Sanguinem (Primera Parte)

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¡Hola gente detrás de la pantalla! 

Los personajes y la historia no me pertenecen, todo es de Takaya Kagami.

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-¡Shi-chan!

-¡Derríbalo, Tenjiryu!

-¡Gekkoin!

Los ataques de los tres chicos no hicieron efecto en la barrera impuesta por Yukiteru. Kimuzuki, Mika y Yuichiro intentaron penetrar en la niebla pero está parecía ser irónicamente dura y muy densa.

-Es inútil-dijo Yuki, sentado de piernas cruzadas en el suelo mientras miraba y balanceaba vagamente su espada-. No van a poder destruir esta barrera, es irrompible por al menos tres horas. No pueden salir. A menos claro, que yo la deshaga, pero no lo haré hasta que me escuchen.

-¡¿Por qué hacen todo esto?!-gritó Yuichiro.

El niño seguía sin mirarlos, absorto en su espada.

-Siéntense-pidió señalándo el piso.

-¡¿Nos mantienes cautivos y encima nos das órdenes?!

-Siéntense-repitió el chico.-Me he comprometido a explicarles y eso es lo que voy a hacer, si me escuchan, retiraré la barrera más rápido.

-¡Tsk! Te escuchámos...pero me quedaré parado.

-Como quieras. Zeidakiel ¿no es ya el momento de explicarles?

La pequeña niebla negra giró sus ojitos hasta su usuario.

-¿A estos? Sus cabezas están vacías no van a retener nada de información.

-¡No hables así!

-¡Oh~! Que sensible Yuki~...¿Te puso así el que la tonta rubia esa te pusiera en esta situación~?

-¡Tampoco te refieras a Meri de esa forma!-gritó el chico ya mostrándole los dientes a su espada.

-¡Hey! ¡Ustedes dos! Me gustaría salir de aquí hoy...-les dijo Mitsuba .

-A-Ah sí...Perdón, este idiota me saca de quicio.

-¡¿A quién llamas idiota?!

-¡Cómo decía! Primero, les explicaré algo sobre nosotros. Yo, tengo un contrato con este pesado, su nombre es Zeidakiel. Aúnque es irritante y muchas veces me dan ganas de matarlo, el desgraciado es bastante útil: puede manipular a cualquier ser que se encuentre a un radio de 20 metros de mí; miren-le hizo una seña a su arma y del piso salieron unos brazos negros que agarraron a Yuu y lo hicieron sentarse a pesar de lo mucho que este se retorcí , ja ¿Ven? Obtuve esta espada de la Serie Demonio Negro cuando era más pequeño.

-¿C-Cómo es eso posible? Nosotros ya no estamos ligados al Ejército Demoníaco Imperial Japonés, y aúnque lo estuviésemos, es muy imprudente darle un arma de esa categoría a un niño-dijo Shinoa.

Yuki la miró algo conmovido.

-No puedo decirles eso aún.

-¿Y...que hay de Meri?-preguntó Mikaela recordándo como ella había acabado con el Jinete.-¿Su espada también es de esa categoría?

-No estoy autorizado a contar ese tipo de cosas.

-¿Autorizado?-susurró Yoichi.

-Estoy tratándo de cumplir la mayor parte de las reglas que me han dado antes de venir a este tiempo, pero, desgraciadamente eso no se me dá muy bien. Romperé una y les diré adónde a ido Meritsa.

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