My Personal Stalker •Markjin•

Mark

Una vez más, está sentado donde mismo. Está comiendo fruta que está servida dentro de un vaso de plástico. No hay nadie más a su alrededor. Quizá podría ir a hablarle.

Anda JinYoung Intento alentarme a mi mismo. Mis piernas no responden y solo puedo mirarle.

Mi nombre es Park JinYoung, y estoy enamorado.

No estoy seguro de si él sabe de mi existencia, y rezo porque así sea, pero de algo estoy seguro. Estoy enamorado de él.

¿Por qué?

Bueno, desde la primera vez que lo vi me llamó la atención todo de él.

Era un día como cualquiera, si no recuerdo mal, fue por las fechas de octubre, hace dos años. Yo estaba esperando un taxi para volver a casa y de la nada, comenzó a llover. Era una tormenta.

No había llevado sombrilla, por lo que me vi obligado a tomar refugio. Termine por quedarme dentro de una pequeña librería. La lluvia seguía y parecía no parar, por lo que para matar el tiempo me puse a ver los libros que se encontraban ahí. Nada interesante.
Finalmente encontré un libro que prometía ser interesante y me acerqué a la caja para pagarlo.

Y ahí estaba. Mark Tuan.

Me sonreía amablemente. Yo estaba algo torpe al darme cuenta de esto, por lo que sin querer deje caer el libro antes de ponerlo en la mesa para que él pudiera cobrarme.

Él se pasó del otro lado del mostrador y me levanto el libro. Para ese momento, ya estaba muy sonrojado.

<<Ten cuidado>> Me dijo él mientras se pasaba del otro lado del mostrador. Yo no podía hablar, estaba estático y solo mi cuerpo se podía mover. No mis labios.

Tras pagar, me quedé mirando la calle aún dentro de la tienda ya que aún seguía lloviendo a cántaros.
Aún estaba algo sonrojado y la imagen de Mark sonriendo me daba vueltas por la cabeza.

Sin previo aviso, sentí una mano sobre mi hombro.

<<Ten, no vaya a ser que pesques un resfriado>> Me tendió una sombrilla al tiempo que me daba unas monedas <<No sé si tienes el dinero necesario para pagar un taxi, así que tómalo como un obsequio>> No podía dejar de mirarle. Era precioso y sumamente amable.
<<Gracias...>> Fue lo único que pude decirle esa vez.

Desde entonces no pude sacármelo de la cabeza y cada ves que pensaba—y pienso–en él no podía—puedo—evitar sonrojarme.

No tarde mucho en descubrir que ese chico amable y guapo de la librería iba en mi escuela, un año más que yo y que su nombre era Mark Tuan.

En la escuela nos topamos seguido y el siempre me sonríe y saluda. Yo intento hacer lo mismo, pero solo consigo sonreír de manera no muy sexy y salir corriendo para no volverme loco.

Ah estas alturas, creo que ya debería decirle lo que siento puesto que en varias ocasiones Mark me ha descubierto mirándole, y aunque nunca me diga que le incomoda o cosas por el estilo, siento que no es correcto y que ya debería de salir de mi zona de comfort.

Click.

Una foto más para mí álbum personal.
Ah... Pronto se lo diré, y ya no tendré que imaginarme historias de nuestro amor que aún no pasa, porque lo tendré para mí y solo para mi.

Nos tendremos el uno al otro y nada nos hará falta.

Muy pronto Mark Tuan... Te lo aseguro.