Yo caminaba por las calles de la ciudad con una enorme sonrisa, las manos en los bolsillos de mi chaqueta y mirando al frente como muy pocas veces lo hacia. Me detuve frente a una casa enorme y le di dos golpes a la puerta para luego quedarme ahí esperando a que alguien abriera. Cuando la puerta se abrió y logre ver a nada mas ni menos que a Camila Cabello, mi corazón se acelero y sentí que en cualquier minuto me desmayaría, ella estaba ahí, frente a mi, sonriendo, con un vestido rojo que llegaba un poco mas arriba de sus rodillas, con una coleta que dejaba unos mechones sueltos, y por ultimo, sostenía a un bebe vestido con una pijama azul en sus brazos.
-¡Hola, amor!-Ella se hiso a un lado para que yo entrara. Cuando estaba pasando por su lado, ella con una de sus manos me agarro el rostro y me beso rápidamente dejándome mas embobada que nunca-Tu pequeño no quiere dormir, se la pasa llorando...
Sostuve a el pequeño con una sonrisa y comencé a acariciar su nariz con la punta de mis dedos provocando que el riera, de inmediato, yo lo hice también. Camila nos miraba con una sonrisa desde la puerta, era una escena realmente tierna y yo no podía creer lo que sucedía, tenia un hijo y estaba saliendo con Camila, la mujer mas hermosa del mundo, ¿Cuando sucedió todo esto?
-Laur-Mire a Camila con una sonrisa enorme en mi rostro-¿Podrías hacerlo dormir?-Asentí rápidamente y comencé a balancear al bebe en mis brazos quien segundos después comenzaba a bostezar-Jake me odia, estuve todo el día tratando de hacerlo dormir y mira, tu llegas y ya esta apunto de dormirse...
Minutos después, el pequeño Jake estaba durmiendo en mis brazos. Tuve que dejarlo en su cuna y luego volver a donde Camila quien no dejaba de darme besos por todas la cara. Me senté en el sofá, con ella a horcajadas sobre mi.
-¿Tienes idea de lo hermosa que eres?-Le pregunte tomando sus mejillas con ambas manos.
No podía dejar de mirarla, ella varias veces había llorado llamándose 'fea' así misma aunque obviamente, estaba bastante equivocada. Desde la primera vez que la vi no pude evitar pensar que ella era preciosa, con sus ojos marrones, sus pestañas largas, su nariz fina, su cabello largo y ondulado, sus labios carnosos, su piel, su cuerpo... En fin, todo de ella me parecía perfecto.
-Te amo...-Me dijo ella un poco sonrojada por mi comentario anterior.
Camila comenzo a inclinarse hacia mi para finalmente unir nuestros labios en un dulce beso. Mis manos que estaban anteriormente en su mejilla ahora se encontraban acariciando sus muslos, sus caderas comenzaban a moverse suavemente de adelante hacia atrás, claramente, esto ya no era solo un simple beso. Mis manos no pudieron evitarlo y las puse sobre su trasero dándole un ligero apretón provocando que ella se separara de mi durante unos segundos para soltar un pequeño gemido. Sus manos bajaron suavemente por mi cuello sin volver a romper el beso y comenzo a desabrochar mi chaqueta, mis manos salieron de su trasero y la ayude sacarme la prenda que pronto estaba tirada a un lado del sofá.
-Cari... ¡Ahh!-Camila se quito de sobre mi rápidamente y ambas miramos a su madre con la respiración agitada. El cuerpo de Sinu temblaba sin saber que exactamente decir o hacer al igual que yo-Dios mio...-Murmuraba Sinu repetidas veces pero sin dejar de mirarnos.
-No... no hacíamos nada malo-Trate de calmar un poco las cosas pero la verdad termine mas avergonzada aun.
-¿No?-Camila y yo negamos con la cabeza-Karla, vi perfectamente como le quitabas esa chaqueta-Señalo la chaqueta en el suelo y Camila de inmediato se sonrojo-Y tu, Michelle-Me señalo-¿Que rayos hacías agarrando su trasero?
-Yo...-Mire a Camila en busca de ayuda pero ella solo trataba de no reír por el comentario de se madre hacia mi-Lo siento, de verdad.
-No quiero mas de esas escenas en mi casa, ¿Me escucharon?-Ambas asentimos y vimos como Sinu entraba a la cocina murmurando cosas que no entendíamos.
Ambas nos mantuvimos en silencio. Yo me levante y agarre mi chaqueta algo avergonzada con la mirada de Camila puesta en mi, esta chica me había dejado caliente. Camila se levanto del sofá y me abrazo por la cintura apoyando su cabeza sobre mi pecho.
-¿Realmente lo sientes?-Fruncí el ceño sin entender su pregunta-¿Realmente sientes haberme tocado el trasero y haberme besado de esa manera?-Reí suavemente y bese su frente.
-Ni en mil años...-Camila me abrazo mas fuerte aun.
-¡LAS ESCUCHE!-Grito Sinu desde la cocina-¡Karla Camila Cabello Estrabao estas castigada!-Mire a Camila riendo mientras ella hacia un puchero, su madre aun la trataba como una bebe-¡No te rías Lauren Michelle Jauregui Morgado tu también lo estarás! -Esta vez fue el turno de Camila para reírse.
Nos miramos un rato, acariciando nuestros rostros y fingiendo que no existía otra persona en el mundo, hasta que un pequeño comenzo a llorar. Camila dio un rápido beso en mis labios y fue a ver que le sucedía a Jake. Camine por el pasillo hasta la habitacion en donde ellos se encontraban y vi como mi novia alimentaba al pequeño de su pecho. Era una escena perfecta, ver como Jake estiraba su bracito para agarrar el rostro de Camila, o como ella sonreia al mirarlo, era simplemente perfecto.
-¡Lauren!-De repente Camila me grito. La mire preocupada, todo en nuestro alrededor comenzaba a a estar borroso y no comprendía nada-¡Lauren por favor!-Trate de acercarme a ella pero de repente caí al suelo. Estire mi brazo y acaricie con la punta de mis dedos el rostro de Jake y luego la mano de Camila-¡Lauren!-Ella continuaba gritando.
De repente, todo se volvió negro.
***
-¡Lauren!-Me senté rápidamente en mi cama con la respiración agitada. Mi madre estaba frente a mi, se veía realmente preocupada por mi-¿Estas bien? Cariño, debes ir a la escuela pero si te sientes mal...
-¡No!-La interrumpí de inmediato. En cualquier otro día hubiese aceptado quedarme en casa pero debía ver a Camila, realmente necesitaba hacerlo-¿Puedes salir para poder vestirme?
No tarde demasiado en vestirme y bajar con la mochila colgando de mi hombro. Mi madre me ofreció el desayuno pero rápidamente negué y salí de casa corriendo, necesitaba realmente ver a Camila. Tarde diez minutos en llegar lo que es la mitad del tiempo que tardo, así que entre diciendo 'Buenos días' a los profesores que entraban junto a mi y finalmente, la vi. Ella estaba mirando su celular, sentada en el suelo y con mechones de cabello cubriendo su rostro, joder, ella era tan perfecta.
-Hola-Le dije algo tímida. Camila levanto la mirada con la sonrisa que le regalaba a todo el mundo, jamas te miraba seria y era una de las cosas que amaba de ella-¿Puedo sentarme contigo?
-Claro-Con su mano palmeo junto a ella indicando que me sentara ahí, obviamente, seguí sus ordenes-Normalmente no me hablas, sueles ser bastante tímida...-Yo asentí mordiendo mi labio inferior-Mi novio Philip suele decir que eres una fracasada-Bien, eso me dolió-Pero a mi me agradas mucho, las pocas veces que hablamos me gusta-Me sonroje.
-Yo...-No pude terminar cuando vi a Philip agachándose junto a ella y besando sus labios de forma hambrienta, no era un lindo beso, y hasta parecía que a Camila le incomodaba-Adiós...-Camila me miro aun en el beso y su mirada no me decía nada mas que un 'lo siento' pero realmente no importo mucho, yo solo me fui.
Me quede parada mirando a la nada y pensando, esta es la realidad. La chica de mis sueños realmente tiene novio, realmente todos sus amigos piensan que soy una fracasada, realmente no tenemos mucho en común, realmente jamas tendré una oportunidad con ella y no tendremos al pequeño Jake, ni su madre nos encontrara en una escena comprometedora... Esta era la realidad y era una jodida mierda. Apuesto a que Philip ni si quiera la hace lo suficientemente feliz, apuesto a que jamas le regalo una rosa, a que jamas pasearon por un lugar hermoso tomando las manos, a que jamas la toco sin intenciones de hacer algo mas, ya sabes, tocarla porque quieres sentir su piel y no por sexo. Lo triste aquí es que ella no se da cuenta de que yo podría hacerla mil veces mas feliz que el.
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Imagina momentos Camren
FanfictionAquí nada mas vamos a divertirnos imaginando momentos Camren. Si no te gusta Camren, te invito a retirarte.