera, si su aroma era al menos parecido al que inundaba mis ensoñaciones...¿Era esa la razón por la que nuestras existencias no podían encontrarse? Pensaba en lo grande que sería la decepción si aquella mujer no era todo lo que esperaba que fuera. Pero aun así, no podía alejarme de ella.

Tirado sobre la cama, le daba vueltas al asunto miles de veces. Posibles maneras de iniciar una conversación, situaciones que nos llevaran a encontrarnos otra vez...todo se amontonaba en un tumulto de pensamientos que no tenían fin y no me dejaban conciliar el sueño. Giré sobre mi espalda y mi rostro se encontró nuevamente con la chaqueta negra sobre el sillón. Allí estaba mi ticket hacia el esperado encuentro.

Mis planes fueron derrumbados un segundo después al recordar que debía sacar todas mis cosas de la habitación a la mañana siguiente. El dinero no iba a ser suficiente para quedarme por más tiempo así que tenía que empacar antes del amanecer. Tomé el abrigo y lo guardé junto al resto de mi ropa en la valija. Esperaba obtener alguna otra oportunidad para acercarme, pero por el momento, lo importante era encontrar un lugar para vivir.

Uno de mis compañeros de trabajo (también transformado en ex empleado de esa cafetería), me ofreció quedarme con él, después de enterarse que había terminado mi estadía en el hotel. Acepté, agradecido por su generosidad y prometiéndole hallar un apartamento por mi cuenta cuanto antes. La mudanza no fue tan traumática como pensé que sería, puesto que salí de esa pequeña habitación de hotel con la misma única valija con la que había llegado al pueblo hacía un par de meses atrás. La convivencia tampoco fue para nada desagradable pero luego de pasar unas cuantas semanas allí, sabía que debía apurarme con eso de encontrar mi propia casa.

-¡Por fin encontré trabajo!

Escuché en forma de grito incluso antes de visualizar la figura de mi amigo en el living.

-¿Recuerdas la tienda que está al frente de la cafetería?

¿Cómo no recordarla?

-Tengo un conocido allí y me dijo que podría ayudarme a conseguir un puesto. Está hecho ¡ya no soy un desempleado!

Compartí la alegría con aquel generoso amigo y al mismo tiempo sentía celos. ¿Qué tan maravilloso hubiera sido que fuera yo a quien contrataran en esa tienda? No necesitaría seguir buscando excusas. Sacudí esos maliciosos pensamientos al mismo momento en que me preparaba para servir la cena que había estado cocinando.

-Tengo otra buena noticia.

¿Sería esa buena noticia que había conocido a Ana? "Detente Jaebum", me dijo mi conciencia antes de volver a prestar atención a lo que la persona sentada en frente mío decía.

-Hoy mientras hablaba con este amigo que me ayudó con lo del trabajo, me dijo que estaba pensando mudarse a un nuevo vecindario. Su departamento va a quedar desocupado mañana mismo ¿Qué te parece si vamos a verlo?