El sueño y la pequeña niña...¿Bianca?

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Jason

No maté a Lu. No fue necesario, pues ella huyó después de matar a su hermano.
Yo me quedé con él un rato y no pude dejar que algunas lágrimas se deslizaran por mis mejillas. Y es que Stefan apenas había llegado al campamento y era una buena persona.
Pero las mejores personas siempre mueren primero.

El antídoto sí estaba en la bota de Lu. Logré quitársela antes de que se fuera. Prácticamente me aventé a su bota, y ella no se opuso. Parecía que estaba en shock por haber matado a Stefan. Creo q eh por eso huyó.

Fui corriendo hacia la enfermería, en donde había mucha gente rodeando este lugar. Muchos trataban de entrar, pero nadie podía. Annabeth, Piper y Percy estaba más adelante, viendo la forma de entrar.

Entonces Piper comenzó a hablar. O más bien, a convencer a quien sea de que estuviera adentro, de dejarlos pasar. Me dieron ganas de hacer lo que fuera para que ella pudiera pasar, incluso hubiera golpeado con mis manos la pared.

La puerta cedió y nosotros (Percy, Piper, Annabeth y yo) pudimos pasar.

Will y Lou Ellen se encontraban peleando con unas cosas extrañas. Eran negras con destellos rojos.

—Un poco de ayuda no iría mal—mencionó Lou mientras hacía que una de esas criaturas se encendiera en llamas.

Todos comenzamos a pelear y al mismo tiempo a proteger a Nico.

—Will, el antídoto—dije mientras lo tomaba por los brazos.
Ya solo quedaba un de esas criaturas, pero Annabeth lo mató justo a tiempo.

—Gracias—sus ojos brillaban de esperanza y tomó el pequeño frasco—¿Y Stefan? Él estaba contigo, ¿no?

Al ver que yo no respondía, la mirada de él se tornó seria. Yo miraba el suelo y sabía que Will me miraba directamente. Quería que yo le dijera que Stefan estaba bien, sin embargo lo era así.

—Lo siento— dije levantando la mirada—. Ella lo mató. No pude hacer nada, pero él logró conseguir el antídoto para Nico. Stefan no murió en vano.

Ahora todos escuchaban lo de la muérete de Stefan.

—¿Fue Lu?—preguntó Piper. Yo asentí y ella dijo algo como: Lo sabia.

—P-pero...él no merecía esto—dijo Will a punto de llorar—. Dioses...me siento tan mal.

Percy abrazó a Will y poco a poco todos fuimos abrazándolo.

—Stefan habrá muerto en vano si no preparamos esa cosa para Nico ahora—dijo Lou Ellen separándose del abrazo consolador.

Todos asentimos de acuerdo y no pusimos en acción.

Nico

Estaba bastante seguro de que no estaba muerto, pero entonces ¿por qué no podía despertar?
Sentí dolor, mucho dolor.
Soñaba que mi cuerpo estaba pudriéndose y Will lloraba porque no había nada que me salvara.
Yo no quería ver a Will sufrir.

—Estoy bien, estamos bien—dije mientras abrazaba a Will, pero él no me escuchaba.
Pronto descubrí que no lloraba por mi, sino por Stefan. Él estaba muerto.

Todos estaban reunidos y rodeaban algo.
Pronto descubrí que era a él.
Entonces, algo extraño pasó.
Reconocieron a Stefan. Dos antorchas cruzadas aparecieron arriba y todos se quedaron asombrados.

Mi sueño cambió y ahora estaba en un lugar oscuro. Poco a poco la luz se hace presente.

—¡Te extrañé pequeña!—decía Will a una pequeña niña de cabello negro—.Tu padre está aquí también.

Entonces apareció un yo pero más grande.
Estaba sonriendo y corrí a abrazar a la pequeña niña.

—Sííí. ¿Podemos jugar?—preguntó la niña mientras sonreía y me abrazaba.

—Claro que sí—alguien tocaba la puerta y aparecieron Percy con cabello rubio y Piper pequeña. No entiendo nada.
Entonces me di cuenta. Eran sus hijos.

Pronto llegaron sus padres detrás de ellos.

—¡Feliz cumpleaños Bianca!—gritaron todos. Percy pequeño se acercó a la tal Bianca y la abrazó.

Will carraspeó y los separó.

—Aquí no, jovencitos—dijo. Yo reí y lo abracé.

Comencé a sentir un dolor horrible en la cabeza. No era parte del sueño, eso era seguro.
Sentí que mi cuerpo se movía y mi cabeza estaba a punto de explotar.

¿Me estaba terminando de morir?

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Estoy viva! No se alarmen.
Perdón por no actualizar, pero he estado muy ocupada con la escuela. Prometo actualizar más seguido. Enserio.

SolangeloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora