Solo vos y yo.

Capitulo 22- Mi mejor amigo.

Escribí... sobre todo. Lo que sentía, lo que no. Lo que dije, lo que no. Lo que pensé, lo que no. Todo, escribí sobre todo.

Emily... ella... ella es mi todo, pero por momento pienso que la molesto. Y joder, se siente tan feo.

¿Alguna vez sintieron esa sensación de estorbar en la vida de alguien, y sentir que es mejor irse, pero no quiere, no pueden?

En los últimos meses nuestra amistad ha cambiado, pero luego me siento sola, fría y vacía, y ella llega con una sonrisa amistosa y todo vuelve a estar bien. Es decir. Creo y considero que no es culpa de ella, quizás el problema sea yo; y es lo más probable. Yo y mi inseguridad, yo y mi depresión. Esa que de la nada y sin previo aviso viene a decirme "Mira, esa chica... es más linda que tu" "Ella no es buena amiga, está contigo solo cuando te necesita. Deberías dejarla." Y esa misma que en los momentos malos no me abandona, no, no me abandona. Se queda para decirme que ellos me quieren, pero cuando quieren y para lo que quieren... La misma que me pregunta si se para que me quieren. Y no, la respuesta es no, porque nunca les he preguntado y no es por miedo, quizás es porque ya se la respuesta. O quizás sí, a lo mejor es por miedo a que me digan la respuesta que yo sé que me dirán.

Tal vez no es mi mejor amiga, tal vez no me quiere como yo a ella, y posiblemente se vaya y me abandone.

A veces aceptamos como solo por no querer perder a esa persona, por no quedarnos con nada. Pero no nos damos cuenta que si esas personas se van, no nos quedaremos sin nada, al contrario... encontraremos algo mejor. Solo tenemos que arriesgarnos. Pero a veces ese es el problema, arriesgarnos. Y nunca podemos, porque tenemos miedo.

La gran premisa es "¿Y si nos arriesgamos y sale bien?" pero nuestro miedo nos dice que saldrá más. Y cuando nos arriesgamos por primera vez sale mal, porque es normal. Entonces es ahí cuando creemos que no deberíamos arriesgarnos, que nuestro miedo tenía razón, y ya no nos volvemos a arriesgar, al menos no por lo mismo. Entonces recién ahí es cuando perdimos, recién ahí perdimos. Cuando ya no volvemos a intentarlo por miedo... entonces el miedo nos ha ganado.

¿Quizás es eso lo que me paso con Matthew? Puede ser... no lo sé.

Y es que... como sentirme cómoda con tanta cosa como él y con tan poca cosa como yo...

No soy bonita, y mi cuerpo no está completamente desarrollado, y para lo único que sirvo es para el colegio, no sirvo para nada más que para eso.

Mamá... yo sé que no he sido la mejor hija, pero quisiera que estés aquí conmigo acompañándome, pero no estas. También sé que tú tampoco eres la mejor madre, pero aun así quiere que estés aquí conmigo porque eres mi madre y no necesito un motivo para pedir que estés aquí, porque tienes que estarlo porque eres mi mamá y porque no se necesita un motivo para querer algo, o a alguien. No se necesita un motivo para nada, solo hay que hacerlo y ya, y sin miedo. O con miedo, no importa, pero hacerlo.

Pero mamá, quisiera que estés aquí conmigo...

Y justo cuando comenzaba a pensar en él, así como en las películas, apareció abriendo esa puerta como si el mundo no importara.

-¡Eres una tarada!- Comenzó a sollozar y me abrazo.

-Siento mucho esto.

-Como lo has hecho. Que tonto fui, ¿Cómo no me di cuenta que te sentías así, como no lo hice? Tú eres para mí...

-Ya... no hagas esto más difícil- Mientras escuchaba el latir de su corazón por la cercanía de nuestros cuerpos envueltos en lágrimas de amor y dolor, le escuche decir "Te amo"

-Yo... yo también te amo, Justin.

-Soy tú mejor amigo ¿Cómo no me dijiste que te sentías así? No, por aún ¿Cómo no me di cuenta que estabas mal después de todo lo que te paso, por qué no te ayude?

-Pero nadie lo hizo, y tú no tenías que ser la excepción. Siempre quieres serlo, siempre quieres ser el héroe de todos, pero no. Lo siento, pero no hagas esto peor...- Lo abrace con más fuerza.

¿Cómo puedo explicar cuanto lo amo? No... no tengo que explicarlo. Tengo que sentirlo, y lo siento, y solo me importa que él lo sepa, y lo sabe, lo sabe...