Me lanze a la cama, cansado.
Como nunca en 20 años siendo vampiro.
y se supone que los vampiros no sienten nada.
Pero Estefa me hace sentir todo.
Atraccion,
Calor,
Enamoramiento,
cansancio,
entre otras cosas.
Lo malo es que ella no lo sabe, ni lo piensa.
Ella me odia por haberla transformado en "esto"
y no la culpo.
Cuando Louis me transformo, yo me encontraba al borde de la muerte. Era conpletamente seguro que me moriria.
Pero llego una chica, una rubia hermosa que me cautivo con sus movimientos suaves y femeninos.
Sinplemente estando en aquella camilla del hospital, la vi una noche.
Recuerdo que estaba solo, siempre estaba solo.
Ella me quedo mirando por un largo tiempo, pero la rubia desaparecio al abrirce la puerta y dejar que entrara la enfermera de turno.
Unas noches despues, mi estado habia empeorado. Los medicos desconectarian mis maquinas que me mantenian vivo al dia siguente.
Y esa misma noche, del dia antes de mi muerte. Aparecio de nuevo ella, la rubia.
Me sonrio, yo con estupides abri mis ojos. Para poder hablarle lo cual ni siquiera tenia fuerzas para eso. Ni papa mover los labios.
Ella me habia hecho un gesto de que no hicera nada, y ahi me di cuenta que no estabamos solo.
Al otro extremo de la cama se encontraba un chico de cabellos chocolates y una sonriza que se notaria a kilometros.
Ahi supe que ambos se llamaban Louis y Clara. Y segun ellos me vendrian a ayudar.
Dias despues desperte en esta misma habitacion, ahora mas moderna.
Clara habia pasado a ser mi amor platonico, inalcanzable.
Ella tenia un pequeño romance con Louis.
Asi pasaron los años, llegando Harry siendo un simple muchacho encantado por la belleza de Clara y siendo simplemente el otro de ella.
Su amante.
Un dia, Louis descubrio todo.
Clara se desenfreno, mataba sin asco a los animales. Hasta que un dia ataco a un hombre de excursion y murio quemada en el patio trasero.
Louis y yo, nunca volvimos a tocar el tema. Harry solo supo de su muerte por atacar a una persona.
Pero ahora era diferente, ahora en verdad era de verdad y lo sentia de muy dentro. Como si mi corazon comenzara a palpitar de nuevo.
Estefa estaba destinada a estar conmigo.
