"Entre Memorias"

Cristian y Angélica

Me dispuse a ir por Cristian 07:30pm casualmente ninguno tenía hambre, descarte la idea entonces y fuimos al "teatro municipal " dónde cometimos aquella locura en el piano, cuando creamos nuestra canción, cuando me dijo que le gustaba y que haría lo que fuera por mí, cuando me dí cuenta que lo querría más que nadie y nada. Sólo él.
-Vaya, el lugar es encantador -( Cristian)
- Lo es, te gustará - (sonrío)
- Espera Angélica yo, me permites -( Cristian)
Extiende su mano, pidiendo las entradas, sonrío para él y las pongo sobre su mano, me da su brazo para que lo sujete y avanzamos.
-Buenas noches -( Cristian)
- Buenas noches Sr. sus entradas porfavor; Gracias adelante, disfruten la función -
-Gracias, - ( Cristian)
- Todo un caballero, -
-Dime, ¿Alguna vez hice esto antes? - (Cristian)
-Mmm... -(hago que pienso)- un par de veces, -
Nos sentimos en el mismo lugar de siempre, vimos tocar una sinfonía, puro instrumental, entre las melodías algunos clásicos; temas de novelas, películas entre otros. ¡Fue una noche tan bonita! Veo a Cristian unos minutos, si fuera él, el de antes disfrutaría muchísimo lo sé, él amaba esto.
10:00pm
De regreso nadie dice nada ni una sola palabra, lo cual me pone nerviosa, antes no ocurría así el silencio era cómodo y hasta cierto grado agradable.
Apenas voy a tomar la calle principal a la clínica...
-Angélica, - (Cristian)
-Sí -
-No vallas a la clínica -( Cristian)
Me detengo en seco, lo miro
-¿Y a dónde iremos?-
- A dónde sea pero no a esa clínica, -(me ve)- Sólo por hoy, hagamos ésta noche memorable ¿quieres? - ( Cristian)
Sonrío, suena como al hombre que conocí, pensé en ir a casa pero fanny y Adrián están allí, luego recuerdo que mi Cris me dio una llave de la casa de sus padres y ya que mi suegra hace tiempo no asiste ahí, vamos ahí.
Tengo entendido que la casa la atienden empleados entre semana, ahora debe estar sola.
-¿También vives aquí? -( Cristian)
- No, pero aveces, sólo aveces sí -
- ¿Cómo así? - ( Cristian)
- Aquí vivieron personas que amé, que dejaron memorables recuerdos en mí y en algún momento, ésta casa fue mi hogar -
- Que bien, - ( Cristian)
-¿Agotado? -
-No y tú - ( Cristian)
-No, -
-Bien, - ( Cristian)
-Iré a usmear en la cocina, -
Parece no haber nada y casualmente encuentro una botella de vino añejo y con él, dos copas ¡Perfecto! Apenas me dí la vuelta y él ya estaba ahí
-Cristian, -
-¿Puedo ayudarte? - ( Cristian)
- No es mucho, -
-¿Es todo lo que hay?- (Cristian)
-Ve tu mismo, -
-Sólo fue una pregunta, -(sonrío) (Cristian)
Viene junto a mí, abrimos esa botella y platicamos sobre el concierto yo hablé de mi mocedad, de mis amigas, y no sé porqué le conté de mis amoríos de juventud, le hablé de Xaryv, lo que nos ocurrió. Le conté la historia de Bere y Erik derrepente me sentí rara, reíamos quise dejar mi copa cerca del lava trastos, cuando sentí que me iba de lado pero Cristian me detuvo.
-Angélica ¿estás bien? - ( Cristian)
-Sí sí no pasa nada, -
-Tal vez, bebiste demás - ( Cristian)
-Estoy acostumbrada tranquilo, tú ¿estás bien? -
-Sí, oye enserio ¿estás bien? - ( Cristian)
- Por supuesto... -(¡Qué rayos!)
Tal vez si me pase pero no tengo idea, creí que Cris estaba igual que yo pero no, me tomo en sus brazos, llevándome a lo que parece una habitación ¡Vaya coincidencia! Es la de él.
Ahora, lo único que hay es una cama porque esta prácticamente sola, me recostó en ella y...
-¡Cristian no te vallas!-
Lo tengo por la camisa
-Pero, - ( Cristian)
-¡Te necesito! Porfavor ¿quieres? -
- Angélica ¿estás segura? Yo, -( Cristian)
- Sé que lo deseas tanto como yo, sé que esperabas el lugar, la ocasión, tú y yo-( él asiente) - comienza ya...

Un año y siete meses pasaron desde la última vez que estuve con él y no sé qué pensar, antes ya me conocía de par en par, pero; pareciera que regresé cinco años en el tiempo cuando ambos eramos ajenos, no quiero decir que no fue agradable, fue una noche bella donde abundó la timidez, la sinceridad, y el deseo por tenernos ambos.
Amanecimos envueltos uno en otro, su temperatura siempre más cálida que la mía, una espada ancha, un abdomen bien calcado, facciones bien definidas y sus brazos musculosos, que decir de sus labios creándome adicciones.
Duele y por un momento parece que nada ocurrió, que estamos dónde nos quedamos, pero no, no es así Angélica ¡Cruel realidad!

-¡Buen día! - ( Cristian)
- ¡Despierta dormilón! -
- No es verdad, - ( Cristian)
- ¿Que nos amamos anoche? Así fue créeme -
Sonríe, luego se acomoda en mi regazo y me abraza, un tanto fuerte contra él cierra los ojos. Lo abrazo y acaricio su cabello ¡No quiero que acabe! Pasamos alrededor de una hora así unidos como antes.
De no ser por el hambre que siento, seguiríamos acurrucados, me puse el  pantalón y camisa de Cristian para ir a la tienda por leche, pan tostado y jalea y fruta picada que venden en pequeños recipientes y eso desayunamos al medio día.
Después nos vestimos y fuimos a mi casa, al parecer no hay nadie, Cris entra a darse una ducha mientras yo alisto su ropa (como antes) un jeans blanco una camisa roja y vans grises. Se lo dejo en el baño. Yo opté por una blusa olgada a blanco y negro de rayas horizontales sin mangas, un short de mezclilla y convers negros. Luego de ducharme y vestirme recogí mi cabello en una coleta y el sobrante lo ondule, hacía más de un año que no lo hacía; maquillaje natural.
-¿Dé dónde sacaste esta ropa? - ( Cristian)
- Es de mi hermano, Adrián - (mentí, es de él)
- ¿Y si se molesta? - ( Cristian)
-Lo dudo, no es su favorita. Nos vamos -
Fuimos a comer, luego al parque todo el día en la davidson y él condujo. Fuimos algunas librerías, también al museo y otros edificios importantes. Íbamos por ahí cantando nuestras canciones favoritas, tomándonos fotos y demás. Parecíamos dos colegiales completamente locos; mientras conducía me recargada sobre su espalda.
Cuando nos quedaba poco tiempo, de la nada, tomo mi cara en sus manos y me plasmo un beso, tierno el cual respondí mientras lo abrazaba. Ambos sonreímos...
Si Bere estuviera aquí diría "patéticos" luego mostraría una sonrisa por nosotros. Se llegó el final del día juntos, el momento menos esperado. Nuevamente estamos frente a esa clínica
-Te entrego todo esto después, -( Cristian)
- Quédate lo, Adrián no lo usa -
- No bajes, debes descansar, ahora te veo menos lo olvidas, -( Cristian)
- ¡Rayos! Es verdad, recobra energías Cris -
- Angélica, ha sido el mejor fin e inicio de semana, te lo agradezco - ( Cristian)
-Vamos Cristian, de no ser por ti no tendría sentido -
- Angélica, no sé qué fue de mí en otro tiempo pero, ahora quiero que sepas que te quiero, más de lo que piensas y tal vez pido mucho pero, te quiero conmigo, claro si estás dispuesta y así me concedes, estoy dispuesto a lo que sea, lo que tú quieras con tal de verte feliz. Dime que lo pensarás - ( Cristian)
-Cristian, yo no tengo nada que pensar; muero por unir mi vida a ti y estar contigo -
-¿De verdad? - ( Cristian, sonríe)
- Por supuesto, ¡Qué más puedo pedir!-
Nos vemos fijamente, entonces rozamos nuestros labios despacio. Sin preocupaciones ni mucho menos.
-Me fugo contigo, escapamos de aquí tú y yo, empecemos de cero -( Cristian)
- Haré lo que sea por sacarte de aquí, lo prometo -
-Luchemos por esto Angélica -( Cristian)
- Así será -
Sonrío y lo beso apasionadamente como debe ser, después de todo; es mío.