Un giro inesperado

1

El despertador sonó a las seis y media, como todas las horribles mañanas de todos los horribles día de mi vida. Como un zombie me levante de mi cama y me di una ducha para despejarme. me  metí en mis  vaqueros entubados oscuros, cogí una camiseta suelta blanca, azul y morada (mi favorita) una chaqueta marrón mis botines del color de la chaqueta y un pañuelo un poco mas claro que estos.

Desayune tranquilamente y me dirigí, de nuevo al baño,  acomode mi desastroso pelo y cepille mis dientes, me miré al espejo, me puse un poco de corrector para disimular las ojeras (de leer hasta tarde) aplique máscara para las pestañas y me dije: "tranquila Moni tu puedes con otro horriblemente aburrido día". Dirigí una torpe sonrisa a esta pobre adolescente desilusionada y salí de mi casa para coger el bus que me llevaría al instituto.

una vez allí me encontré con lizzy y nos dirigimos a clase juntas.

Lizzy es mi mejor amiga desde los 12 años. Nos hicimos inseparables, desde que un día, en primer curso de secundaria, mordió a la zorra de Nati (mi enemiga desde siempre) cuando se reía de ella por estar un poco gordita.

Ahora esa zorra poli-operada tiene que guardarse todos los insultos sobre el aspecto de Lizzy, pues a nuestros 17 años se había convertido en una bellísima mujer. Con su pelo largo y castaño que le caía en lindas ondas por la espalda, unos ojos verdes que te desarmaban y un cuerpo lleno de curvas que ya quisieran las mejores modelos.

Nati siguió dando tanto asco como siempre solo que para disimular su falta de cerebro, su casi inexistente padre, le regaló dos tallas mas de tetas que junto con su pelo largo negro liso, sus ojos marrón oscuro sienpre maquillados al máximo y la escasez de tela en su vestimenta, daba la impresión de lo que era, una chica abre-fácil.

La historia de Nati y mía no es la típica historia en la que al principio somos amigas y algo pasa que nos distancia y comenzamos a odiarnos, nosotras desde que nos miramos por primera vez nos odiamos al instante(Siempre me funcionó mi detector de cerdas anorexicas-polioperadas-con-carencia-de-neuronas) No se, es un don que mi madre me dio..

y aquí estoy yo, no me considero fea la verdad, soy rubia con el pelo bastante largo y liso ojos de un intenso gris-verdoso, no tengo grandes pechos pero tengo un buen culo (o eso dice el baboso de mi compañero de biología).

A primera hora tocaba Lengua, genial, tengo que escuchara una vieja resentida con el mundo, hablar de cosas que no me interesa en absoluto. Pero por lo menos estaba Mark mi mejor amigo (después de Lizzy) para amenizar la tortura..

-Buenos dias chicas- dijo Mark desde la entrada del aula.

Mark era un chico realmente guapo, ojos verdes, cabello marrón, era considerablemente musculoso y muy simpático.

Todos dicen que tenemos algo pero nosotros solo nos vemos como amigos.

-Hola cariño- le contestamos Lizzy y yo desde nuestros asientos.

La clase se hizo muy pesada, pero después de 5 interminables horas mas salimos del instituto.

- A ver Moni, cariño, no puedes ser así, arréglate y sal con Mike y con migo por una noche- dijo Lizzy por enésima vez.

Mike es el novio de Lizzy y aunque ya se lo haya dicho a ella no me cae nada bien. Pienso que solo se quiere aprovechar de ella, pero no me cree.

-Lizzy, no voy a ir.

-Pero, por qué?

-Porque no quiero ir de sujeta velas, seria muy incomodo.

-Moni vamos a tomar unas copas a un antro, a demás, Mike dice que ha llamado a un amigo. Por favor ven.

-Joder Lizz sabes que no me gustan las citas a ciegas.

-Lo se, pero es la única forma de que conozcas a chicos. Parece que ya no te interesan..

- Y no lo hacen, quiero que llegue el indicado, cuando.tenga.que.llegar.

-Dios Moni no seas así. Ven conoce a Mathew pasa un buen rato. Ya me lo agradecerás..

-Querida Lizzy, lo dudo- dije sabiendo que esta batalla la tenía perdida...

Hola chicas quería decirles que, espero lean esta historia. es la primera que publico y espero les guste...

Por favor voten y dejen comentarios, así sé que me leen ;)

-pidge~