He vuelto por ti [2da de Un Año Interminable]

3.-Recuerdos

Narra Nicoflen

(Pongan la canción desde el principio 😏)

Esas palabras me había dejado más tiritón que evangélica con pandero nuevo.
El Jaime se posicionó arriba de mi, estaba como la primera vez que lo hicos lucidos, puso sus piernas a los lados correspondientes de mis cadera, tomo mis manos y las guío por debajo de su polera.

Se sentía tan bien poder recorrer una vez más ese torso desnudo que me había echo feliz por tantas noches.
Sin pensarlo ni un segundo más, saque sin permiso su polera, lo tome por el cuello y le di un beso apasionado que hace mucho necesitaba.
Ataco mi boca como si fuese nuestra primera vez juntos.

Al cabo de unos minutos la ropa ya había desaparecido de mi punto de vista, Jaime se lamió 2 dedos los cuales nunca dejo a mi vista y solo los introdujo por mi cavidad anal.
Comenzó un va y ven que me hizo llegar a un punto de exitación que no lo había experimentado hace mucho tiempo atrás... Se podría decir que solo el Jaime sabia perfectamente donde estaba mi punto de excitación exacto.

Ataque su boca, juguetee un momento con su lengua para luego morder su labio inferior y que así soltara un jadeo incontrolable, ronco, de macho recio que me derritió como colegiala.
Baje desde si boca hasta su pecho, que lamí, dejando una que otra marca para cualquier maraco o maraca que se quisiera acercar a mi hombre.

Mientras Jaime seguía con su trabajo en mi cavidad anal, yo no me podía quedar solo viendo como el Jaime se divertía haciéndome gritar, tome con na firmeza enorme su miembro erecto y comencé a masturbarlo lentamente haciendo que dejara salir quejidos, gemidos y jadeos roncos los cuales eran una sinfonía única jamas escuchada que estaban solo para mis oídos... Bueno, también para los vecinos que nos escucharan.

-Por que me torturas Nicolas?- esa voz ronca papu, hacia que mi corazón se comenzara a acelerar a mil latidos por segundo, sentía que me daría un infarto, pero por lo menos me moriría de la mejor forma.

Cuando ya no tenia nada más que hacer, el Jaime me tomo por mi cintura y me di vuelta, dejándome en 4 encima de la cama,él parado por detrás de mi mientras introducía con sumo cuidado su miembro por mi cabidad anal.

-Aah!...- Deja salir un gemido, el cual hizo que se estremeciera por toda la casa.

Jaime me tomo por el cuello delicadamente pero a la vez con brusquedad que solo el podía medir.
Me acerco a su boca desviando mi mirada que estaba posada en la ventana, directamente a sus ojos.

Tenia un movimiento pélvico que no lo podía comparar con el de ningún otro ser humano que allá conocido jamas, com cada embestida me dejaba un metro más arriba del cielo, haciendo que mi cuerpo se estremeciera y que me llevara a un extacis  incomparable a todo lo demás.

En este momento no necesitaba mariguana, Lsd, alcohol, nisiqueira un cimero cigarro, tan solo necesitaba que el Jaime se quedara en mi vida y que jamad nunca me volviera a dejar.

El Jaime estaba en vistiéndome con una mano en mi cintura y con la otra me masturbaba al mismo ritmo que me embestía.

Sus embestidas me dejaban a la vista como si fuera un niño inexperto en estos momentos.
Me hacia gritar como el solo sabia hacerlo, hizo que toda mi rabia hacia él se fuera en unos favorables 10 minutos que fue el tiempo en el que se demoro en llevarme a mi cama. 
Esas embestidas al principio fueron tiernas y lentas, no me quería causar daño, pero mis suplicas por más, hicieron que le ganara el placer y me diera... literalmente, como caja.

Jaime seguía con sus embestidas sin darme aun que sea un respiro, pero tampoco se lo suplique...
El y yo cada vez nos acercábamos más a este tan esperando climax que nos dejaría rendidos en la cama.

-Aah! Jaime ahí- Había encontrado el punto perfecto.

Sus embestidas comenzaron a ser severas, lentas pero profundas, pero a la vez con una delicadeza que me hacia confiar tanto en el que si me hubiera pedido cualquier cosa en ese preciso momento, hubiera accedido sin pensarlo.

Cuando estaba tan cerca del climax, arquee mis espalda quedando al contacto del pecho del Jaime, puse sentir esa calidez que sentía cada vez que estábamos juntos, pude sentir sus latidos del corazón en cual me dejo loco en tan solo segundos.

Comenzó a apresurarse, con las embestidas y con el movimiento manual que tenia en mi miembros, despues de unos segundos llegamos al tan ansiado climax, yo acabe en su mano y el dentro de mi.
Ya no resistía más, me di vuelta como pude, me colgué de su cuello, y lo bese con pasión haciendo que quedar enzima de mi y yo abajo de el con mis manos en su pecho.

Se acerco una vez más a mi pido y me hablo con una voz ronca y suave a la vez.

-Te amo Nicolas Gaule, y prometo nunca más dejarte...- Me dio un beso en el cuello y calo en mi pecho, cansado cual niño pequeño.
Me quede dormido, viendo tan tierna escena.

Narra Yelitions

Estábamos con el Eddie caminando a la casa del Nico para irnos al Liceo, cuando estábamos en la entrad me percate que el auto del Jaime aún seguía ahí, pero como el Eddie no se dio cuenta no le tome importancia.

Entramos a la casa y el Eddie fue a la cocina a prepararle el desayuno al Nico, yo mientras fui a despertar al Bello Durmiente porque siempre llegamos tarde porque el Nico siempre la noche anterior se queda jugando horas y horas en el computador.

Subí las escaleras y no vi que estaba la Nena que es la nana del Nico, bueno quizá esta en su casa total, casi siempre viene como 2 días a la semana porque no somos muy desordenados.

Entre a la pieza del Nico y no aguante un Grito

-AAAAH!!!- El Eddie llego corriendo a mi lado y yo me escondí en su pecho.

-Mi amor que paso?- Me dijo tratando de tranquilizarme mientras me acariciaba la cabeza.

-Mira para adentro de la pieza del Nico- Aún seguía con la cabeza escondida en el pecho del Eddie.

Se asomo lentamente y vio al Nico con el Jaime, muy abrazaditos solo tapados con la sabana.

-Nicolas Ignacio Gaule Moller!!!- El Eddie estaba realmente enojado, nunca llama al Nicolas por su nombre completo.

El Nico se despertó de un salto con el Jaime, y tenia una cara de nervioso... Bueno por lo que alcance a ver.

-Edgar...-Esto iba a terminar mal.