Capítulo 10

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Sebastián:

Hay muchas cosas que pasan por mi mente, sin duda me he imaginado muchas situaciones por las que podría pasar, no sé, se podría decir que me gusta imaginar el futuro, pero en ningún momento me imagine pasar por algo así, no sentirme de este manera como lo estoy haciendo ahora, y no me mal entiendan, no es como si me sintiera en un hoyo que parece tan profundo que es imposible salir, más bien es como una sensación de impotencia. Hace unos meses estaba completamente seguro de que todo esto era lo mejor para Matías, que era mejor para él, pero me equivoque, me siento tan equivocado que no sé que pensaría Maite si viera todo esto, y es que muchas personas piensan que no me duele todo esto, y no es así, es sólo que no lo demuestro y no lo hago para estar fuerte, para "ayudar" a Matías.

Él ha cambiado, demasiado diría yo, hace meses lo tuvimos que llevar a rastras a su examen profesional, porque después de todo lo que hicimos para que se lo hicieran cuando terminara su internado hubiera sido muy estúpido que no se presentara, es sólo que después de todo lo que ocurrió ya no quiso saber nada más ni de la carrera, ni del examen, ni de la tesis, ni siquiera de trabajar y eso que exactamente eso era lo que lo motivaba, de hecho cuando se tituló no quiso que se mencionara nada respecto a eso.

Cuando llegamos a Puerto Vallarta, exactamente al siguiente día de que nos mudamos oficialmente fue a buscar trabajo, no voy a negar que tenía la esperanza de que fuera en un hospital, pero no fue así, lo encontró, claro, pero fue en un bar. Yo le dije que no era necesario que trabajara, la casa era pagada por la empresa y por comida y demás yo me ocuparía, quería que lo hiciera hasta que se sintiera listo, pero a pesar de que se lo dije él se negó pensé que era para distraerse o simplemente para comprar sus cosas, ¡ERROR!

No fue así, estuvo alrededor de un mes bien, dentro de lo que cabe, iba a trabajar, regresaba lo más temprano posible y prácticamente se la pasaba durmiendo pero eso no duro mucho tiempo, después comenzó a cambiar.

De hecho, podemos casi afirmar que Matías cambio todo lo que Maite amaba de él, paso de tener el cabello relativamente corto a largo, su cabello rizado lo alació en cuanto fue posible y el castaño claro que tanto les encantaba a las mujeres lo pinto, ya no era más su cabello, ahora era totalmente negro y cambio por completo el aspecto. Quizá lo hizo porque todo lo que él era cambio cuando ocurrió aquel accidente.

Comenzó a beber mucho, antes de ir a trabajar por las noches ya se encontraba en estado de ebriedad y al final de su turno siempre llegaba perdido de borracho, con una mujer distinta cada día, pero que al final de unos cuantos besos y caricias terminaban por irse cuando el susurraba el nombre de Maite.

Pero eso no fue todo, cambio tanto que incluso hasta la forma de vestir ahora es distinta, antes vestía con camisas, pantalones de mezclilla y tenis, Maite decía que siempre estaba perfecto para una situación formal. Ahora usaba playeras de bandas que amaba Maite y camisas de franela con chamarras de piel, pantalones de mezclilla rotos y entubados, siempre vans negros y gafas negras, incluso si alguien viera una foto de él antes y una de ahora no daría crédito de que es la misma persona.

Pero puedo asegurar que el peor momento en el que lo vi fue aquel día, no podía creer lo que veía. Ese día llegue tarde a casa porque había salido con alguien, Matías había llegado temprano. Cuando entre recordé que nunca pensé que lo vería así, la música estaba a todo volumen, sonaba Iris a todo lo que daba, se escuchaba como Matías cantaba a todo pulmón, se encontraba sentado en el suelo, con un cigarro en una mano y una botella de whisky en la otra, la habitación olía demasiado a cigarro, eso indicaba que ha fumado desde que llego, bueno eso, y las miles de colillas tiradas por todo el suelo, usaba una playera de Sleeping sin mangas y un pantalón roto, se encontraba llorando mientras miraba un punto fijo, pero eso no fue lo que me impacto, sino el hecho de que se había perforado y se había hecho expansiones, en sus brazos se veían tatuajes recientes y uno en especial llamo mi atención, estaba en su pecho, a la altura del corazón, era el dibujo de un búho con ojos de color rosa y arriba de él en letras pequeñas la fecha en que Maite murió y nació y al inicio y final de estas la punta y el final de una flecha, es decir esta simulaba estar rota, sinceramente no supe que hacer y sólo corrí a abrazarlo, él no dejaba de llorar y no dejaba de repetir que lo sentía, que él tenía que haber muerto en su lugar. Me partió el corazón.

A partir de ese día fue casi costumbre que cada mes obtuviera un nuevo tatuaje, no voy a negar que ahora si parecemos amigos, pero no se siente como tal.

Ahora Matías tomaba demasiado, salía con muchas mujeres y se comportaba como si ya no le importara nada, muchas veces le sugerí que buscara ayuda o que ejerciera para que lograra poner su mente en otros asuntos, quizá que estudiara pero al final terminábamos discutiendo y él se marchaba dejándome hablando solo.

Hoy me encuentro sentado en la banca de una sala de espera de un hospital, pensando y considerando que sí hubiera hecho algo más antes no estaríamos aquí, sí hubiera sido un buen amigo me hubiera dado cuenta de todo lo que sentía y por lo que estaba pasando él, pero como lo hubiera hecho, él ya no hablaba conmigo más que cuando se perdía de borracho y terminaba llorando y yo, yo me encontraba demasiado hundido en mi propia tristeza, tratando de salir de ella. Que pésimo amigo soy, me siento como una porquería y ahora me encuentro aquí, tratando con todas mis fuerzas de no llorar y no ponerme mal, porque tengo que ser fuerte por él.

Todo ocurrió ayer, me quede hasta tarde en el trabajo en parte porque tenía que entregar unos planos a primera hora y los tenía que terminar y en parte porque no quería llegar a casa, me sentía cansado de ver a Matías destruirse, de ver como poco a poco acababa con el que algún día fue, pésima idea.

Llegue a casa como a las 3 de la mañana, no había ruido ni nada, ni siquiera había luces encendidas, así que entre a su habitación, y ahí se encontraba él o al menos lo que quedaba, se encontraba sentado, recargado en la pared, pero no lucia como él, su rostro era casi blanco, sus ojos cerrados, ya no estaba consciente, sus brazos se encontraban en los costados con miles de cortes de los cuales parecía broto sangre a montones, si es que seguía desangrándose ya no se veía más.

No supe como reaccionar, lo cargue y lo lleve directo al hospital, aparecimos por la entrada de este, yo sólo lloraba y les suplicaba porque lo atendieran en ese momento, de inmediato se lo llevaron para atenderlo, sólo vi como él recostado en la camilla casi sin vida y el enfermero se perdieron por el pasillo. Y fue entonces cuando caí en cuenta de todo, el llanto se volvió más potente y parecía no parar, hasta que el médico que lo atendía se presento frente a mi.

- ¿Familiares de Matías? - Dijo buscando entre la gente que se encontraba en la sala de espera.

- Yo - Dije levantándome de mi asiento.

- ¿Eres su hermano? - Pregunto al acercarse a mi y verme de un vistazo.

- No, soy su amigo, pero no tiene a nadie más aquí - Dije con la esperanza de que no preguntara más y me dijera que Matías ya se encontraba bien.

- De acuerdo - Miro el expediente - Perdió mucha sangre y sí se hubieran tardado 10 minutos más no hubiéramos podido hacer nada, pero ya se le curaron las heridas y se le hizo una trasfusión y ahora se encuentra fuera de peligro, pero aún así lo mejor sería mantenerlo unos días para que se le suministre suero, sólo necesitamos que usted done sangre y en cuento termine puede pasar a verlo - Dijo con media sonrisa y comenzó a alejarse.

- Por cierto - Dijo acercándose de nuevo - Esto se lo quitamos de las manos cuando llego, quizá responda las dudas - Dijo entregándome un par de papeles para después alejarse.

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Hola c: sé que les vale mis notas de autor pero aún así quería decirles que me perdonen :c sé que no he actualizado y todo eso, pero enserio ando bien muerta y estresada, sé que los últimos capítulos han sido muy pequeños pero son por una razón 7u7 ya casi acaba mi semestre así que pronto podré actualizar más y corregir mis errores.
Ojalá y les este gustando la novela y sino me gustaría saber su opinión.
Gracias por leer y nos leemos el próximos capítulo <3

IrisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora