Golden eyes [TW]S.s

treinta y siete

Sebastián

Lena sentía como si la estuvieran sacudiendo y eso hizo que despertara de a poco.

—Lena tienes que despertar —una voz conocida hizo que abriera los ojos, alarmada por lo que había pasado.

—Lena, tanto tiempo —sonrió él.
Lena no creía lo que sus ojos estaban viendo y volvió a cerrarlos fuertemente.
—Soy yo, Novata, abre los ojos —Lena volvió a abrir los ojos, despacio, temiendo por lo que veria.

Al abrirlos por completo, lo vió.

Era Sebastian, tal como ella lo recordaba, radiante y con una gran sonrisa en su cara. Lena no tardó en levantarse y abrazarlo, sus ojos estaban llorosos, al parecer, lagrimas amenazaban por salir.

—¿En serio eres tú? —preguntó ella sin creerlo.

—¿Quién crees que estuvo salvandote el trasero todo este tiempo? —espetó gracioso

—¿Eras tú? ¿Él que me pedía que despertara? —asintió —¿Estoy soñando?

—Algo así —dijo él y las esperanzas de Lena bajaron, ella deseaba que fuera real —Estoy aqui para ayudarte, Len.

—¿Ayudarme a qué? —preguntó desentendida

—A perdonarte, Lena —frunció el ceño —Tus sueños tienen que parar, tienes que parar de sufrir y para eso estoy aquí.

                                     *

Scott estaba preocupado, despues de lo que habia pasado con Lena no pudo concentrarse. Estaban en los tuneles, con Liam y Lydia, tratando de llamar a Lena, pero ella no contestaba.

—Lena no contesta —les dijo a sus amigos —Estoy preocupado ya que ella me mantendria informado sobre lo que hacia Theo.

—¿De qué hablas, Scott? ¿Por qué la mandaste con él? —escupió Liam.

—Era parte del plan, me mantendria informado con llamadas, pero lo que pasó entre nosotros, fuera del hospital, eso no estaba planeado.

—Tampoco estaba planeado esto —mencionó liam, observando el
suelo que estaba mojado.

—¡Lydia, sal del agua! —empujó a la chica y a los segundos una corriente de electricidad los atacó.

                                      *

—No entiendo —soltó Lena —Yo me perdoné hace ya varios años por lo que te hice.

—Eso es lo que crees, pero Lena seamos sinceros, tu no te has perdonado —le reprochó Sebastian y Lena se negó a escucharlo.

Tenía a su hermano junto a ella y lo ultimo que queria era pelear con él.

—Lena, piensalo bien, todas esas pesadillas sobre mi y el día de mi muerte, no sólo son pesadillas, eres tú reviviendo una y otra vez todo el dolor y el odio que sentiste. Eres tú culpandote una y otra vez.

—Bass, yo ya me perdoné lo que te hice, me perdoné haberte disparado varias veces sin una pizca de piedad, me perdoné no haberte prestado atención cuando me dijiste que me quede cerca, también me perdoné haber sido una idiota, me perdoné haberte matado sin darme cuenta que eras tú. —un dolor en el pecho crecía en Lena, no era tristeza sino que era odio puro hacia ella misma, delatando que todavia seguia sin perdonarse.
—¡ME LO PERDONÉ, TE LO JURO! —Lena se separo de él y enterro su cabeza entre sus piernas soltando gritos desgarradores y repitiendo varias veces que se odiaba.

—Len, por favor, miráme —pidió sebastian, pero ella negó rotundamente —Lena, si no te perdonas morirás.

—No me preocupa morir, no le temo, no cuando me la merezco.

—¿En serio piensas eso?¿piensas que mereces morir? —Lena asintió —Eso es algo egoista, Len.

—¿Egoista? ¿Para quién?

—Para los que te quieren, para Stiles, para Scott...para la manada en la que perteneces —Lena fue calmandose de a poco y empezó a entrar en razón —Para mamá y papá...

—Ellos estaran mejor sin mi —setenció, negandose a todo lo que él decia.

—¿Tú estuviste mejor sin mi? ¿Nuestros padres lo estuvieron? —Sebastian estaba perdiendo la cabeza tratando de que su hermana deje se ser tan terca. —Piensa en como sentirian si te pierden...¡PERDONATE DE UNA MALDITA VEZ! —gritó y pasó sus manos por su cabello — Yo ya te he perdonado, Len...

Lena no paraba de llorar, las palabras de su hermano de alguna manera le dolian, le dolia que él tuviera razón.

—No me perdonaré nunca, Bass . Es inutil que sigas intentando

—¿Por qué?

—¡PORQUE SI ME PERDONO TE PIERDO PARA SIEMPRE! —soltó y un alivio paso por su cuerpo. Sebastian la miró con tristeza y la abrazó —No quiero perderte Bass...

—Nunca lo harás, siempre estaré contigo no importa qué —él deposito un beso en la frente de su hermana —Te perdono, Lena.

—¿En serio? —él asintió

—¿Te perdonas tú? —sus ojos verdes se clavaron en ella, demostrando todas sus esperanzas en ellos.

Lena lo pensó y sí, ella quería perdonarse, queria que las pesadillas pararan, queria tener una vida "normal", sin miedo a lo que pasará sin perder el control.

—Si bass, me perdono —sonrió entre lagrimas al igual que su hermano —Te extrañare...

—Yo también Novata —sonrió al recodar como la apodaba —Creo que ese apodo te queda chico —rieron los dos —Te amo Lena, diles a nuestros padres que los extraño y que también los amo.

—Yo también te amo bass y no te preocupes, se los diré —se abrazaron por ultima vez deseando que durara para siempre.

                                     *

Lena despertó, deseando que lo anterior, lo de su hermano no haya sido un sueño.

Se levanto, tambaleó un poco ya que estaba algo mareada por el fuerte golpe que Theo le habia dado, frotó sus ojos y algo le llamó la atención, el muro del Hellhound y La bestia ya no era el mismo, habia una parte que se habia revelado.

Al acercarse notó que un pedazo del muro habia caido, lo que revelo mas sobre el retrato.

Una persona, para ser mas exacto una mujer, que sostenía una lanza — la lanza de los Argent — y tenía algo más.

Tenía los ojos dorados.

      

[EDITADO]