13.-Una Oportunidad

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Narra el Tío Bestia

Extrañaba los besos del Alex, me devolvieron ese pedazo de alma que me habían arrebatado hace ya un tiempo. Su olor se me hacía familiar, estaba más delgado y mucho más blanco que antes.

-Oye Bestia! Suelta al cabro po, yo también lo quiero besuquear- dijo el Nico poniéndose un poco triste.

-Ay que es wn mi amigo, vengache pa ca- Dijo el Alex mientras pescaba al Nico y lo abrazaba.

-Pero me dejan solitos po malditos bastardos – el cubito de yelo hizo un puchero, lo que le causo ternura al Alex lo incluyo en el abrazo.

Nos unimos todos al abrazo en el que estaban los chiquillos. Habíamos vuelto a ser lo que éramos antes.

Despues de un rato, con el Jaime y el Edgar fuimos a comprar carne para hacer un asado, en forma de celebrar que mi niño había regresado.

Estábamos de los más bien comprando unas chelitas y carne cuando se me ocurrió preguntarle algo a lo cabros.

-Y como van con los chiquillos?- les pregunte a viva voz sin quitar los ojos de la carne que estaba en el súper.

-El Nico se hace mucho de rogar, pero se bien que tiene todo el derecho para hacerlo...- tomo aire y hablo una vez más- le hice mucho daño cuando me fui sin darle una despedida digna de él, y si ahora quiere que le demuestre que el amor que siento por él no se ha ido en todo este tiempo, se lo tendré que demostrar po no me queda de otra.

Lo mire y se veía decidido, pocas veces se ve esta faceta del Jaime serio y decidido de hacer algo que de verdad quiere.

-Puta yo...-hablo el eddieflin- Por mi parte me encanta hacer esto, ósea, me arrepiento cada día de la caga que me mande pero como que me gusta volverlo a conquistar como cuando éramos chicos jajaj... El otro día me acorde de cómo fue, cuando me pedí pololeo

>>Flash Back<<

Habiamos ido a fantasilandia, y entre el Edgar y el Yelo se notaba caleta que se gustaba. Pasaban tiempo juntos, siempre que teníamos que hacer algún trabajo en pareja lo hacían los dos juntos, y muchas veces se desaparecían en el liceo en los recreos. No non importaba mucho porque ya nos molestaba el cuento de que "Simis mijiris imigis, nidi mis" mejores amigos las weas, todo sabíamos que se querían comer hasta con palta.

He vuelto por ti [2da de Un Año Interminable] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora