-Casi-

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-¡Tincho!

Manuel suspiro mientras abría la puerta dejando pasar a un molesto y preocupado uruguayo, estaban recién tomando desayuno, habían decidido no hablar jamás de lo ocurrido la noche anterior por el bien de ellos y del mundo. Más que nada porque, a pesar de los rubios se habían aprovechado de la situación, querían y debían negar a toda costa los besos que se habían dado inconscientemente...

Pensaban que el chileno no se había percatado de aquello por su borrachera, y es que ni ellos sabían como se habían comenzado a besar y preferían dejarlo como esos secretos que no quieres que nadie sepa. Mala suerte para ellos que Manuel si recordaba aquello y que obviamente, pensaba aprovecharse cuando tuviera la oportunidad... ¿Que mejor que poder joder a esos dos al mismo tiempo pudiendo dejar el mundo arder?

-¿Que sucede, che?-pregunto el argentino tomando su mate sin mirar al estadounidense que bebía tranquilamente su café

-¡¿Como que "que" sucede, boludo?!-exclamó ignorando que los otros tres estaban con resaca

-No griti' porfa...-susurro el chileno suspirando

-Lo siento bo-se disculpó mirando de nueva cuenta a su primo-¿Fuiste vos?

-¿Yo que?

-¿Entonces vos no hiciste nada?

-¿Que se supone que hizo?-pregunto Manu con curiosidad

-Victoria apareció casi muerta hoy en la mañana, el inglés cejudo esta hecho una furia-dijo acomodando sus lentes

-¡¿Que Vicky que?!-exclamó el argentino-¡Oye! ¿Y porque le habría hecho yo eso? Si es como mi hermana, boludo, aparte es una chica

-Nunca se sabe de vos, cuando se trata de Manu

-No te vayas del tema, decime que pasó

Manuel tomó su móvil viendo la hora, había mensajes de Arthur, de Victoria y de su hermana. Ignoro los mensajes de los dos primeros y vio directamente los de su hermana. Trató de contener el temblor en su cuerpo, miro a Alfred que seguía tomando su café con mala cara pero que al notar su mirada le sonrió levemente, suspiro de nuevo poniéndose de pie y tomándose el té de un sólo sorvo

-¿Pasó algo?-pregunto el estadounidense

-La Tiare dice que tengo que ir a buscar a los niños-dijo dejando lo que ocupó en el lavaplatos

-¡Voy contigo!-dijeron los que durmieron con él poniéndose de pie rápidamente levantando una mano

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-Manu va a matarme por traerles a esto...-susurro la castaña con unas lágrimas en sus ojos

-¿Por que casi matas a esa chica o porque estamos en la cárcel-desuyo?

-Aweonao' le haci' sentir peor boludo-reprendió Carlitos

Efectivamente, estaban en un retén de policías en Santiago, se habían encontrado con Malvinas cuando salieron del hotel a pasear un rato para hablar mientras caminaban sobre lo que pasaba, pero... tal y como se lo había prometido la isla mayor, le había hecho mierda a la buena chilena en el suelo.

"No me arrepiento" se repetía en la mente tratando de hacer un agujero en la pared mientras los menores volvían a dormir, recién había podido contactar con su hermano para que fuera a sacarlos de allí o al menos para que sacará a los otros dos, suspiro rindiendose hechandose para atrás mirando el techo.

-¿Estuvo bien... verdad?-susurro

Se había sentido un poco mal al tener que golpear a su "amiga", y de quien estaba secretamente enamorada, pero nadie se metía con su familia ¡Y que más encima dijera que Carlitos sólo se un pretexto para que Martín estuviera apegado a Manuel! El niño no tenía la culpa, no tenía porque ser incluido en problemas de naciones... y... vaya que le había dolido todo eso. Podrían haber hablado tranquilamente, si tan sólo ella no hubiera ofendido a su hermano ¡SÓLO ella podía hacerlo!

-¡Tiare y la conchetumare! ¡¿Como se te ocurre hacer eso weona?!-escuchó los gritos de su hermana a la distancia y sintió un escalofrío recorrerle la espalda

Secó las lágrimas y se puso de pie limpiando su pantalón se acercó a las barras y le sonrió levemente con nerviosismo al castaño. Manuel noto que su hermana había estado llorando, también lo había notado Martín pero no dijo nada, en silencio sacaron a los tres de allí para llevarlos a la casa

El argentino cargaba a su hijo con cariño, como si fuera la primera vez, y el estadounidense se llevaba a la micronación en su espalda

-Lo siento...-se disculpó la isla mayor abrazándose al brazo de su hermano separándolo un poco de los dos rubios

-No te preocupi' pero... ¿Qué pasó?-pregunto

-Le saque la chucha a la Victoria-dijo seriamente apretando el agarre en el brazo de su hermano-Se lo merecía por tratarlos asi...

-¿Así que tu fuiste?-pregunto algo impresionado, pero no iba a decirle nada, él igual tenia ganas de pegarle a Malvinas, pero al parecer era suficiente con la paliza que él había dado su hermana

-Lo siento por los problemas que vai' a tener con el inglés...-dijo suspirando

-Nah, que tanto color oh si el Arthy con cuea' va a decir que tenga mas cuidado contigo y la wea...-dijo riendo para tranquilizar a la castaña y le acarició su largo cabello- Gracias

-¿Eh? ¿Por que?

-Porque yo igual queria hacerle eso hace rato, pero no seria bien visto y ya tengo suficiente con lo de la Copa América y mi "relación" con el gringo

-Ya veo...-susurro sonriendo levemente

El resto del camino paso entre bromas de los castaños, hablando de cosas que salen por salir, mezclando temas de conversación con otros cambiando a cada minuto. Podrían haber estado hablando de animales y habrían terminado hablando de cuántos planetas habían en total en el universo entero...

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-¿¡EH!? ¡Pero yo quería salir con vos/You!-gritaron los rubios porque cuando llegaron de dejar a los niños en el cuarto de Tierra de Fuego el chileno les había dicho que esta vez, saldría solo con su hermana

-¡Yo tambien quiero salir con Manu! Además, soy su hermana, tengo mas derecho que ustedes, teñidos-dijo Rapa Nui abrazando celosamente al nombrado sacándole la lengua a los rubios

-¡P-Pero...!

-Voy a salir con ella y punto-dijo el castaño

Tomó su chaqueta, aún era temprano pero estaba seguro de que no iba a volver hasta eso de las 4 de la madrugada, su hermana les sonreía con burla a los otros dos. Mientras iban caminando hablando de la nada misma, Tiare se quedo mirando algo fijamente, cuando Manuel se dio cuenta volvió a su lado y le pregunto que tanto están mirando en esa casa, no había nada en especial sólo tenía timbre...

Timbre...

Timbre...

Timbre...

-¿Jugamos?-pregunto la isla sonriendo divertida

-No creo qu-

-Mala suerte, ya toque-dijo tocando el timbre con fuerza- ¡Corre conchetumare!

Y así, llegaron hasta una ronda cualquiera, "jugando" a tocar los timbres como cuando eran mas jóvenes y se veían más a menudo. Al llegar Manuel golpeo suavemente la cabeza de su hermana diciéndole que no volviera a hacer eso mientras trataba de recuperar el aire, la isla sólo se burló de él diciéndole que debía dejar de estar "pololeando" y "joteandose" con los rubios y que se enfocara más en su salud...

Aunque por dentro ambos estaban preocupados...

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