Un corazón fuerte y frágil

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Martes 26 de Febrero

Erán las cinco de la madrugada y de repente sonó mi alarma, me tuve que levantarme con cara de desagrado por que no tenía ni las más minímas ganas de asistir al colegio pero algún día tenía que ir.

En cuarenta minutos hice todo lo que tenía que hacer pero aún pasaban instantáneamente imágenes de lo que había sucedido en estos dos ultimos días, no dejaba de pensar en ello y de tanto que me detuve a pensar en eso se me fuerón diez minutos y mi mamá ya estaba preparada para que me fuese a dejar al colegio en el auto... y me dijo:
-Mateo agarra tus cosas y nos vamos.
-Ya voy-Dijé.
Agarré mis cosas y nos marchamos al auto; llegamos al colegio y mi mamá me dio el dinero diario, pero también me colocaba merienda, mi mamá es toda una guerrera.

Antes de bajarme del auto me despedí de mi mamá y me fuí caminando hasta llegar a mi aula de clases donde siempre me sentaba de último para no generar molestías, cuando yo se que no notaban mi presencia, pasó el tiempo volando como en un abrir y cerrar de ojos, tocarón el timbre y teniamos como primera clase, Español, ami me gusta mucho Español es muy interesante.

Llegó la maestra y empezó a tomar lista de asistencia y como es en ordén alfabetico yo era el último, pasarón segundos y nunca escuché mi nombre, era obvio nadie notaba mi presencia asi que no me quedo de otra que extender mi brazo hacia arriba y preguntar lo siguiente:
-Maestra, disculpe pero ¿Por qué no me mencionó?
-Disculpe señorito Thompson, lo olvidé pero no se preocupe ya lo arreglare, muchas gracias por la corrección...
En ese momento me sentí marginado, pero me entrarón ideas a la cabeza como:
-Quizás se equivoco y no lo hizo con otras intenciones.

Comenzaba la clase, miraba rostros con sueño, no era para más; era de mañana y nadie queria asistir a clases...
De repente la maestra agarró un marcador y escribió en el pizarrón el tema del día y era el siguiente: "La autobiografía"
Yo ya sabía que era eso sinceramente pero mi maestra no explicó absolutamente nada sino que dijo que resumieramos nuestra vida en un renglón; no sabía para que era este ejercicio pero de todos modos lo hice.
Pasarón diez minutos y ella dijo:
-Estudiantes por favor dejen de escribir y cada uno tenia que pasara al frente a leer lo que escribierón.
Yo no quería pasar a leerlo pero tenía que hacerlo eran puntos fundamentales... y así pasarón todos y cada uno de mis compañeros a modo de que quedé de último y la maestra me dijó:
-Mateo pase a leer lo suyo...
En ese momento sentía miradas por todos los lados del aula y me daba inseguridad de que no les causara Burla lo que iba a decir pero de todos modos pasé al frente y mostré mi página que tenía esto: "..."
Todos quedarón con rostros de duda y empezarón a reirse, me sentí súper mal y me empezarón a tirar papeles pero la maestra dijó:
-¡Jovenes dejen de molestar! ¡Todos tienen cinco puntos menos! Y Mateo expliqueme esos puntos suspensivos.
-Bueno maestra escribí puntos suspensivos por que no puedo definir mi vida como tal, sólo se que hasta este momento mi vida no ha sido de gran relevancia y por eso escribí estos puntos, espero me comprendan.-Dijé y empecé a recoger todos y cada uno de los papeles que me habían arrojado.
-Mateo tiene todos los puntos y le daré cinco punto extras, sinceramente sienti que usted será alguién exitoso.-Dijó mi maestra y empezó a aplaudir aunque nadie más lo hacia.

Simplemente me senté en mi lugar y pasó el tiempo a modo de que perdí la noción del tiempo y ya era recreo... No tenía a nadie con quien sentarme en mis recreos; era un "Don nadie" o al menos asi me etiquetaban...
Yo fuí a la cafeteria y compré un jugo, luego me fuí a sentar a un lugar sin ninguna compañía...
El tiempo pasó volando y cuando tocarón timbre fui a mi asiento y listo para la siguiente clase que era Sociología... Pero la sopresa del día fue que en un cuaderno encontré un papelito que decía lo siguiente: "Preparate, te harán una broma de mal gusto."
Yo no me esperaba ese mensaje pero me sorprendió y como yo no me percataba de eso, simplemente guardé ese pedazo de papel para tenerlo como evidencia de cualquier cosa que pasé... no le tomé importancia, llego la maestra y dió la clase como cualquier otra y dejó una tarea que era: "Investigar la pobreza en Honduras". Yo copié la tarea y recordaba el mensaje del pedazo de papel asi que seguí sin tomarle importancia alguna y pasarón las clases que al final llegamos a la hora de sálida y mi mamá me estaba esperando en el auto asi que corrí a subirme y mi mamá me dijó:
-¿Qué tal te fue hijo?
-Me fue bien mamá.
-Esta bién hijo, sigue así y recibiras una beca universitaria al extranjero, te amo mateo.-Dijó mi mamá.
-¡Gracias Madre! ¡Yo también te amo!

Sangre color CarmesíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora