Suspiro una vez más.
Mi corazón late nuevamente, una y otra vez. Este sigue amenazando con salir de mi pecho, dejándome así sin vida.
El momento que tanto había esperado había sido interrumpido.
Y esta vez sí tenía miedo, como las demás veces, de lo que podía pasar.
Abro mis ojos y puedo ver a Daniela aún con sus ojos cerrados.
Miro con cautela sus pestañas, largas y hermosas.
Mis sentidos están colapsados, no reacciono.
Por un momento olvido quien sea que esté detrás de mí, y me concentro. Pienso un momento en si hacerlo o no, pero algo me lo impide.
El miedo.
¿El miedo?, Sí El miedo. Miedo a saber que siente ella por mi, miedo de no saber que pasará si hago esto. Miedo de que me rechace y quedar así como un bobo.
Suspiro una vez más.
Y aún siento mi pecho acelerarse constantemente.
Muchas cosas pasan por mi mente, entre ella las cosas buenas que podrían pasar si ella sintiese lo mismo por mi.
Podría besarla y ser correspondido, después de eso seria mi vida más fácil. Fácil, es algo simple.
Oh también, podría besarla y salir corriendo, pero no, ese no.
Oh tan solo podría no hacerlo, y lo único que haría seria olvidar que alguna vez estuve a punto de besar a la chica de mis sueños, a la chica de la cual siempre he estado enamorado.
Olvido todo lo que está a mi alrededor e incluso a la persona que me ha hecho pensar tanto, olvido que podrá pensar si la beso.
Tan solo acaricio su mejilla, miro sus labios carnosos, pero finos, hermosos y tan deseables de besar.
Sonrío, aún tiene sus ojos cerrados, su semblante no tiene ninguna articulación.
Soy correspondido al instante en el que tomo valor y presiono mis labios contra los suyos, sus labios húmedos, carnosos, salvajes pero ingenuos son sabrosos.
La estoy besando y es algo que no puedo creer.
*
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Te reto a ti... ©
Novela Juvenil"A veces, el amor llega sin ser correspondido." ©Todos los derechos reservados. ©Prohíbida la copia o adaptación. Publicada: 12/Jul/2016. Terminada: 08/Ago/2017.
