"Yo, La Pandilla Y Él"

Capítulo I

- Estoy llegando ¿en dónde estás? - le pregunté por celular a MJ.
- En el baño pintándome, ahí salgo a la puerta.
- Ok.
Finalicé la llamada y devolví el celular a mis pantalones.
Miré alrededor buscando el bar "Fredo", que últimamente había tenido muy buenas críticas por parte de los jóvenes, en especial, porque se encontraba muy cerca de la Facultad de la provincia.
Esquive dos grupos grandes de chicos que esperaban fuera del lugar e inmediatamente mis ojos se fueron a uno de ellos en particular. Estaba fumando, medio apoyado en la pared del local con sus piernas cruzadas y la mirada aburrida, como si esos chicos guapos de más allá no fueran de su agrado.
- ¡Jade! - gritó MJ mientras me abrazaba por el cuello e interrumpía mi bella vista. - Los chicos no han llegado todavía pero podríamos ir entrando. Ya reservé una mesa... para 6.
MJ era casi de mi misma altura, apenas unos centímetros más baja que yo y yo estaba muy agradecida por eso ya que no suelen haber tantas chicas que midan más de 1,70 de alto. Nos conocíamos desde la primaria y ahora que estábamos en facultades diferentes aprovechabamos los fines de semana para ponernos al día. Como hoy. Solamente que hoy no iba a ser una salida normal de chicas, esta vez iba a presentarme a sus nuevos amigos de la Universidad. Y yo, no cabía en mí misma de la emoción y de los nervios.
Di una última mirada al chico con aire misterioso de la pared justo cuando él dejaba escapar el humo de su boca... Sexy.
Subimos a la parte superior de Fredo, en donde, por suerte, si funcionaba el aire acondicionado. Aún no era verano y ya el calor nos estaba matando.
- Entonces ¿cómo son? - pregunté intrigada.
Se encogió de hombros.
- Son buena onda, creo que te van a caer bien. Chop está un poco loco pero es gracioso, Archie es un genio, me cae re bien y Finn, bueno, a él no lo conozco mucho la verdad.
Asentí con la cabeza. - ¿Y Zoe viene?
- Dijo que sí pero sabes que ella siempre llega tarde.
- ¡MJ! - gritó un chico mientras subía las escaleras, tenía el pelo bien corto, casi rapado y un diente roto. Inmediatamente pensé en que él debía ser Chop. Detrás de él, lo seguía un castaño que llevaba puestas unas gafas y lo hacían lucir como un total geek. Lindo.
El primero abrazó a mi amiga y me saludó con un asentimiento antes de sentarse a su lado. En cambio, el geek, me sonrió y me dio un beso en la mejilla después de saludar a mi amiga con un beso en la frente y sentarse a mi costado.
- Soy Archie ¿y tú eres?
- Soy Jade - y le tendi la mano quedando como una total patética formal.
Él se río y me la estrecho de igual forma.
- Lo siento - interrumpió una voz - estaba terminado mi cigarrillo.
Lentamente subí mi mirada deseando y no queriendo al mismo tiempo que fuera el chico misterioso de la pared.
Él me miró y me guiñó un ojo antes de sentarse en frente mío.
¡Dios!