La princesa de los vampiros

El día del chocolate

Había llegado al dormitorio de la chica sin ningún problema incluso la ojiperla no hizo un solo gesto cuando la recostó en la cama, al principio no sentía nada pero ahora una extraña y cálida sensación le había invadido ¿Qué le sucedía?...

- "Imaginaciones mías seguro"- pensaba el joven mientras la observaba dormir se agacho hasta quedar a la altura de su rostro.

Solo permaneció en silencio, observando cómo los colores que se habían instalado en el rostro de la peli azul poco a poco se iban disipando, provocando que una sonrisa de satisfacción se apropiara de sus labios.

Los segundos iban pasando, y aquel pelinegro permanecía de la misma manera, solo el tictac del reloj que permanecía colgado en una de las paredes del cuarto era lo único que se escuchaba. Perdido en alguna parte de la tranquilidad que aquella morena reflejaba, se hallaba un chico de ojos negros como la noche, apreciando como el suave aire ingresaba por aquella fina nariz, para luego salir con la misma pasividad.

- "Increíble que pueda dormirse así como así- pensaba para sí mientras seguía hipnotizado en aquella luz que Hinata reflejaba. Con cierto cuidado e indecisión fue guiando una de sus manos hacia la piel de su rostro, pero se detuvo justo en el momento en que sus dedos iban a rozar sus pómulos. Solo siguió el contorno de sus mejillas, con cuidado de no tocarle, dirigiéndose con delicadeza hacia aquella boca color cereza, y detenerse ahí.

Un suspiro escapo de la boca de aquel azabache, de pronto todo se había oscurecido solo estaba ella y el, pero lo que el pelinegro no se pudo dar cuenta es que sus manos ahora estaban tan cerca del cuello de la joven sus labios estaban a punto de tocarlo cuando...

- Sasuke, es que acaso la sangre de Hinata es tan...dulce...- escuchó una voz a sus espaldas, detrás de él se encontraba Itachi.

- Lo siento mucho pero...-no podía ocultarlo más debía decírselo, pero nuevamente retrocedió en verdad no quería preocuparlo- olvídalo...

- Solo déjame decirte algo Sasuke si te atreves a poner un dedo encima de Hinata – se acerco a su oído y susurro despacio- te ma...to...

La voz de Itachi no reflejaba duda alguna, estaba decidido. Sasuke bufó molesto mientras se alejaba de la habitación con las manos en los bolsillos mientras le lanzaba un "si tú lo dices...". No podía sentirse más molesto, a pesar de ser su hermano nunca había pensado en la posibilidad pero le resultaba realmente fastidioso el simple hecho de que tal vez Sasuke se estuviese "enamorándose" de Hinata, no era imposible era algo realmente imposible tal vez simplemente había sido un accidente. Observo el cuerpo de la ojiperla, no, estaba seguro que lo que la ojiperla sentía, el no debía dudar de ella... pensó mientras empezaba a acariciar el cabello de la peli azul y depositaba un suave beso casi cerca de los labios de la chica suavemente para no despertarla comenzó alejarse de ella, pensando en lo ocurrido.

Para él todo volvía a la normalidad nuevamente sin darse cuenta que aquello fue más que una simple muestra de afecto y una coincidencia inestable pero...

En este mundo no existen las coincidencias, solo existe lo inevitable...

- Hinata ¿estas bien?- una voz la sacó de su pequeño mundo, Mayu estaba a su lado mientras la sacudía levemente- no entiendo, las clases de Química estuvieran tan aburridas para que inclusive la "geñito" se durmiera...

- Etto... no es solo que...bueno- no aun no era hora si lo decía tal vez ella no le creería y simplemente se burlaría de ella- es que hoy es el día del chocolate recuerdas...

- Uhnn sí es cierto- su voz se había endurecido más- típica época del año escolar en donde los estudiantes pueden confesar los sentimientos que sienten unos a otros...