Scarlet Passion

854 86 22
                                    


¡Buenas noches! Es domingo de lectura, por eso les traigo el segundo cap de este nuevo fic, espero alcance sus expectativas.

°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°

Sousuke llegó a su departamento junto a Makoto, a quien había obligado a acompañarle al bar.

—Sabes que no me gustan esos lugares — se quejo Makoto una vez más, intentando que Sousuke desistiera de arrastrarlo junto a él.

—No seas quisquilloso — lo riñó Sousuke con fastidio mientras abría la puerta de su hogar.

«Guau, Guau»

Nada más entrar fue recibido por su perra, una pastora alemán, que salto encima del moreno haciéndole tambalear por su gran tamaño.

—Estoy de vuelta, Sasha — saludo el moreno con una sonrisa, que solo mostraba a ella, el can meneaba la cola con alegría a su dueño.

Sousuke dejo su chaqueta en el perchero de la entrada, Sasha volvió a ladrar y recibió al castaño con la misma empatía y entusiasmo que a su dueño.

—Buena chica — le habló el castaño con cariño —¿Te has portado bien?— Sasha ladró en respuesta, como si contestara lo que Makoto preguntaba.

—Termina de entrar, y cierra la puerta — ordeno Sousuke al castaño, aun le sorprendía lo bien que Sasha lo aceptaba, ese animal no quería a más nadie que no fuera su amargo dueño, y bueno a Makoto, con el resto de las personas mostraba una hostilidad de temer, por esa razón Sousuke tuvo que retirarla del entrenamiento policial, no aceptaba a ningún instructor.

—No seas tan gruñón — decía Makoto mientras hacia lo que le ordenaron.

—Iré por una ducha, mientras hazme el favor de servirle comida a Sasha — pidió el moreno, mientras caminaba en dirección al baño.

—Ya te hacía falta — se burlo el castaño — Procura quitarte esa barba, ya que iras en plan de conquista — sugirió, Sousuke tenía una descuidada barba de cinco días, no se le veía mal, pero le hacia parecer mayor y su presa del día era un jovenzuelo.

—Si, como digas — gritó Sousuke perdiéndose en el pasillo — después es tu turno, a lo mejor y consigues a tu esposa.

Makoto dejo escapar un largo suspiro mientras se disponía a darle de comer a Sasha, tal vez él sintiera algo más por Sousuke, muy en el fondo, solo que no quería aceptarlo, se negaba a ello, por eso era que no lograba conseguir una esposa, porque aunque añoraba tener una, tal vez esperaba que fuera Sousuke quien ocupara su lugar.

Quizás el castaño se sentía cohibido de aceptar sus sentimientos por miedo al rechazo, además de Sousuke no se interesaba por nadie, era como si en lugar de corazón tuviera un gran iceberg indestructible como el que acabo con el Titanic, y el tenía miedo de terminar como ese gran barco.

Por eso lo mejor era quedarse como su amigo, ignorando esos molestos sentimientos, y esperando a que alguien se robara el lugar del ojician.

Sousuke estuvo fuera de la ducha después de unos quince minutos, totalmente limpio y con su cabello húmedo, parecía cinco años más joven de lo que en verdad era.

— Tu turno — anunció el ojician, Makoto asintió sin mirarlo muchos, y se fue al baño — En el baño hay toallas limpias.

Sousuke se encontró con Sasha durmiendo en su cama, que estaba junto a la de él, reviso su armario y para sacar su ropa, hace tiempo que no salía para él era una perdida de tiempo hacerlo, porque ese tiempo se lo podía dedicar al trabajo.

No caeré ante ti [SOURIN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora