Soy Whitney, pero me llaman Whyte.
Tengo 17 años y vengo de una família con bastante dinero, pronto me mudaré a California con mi padre y mis cinco hermanos.
Quiero ser una más en mi nuevo instituto, me encanta bailar, el...
Estoy en el maldito avión direción a California, y tengo unas ganas infernales de patearle el culo al niño del asiento de atrás, por no parar de darme patadas y gritarme a la oreja todo el viaje, mis queridisimos hermanos al contrario que a mi, les ha tocado a cinco chicas fresas, una para cada uno.
-¡Al fin, pensé que moriría aqui dentro!- Digo saltando las escaleras del avión para dirigirme a la puerta de salida.
Cojo mis maletas y me dirijo a la límusina que nos espera para llevarnos a nuestra nueva casa.
-¡White!- Chilla mi hermano Dylan des de la otra punta del aeropuerto, haciendo que la gente se sobresalte, y nos mire extraño- Dice papá que te olvidas a tu estúpido perro- Indignada le doy una bofetada y corro hacia mi pequeño cachorro, mientras Dylan se soba la mejilla, haciendo pucheros.
(...)
-¡Uauuuu!-me encanta California le digo a Connor, mi hermano favorito.
Se rié y me revuleve el cabello
-A nosotros también nos gusta- dice Chase emocionado, los otros tres asienten con una sonrisa.
Bajamos del coche y nos dirijimos a la immensa casa que tenemos delante de nuestras narices, entramos corriendo y nos encabezamos en una habitació que de ahora en adelante será nuestra. Yo, por mi lado voy observando cada habitación hasta que doi con la perfecta. Entró y tiro mis maletas por el suelo y salto encima de la cama, observando el techo azul turquesa.
Contemplo la habitación un rato y veo una silla balanceadora, un escritorio, un vestidor, una ventana con una repisa para sentarse, una estantería enorme, dos mesitas de noche y por último una cama de matrimonio.
Salgo de la habitación para explorar el resto de la casa, es muy grande y muy moderna, con un patio trasero grandioso. Me adentro a una habitación que parece muy espaciosa, resulta que es una sala con un televisor, muchas consolas y varios sofas de manera que encajan perfecto.
- Ya he visto que te a agradado la casa- Me dice papa muy feliz.
-Si- Asiento entusiasmada.
Nos dirijimos a la cocina donde una mujer de unos cuarenta años esta preparando la cena.
-Hola- Le saludo amablemente a la cocinera, ella se gira y me dedica una sonrísa muy contenta.
(...)
Acabados de cenar nos dirijimos a nuestras habitaciones a preparar las cosas para mañana ya será nuestro primer día en el instituto High School California.
Habitación de White:
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