Descendiente de Albert Einstein: El Secreto Nuclear.

Episodio 5: Parte 3

PV de Mark

-Tal vez si que se pueda hacer algo.

-¿Cómo que? Está muerta.

-Conservarla en el mejor estado posible, estudié medicina avanzada e hice mi tesis en la resurrección de los muertos. Tal vez si conseguimos conservar su cuerpo en el mejor estado posible durante el tiempo suficiente para que consiga terminar mi investigación podremos hacer que vuelva a la vida.

-Eso parece complicado e improbable.

-Lo es, por eso necesito que no se lo digas a nadie, no quiero que se hagan falsas esperanzas. Por lo menos no se lo digas a las chicas, Emma y Sarah estaban muy unidas a Esme.

-Espera - me dí cuenta de que no habia visto a Sarah y Patch desde el anochecer antes de la tragedia - ¿Has visto a Sarah o a Patch?

-No. Deberías buscarlos.

Punto de vista de Patch

Me desperté con un "super agradable" dolor de cabeza. Abrí los ojos con dificultad por la blanca luz que me quemaba las retinas y pude observar que ya no estaba bajo la cúpula de Gofemeramina que cubría el observatorio.

Miré a mi alrededor y en lo primero en lo que repararon mis ojos fue en la figura que se encontraba tirada en el suelo junto a mí. Me acerqué a ella para despertarla y así asegurarme de que estaba bien.

-Donde estamos - dijo adormilada al despertarse.

Ambos examinamos la habitación. El suelo y las paredes eran de un gris oscuro, mientras que el techo emitía una intensa luz blanca. En la pared a nuestras espaldas había una puerta redonda de acero con luces parpadeantes de colores que indicaban el estado de las distintas funciones.

Ayudé a Sarah a levantarse y observé más detenidamente la sala para buscar una forma de salir. Mi mirada pasaba por la sala sin ver otra salida posible a parte de la puerta de acero y no parecía poderse derribar, no sería tan inestable como la posición de Jack. Sinceramente a veces parece realmente bipolar.

Una voz distorsionada irrumpió mis pensamientos.

-Bienvenidos - dijo la voz maliciosamente - tendréis el honor de ser el sujeto de nuestra prueba experimental.

-Que gran honor - dije irónicamente mientras me ponía frente a Sarah para protejerla de cualquier ente invisible que estuviese en la habitación.

-Hasta el momento en la pared opuesta a la de la puerta teneis un baño oculto y se os irá suministrando la comida necesaria para que sobrevivais hasta la prueba - dijo para cerrar la comunicación.

Sarah me miró confusa por lo de la prueba experimental.

-Tranquila, no dejaré que te toquen.

-No hace falta que lo digas, se te ven las ganas de dar ost**s a discreción.

Punto de vista de Jack

Metí la leche en el refrigerador y esperé unos segundos para sacarla a la temperatura justa. Emma me miraba impaciente sentada en la mesa mientras yo me acercaba para darle su preciado desayuno.

Dejé la taza enfrente suya y le dí un beso en la frente.

-Ahí tienes tiquismiquis - dije burlona pero cariñosamente.

Emma puso una expresión dramática lebantó su índice izquierdo y apuntó a la puerta diciendo "Fuera de mi casa".

-Esta no es tu--

-FUERA - me interrumpió.

Di media vuelta y me fui de la sala con la olopuerta cerrándose tras de mi.

-AHORA TE QUEDAS AHÍ, CASTIGADO.

No pude evitar sonreír por lo adorable que era, aunque si me escucha decir eso me deja sin huevos.

De pronto Mark pasó corriendo captando mi atención.

-¿A que viene tanta prisa?

-¿Están Sarah y Patch dentro? - preguntó con tono alarmado.

-No.

-He buscado por toda la nave y no los he visto, incluso he llamado a la tripulación de Delta y Pi para preguntar por ellos pero no los han visto.

-¡Mier**! Big Bang los ha debido capturar. Avisa a Jo y - estaba a punto de nombrar a Esme pero me dí cuenta de la situación - y nos reuniremos en el observatorio.

Se marchó corriendo en dirección a la enfermería y yo me dispuse a sacar a la gata que se aferraría con uñas y dientes a su preciado desayuno.

-¡Emma!

-NO, NO VAS A ENTRAR, TE ESPERAS CALLADITO.

-¡Sarah y Patch están desaparecidos!

-NO ME VAS A ENGAÑAR.

Viendo que no iba a salir entré en la cocina recibiendo la mirada amenazante del monstruo de las galletas y un firme y recto indice que señalaba la puerta.

Sin hacerle caso me acerqué a ella y la cojí como un saco de patatas.

-Como no me sueltes te vas a quedar sin huevos.

-¿Y como quieres que haga huevos fritos para desyunar? - le pregunté jugando con el doble sentido de la palabra.

Avancé hasta el observatorio con Emma dándome golpes y patadas para que la soltase. Entramos y esperé a que Jo y Mark llegasen mientras ella intentaba liberarse de mi agarre.