"Una vez encontré un retrato escondido entre los libros de alquimia, por suerte, no estaba nadie a su alrededor, así pudo recogerla con suavidad y observó detenidamente cada detalle de aquella hoja que de alguna forma era resistente. La verdad es que me atrajo la mirada tan contundente y seria que tenía aquella joven, además de brillar con vida propia de un color azulado verdoso parecido al mar cuando es cristalino y puro. Sin embargo, aquel toque rojo que añadieron dentro no era perteneciente a su iris, sabía que no, presentía más bien que era un toque desconocido de alguna emoción que albergaba en su interior y que solo el quien pintó aquello parecía conocer la razón. Mis dedos fueron trazando las marcas rojizas de sus mejillas y nariz, hasta terminar en la curva de su labio superior, ¿quién era y por qué se me hacía tan familiar al punto que creaba una tristeza que no comprendía? Oí un ruido de pasos a lo lejos avisándome que alguien vendría así que sin ser consciente y sin actuar responsablemente accedía a guardármela en el pequeño bolso que tenía atado al cinturón.
-¡Gardienne! -La voz de la brownie resonó a la par que abría la puerta, en seguida, suspirando de alivio por haberme encontrado y decidí sonreír nerviosamente ya que temía haber sido descubierta en esta pequeña fechoría. Sus pies se movían de un lado a otro demostrando así que no estaba para nada calmada y decidí dejar que continuara así hasta querer hablar.- ¡Te estuve buscando en todo el cuartel! Tenemos una misión en el valle de Orion.
-¿Es muy importante? -Sus ojos me escrutaron mientras adquiría su rostro un color verdoso.- Cálmate, Ykhar, ahora mismo voy.
-Solo... es un sitio que no estamos en buenas condiciones.
Quise preguntar en aquel momento ya que parecía reflejarse el arrepentimiento en sus orbes, y antes de poder consolarla aunque fuera apoyando mi mano en su hombro fue tomada por sorpresa de la muñeca por la brownie, llevándome lejos de la sala de alquimia, sin decir ni una palabra más demostrándome así que aquel sitio tenía un recuerdo amargo en su memoria."
-¿Es un retrato? -Harleen interrumpió aquel recuerdo mostrándose interesada mientras la castaña buscaba entre sus pertenencias y atinó a sacar un libro bastante usado reconociéndolo como su escondite.- Déjame verla. -No necesitó siquiera pedirlo más veces ya que recibió el objeto en sus manos para verlo con sus propios ojos dejándola impresionada.- Aún la conserva.
-¿Quién es?
-Aline.-Decidió devolvérsela para que volviera a guardarlo.- Era alguien muy cabezota, metiéndose en líos constantemente, confiaba en los demás.-Esbozó una sonrisa ladina.- Siempre anteponiendo a la gente antes que a ella misma, pertenecía a una familia real de elfos que mantenía una unión con los metamorfos de mi pueblo. Fue así como nos conocimos y nos hicimos amigas, pertenecíamos a la misma clase, con la excepción de tener más libertades.
-Entonces... ¡También era una elfa!
-Tenía la mitad de esa sangre, no era bien visto, nunca supe por qué la aceptaron. Nadie lo sabía alrededor, creían que era una humana de las pocas que había o una faelienne de sangre desconocida.-Emitió un suspiro.- Lo supe porque nos criamos juntas.-Apretó los labios intentando no llevarse por sus emociones y despejar su mente.- No éramos damas que acompañan, ni pertenecíamos a la corte, para nada. Éramos guerreras y cuando nos enteramos de la guardia de Eel, quisimos apuntarnos a pesar de tener que renunciar a un buen puesto. Para aquel entonces esperábamos a Keroshane, quien nos iba a realizar el test de la guardia, estábamos ansiosas por empezar y nunca olvidaré ese día ya que por una vez no coincidimos en el mismo grupo.
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Broken
Fiksi Penggemar[PAUSADA - PRÓXIMAMENTE EDITAR] Gardienne desconocía al completo el mundo sobre Eldarya, tuvo que aprender desde cero para sobrevivir su día a día sin tener que prescindir de los demás. Por eso mismo aprendió a base de equivocarse, sin rendirse, sig...