Golden eyes [TW]S.s

veintisiete

La bete

Lena no tenia idea de donde fue a parar Liam pero sí sabía en donde se encontraba la bestia.

Frente a ella.

Las balas no funcionaban contra la bestia y tampoco le quedaban alguna, entonces empezó a correr hacia la escuela, en donde todos se encontraban y en donde había dejado su bolso con más de sus armas allí.

Todo era un caos, sangre por aqui gente herida por allá, esto no se podía parar. Rugidos se escuchaban detras de ella, asi que corrió los mas rápido que pudo y entró a la escuela. Una chica rubia estaba tirada en el suelo con sangre en la cara y sin poder moverse por lo shockeada que estaba. Lena se agachó y la tomó por lo brazos, tratando ayudarla pero estaba inmóvil, no podia moverse. Alguien la tomó e hizo que se parara, Lena giró a ver quien era y era Scott, el cual estaba todo ensagrentado y herido.

—¡Vamos, Lena entra! — le ordenó y entraron en unos de los salones. La chica estaba tirada en el piso y Scott estaba contra la puerta, todo allí estaba en silencio y lo unico que se escuchaba era las grandes pisadas de La bestia.

— Salgan por la ventana — les dijo y la puerta empezó a temblar, una sombra negra estaba tras esta—¡Salgan, ahora! — gritó y la chica rubia fue la unica que se levantó y salió.

— Yo no me ire sin tí, Scott —espetó la chica, él la miró de mala manera y la puerta empezó a temblar mas fuerte, vidrios salieron volando hacia ella debido a la fuerza que estaba haciendo la bestia para entrar.

— ¡LENA, VETE! — gritó, pero era en vano, ya que la chica no se movería de allí, no sin él.

De repente, la puerta fue arrancada llevandose a Scott con ella.

— ¡NO! — gritó ella  y salió lo más rápido del salón para seguirlos, pero ya era tarde.

Habian desaparecido.

                                      ***

Lena seguía su instinto, el cual le decía que Scott se encontraba en la biblioteca.
Ya con sus armas cargadas abrió las puertas de la biblioteca y allí los encontró, Scott y Liam luchando contra la bestia. Como ella veía que las cosas no iban muy bien empezó a disparar y a los segundos se le unieron Malia y otra chica, con su gran escopeta.
Lena observó a la morena junto a ella, tenía un gran manejo de la escopeta pero no podía decir si era o no una cazadora.

—¡Braeden!— gritó ella al notar la mirada de Lena — ¡Mercenaria!

—¡Lena!— le contestó de la misma forma después de cargar su arma y volver a disparar
—¡Cazadora!

Tras recibir varias balas, la bestia se giró y, en ese momento, Lena podia jurar que, por un instante se le quedó mirandola fijamente.
La cazadora sintió un escalofrío pasar sobre ella cuando esta la miró, el mismo escalofrío que sintió cuando Mason le había tocado el brazo esa mañana.

El mismo escalofrío...no, no pude ser, él no.

La bestia les dió una ultima mirada y saltó sobre la ventana, generando un gran estruendo.

— Tengo su aroma — soltó Scott

— Y yo creo que sé quién es la Bestia.

                                      ***

— ¿Lena, estás segura?—preguntó Liam — ¿Estás segura que es él? — La chica asintió.