The Changer [WOWAwards2k17]

Capítulo 3

Abro mis ojos y reconozco mi habitación. Me siento confundida por un instante en lo que logro ubicarme. Cómo he llegado aquí. Lo último que recuerdo es verme en la vitrina. Me levanto pero un fuerte zumbido en los oídos aumenta el dolor de cabeza. Decido ir con mamá a preguntarle quién me ha traído a casa.

-¿Candy, cuándo entraste? No te oí llegar. Estas muy pálida. ¿Te sientes bien?-interroga inmediatamente me ve, tocándome la frente con cara preocupada.

- Si mamá no te preocupes solo estoy cansada con todo esto de la mudanza- digo con voz apagada.

Mamá retira su mano molesta.

- ¿¡Crees que eres la única!? Todos estamos preocupados y cansados. ¡No te hagas la enferma para no ayudar!- dice muy molesta mientras avanza a una pila de cajas al fondo de la sala

- ¿Qué? Mamá, no lo hago por eso. Solo estoy cansada pero ayudaré a empacar todo – mi voz muestra lo molesta que estoy. Siempre malinterpreta lo que digo.

- ¿Y Emma? -cuestiona sin siquiera mirarme.

- No lo sé. La vi salir antes que yo de la escuela- le digo, caminando hacia las escaleras, decidida a ir a mi habitación antes de que la pelea empeore, pero es demasiado tarde.

- ¿Y porque no vinieron juntas? ¡Es tu responsabilidad como su hermana mayor protegerla! - grita molesta desde la cocina.

- Mamá, Emma tiene 15 años no creo que me necesite de niñera. Además, como te digo, ella se fue antes. Si hubiera querido irse conmigo, me hubiera esperado- trato de controlar mi tono de voz pero aun así, termino gritando.

- ¡No me alces la voz, jovencita! ¡Te recuerdo que soy tu madre y debes respetarme!- dice molesta.

Me está enojando de verdad. ¡Además, fue ella la que comenzó a gritar! ¿Por qué siempre pelea conmigo? ¿Por qué debo tener la culpa de todo?

- Sabes mamá, estaré arriba terminado de empacar mis cosas. Si necesitas ayuda con algo avísame- y antes que diga algo subo rápidamente las escaleras.

Mi relación con mamá ha sido complicada siempre pero por alguna razón últimamente estaba de peor humor conmigo, al contrario que con Emma. Pasamos el resto de la tarde empacando, por supuesto mamá me ignoró la mayor parte del tiempo, pero aun así fue agradable hacer algo juntas.

Mi hermana llegó a casa pasadas las seis y como era de esperarse no tuvo reprimenda alguna. Cuando mi papá volvió del trabajo, todo estaba listo para cuando llegara el camión de la mudanza a la mañana siguiente. Subo a mi habitación, me tiro en la cama y veo todo tan vacío que casi me pongo a llorar y lo hubiera hecho si no fuera por una bolsa morada, el regalo de Sally. Lo tomo y me siento en mi cama. Dentro había la elegante invitación a una fiesta.

  El resto del contenido de la bolsa: un vestido negro.