Soulmate. (Cake/5SOS)

Seven.

"Sex"

Calum se dejó llevar completamente por su parte dominante. La adrenalina corría por sus venas y la lujuria siempre estaba presente. Sus manos acariciaban la piel pálida de su omega, sus labios succionaban para dejar chupones en todo su cuerpo con tal de dejar en claro a quien pertenecía y estaba atento a los excitantes gemidos que soltaba su pequeño.

Escuchar los gemidos de placer del rubio lo incitaban a dar más de sí. Acarició la piel desnuda del menor, pasó sus manos por su cintura y apretó con una mano su entrepierna. Luke gimió fuerte, estaba desesperado por sentir a su alfa, después de tanto tiempo. El rubio besó los labios de Calum, tomándolo un poco de sorpresa y luego tiró de sus pantalones para quitarlos, no le parecía justo que él estuviera desnudo y su alfa usando pantalones.

— Yo mando aquí. — Gruñó en su oído, aunque se dejó quitar la última prenda. Luke negó y empujó por los hombros a su alfa, se puso a horcadas de él y comenzó a moverse para sentir una deliciosa fricción entre sus entrepiernas. El alfa abrió sus labios para dejar salir un sonoro gemido, luego tomó por la cintura al rubio y volvió a posicionarlo debajo de su cuerpo, le gustaba el control, le gustaba tener al omega atrapado y sin escapatoria alguna. No era algo que Luke pudiera negociar, Calum siempre estaría a cargo.

— P-por favor..Q-quiero...¡ah! N-necesito.. — Era incapaz de decir una frase coherente, era demasiado. Calum seguía moviendo su cintura para lograr la fricción que anteriormente estaban experimentando, aunque esta vez sostenía las manos del menor sobre su cabeza. Luke quería soltarse para poder pasar sus manos por todo el cuerpo de su alfa, quería sentirlo bajo su tacto y disfrutar aún más de su cercanía, rasguñar su piel, sentir su calor y sentir la realidad.

En otra ocasión el moreno haría rogar un poco más al omega pero era Luke, su omega y su alma gemela. Estaba desesperado por sentirlo y no quería esperar más, lo tenía entre sus brazos y a disposición de todo. Dejó de moverse y llevó una de sus manos a la entrada de Luke quien se sobresaltó un poco pero no dijo nada, solo gimió.

— Tan listo para mí.— Murmuró con una voz grave y seductora que logró llamar la atención del rubio, escuchar la voz profunda de su pareja decir esas palabras solo lo encendió más. Calum hundió uno de sus dedos dentro de él, recibiendo gemidos como recompensa por parte de Luke.

— M-más...por favor.. — Rogó, empezando a soltar algunas lágrimas de desesperación, su cuerpo le pedía a gritos algo de atención. Estaba húmedo y perfectamente listo para su alfa, no quería esperar más, había esperado años por una ocasión así y, aunque no era como lo esperaba, estaba sucediendo. Calum asintió y tomó su miembro, alineandolo con su entrada. El menor abrió los ojos ante su longitud, era grande...no había visto muchos penes en su vida pero sabía que era mayor que el promedio.

Luke gritó tan fuerte que pudo sentir su garganta doler, dolía y mucho pero valía la pena, su alfa estaba ahí e iba a complacerlo. Abrió un poco más las piernas y envolvió la cintura del moreno, ni siquiera había entrado por completo cuando cálidas lagrimas se deslizaron rápidamente por sus mejillas. No estaba seguro si las lágrimas eran de dolor o placer, quizá ambas.

— Oh, maldición.— Gimió Calum. El omega se sentía tan bien a su alrededor, era perfecto. Decidió llegar hasta el final y de un rápido movimiento entró en él por completo y Luke gritó nuevamente.— M-mío. — Gruñó, sus ojos fijos en su cuello mientras que se movía rápido y fuerte dentro de él, el rubio no podía creer lo bien que podía llegar a sentirse. Luke no lo notaba pero instintivamente su cabeza se ladeó para darle más acceso a Calum quien se veía tentado a morder su cuello, lo ansiaba. No se privó de sus deseos y llevó sus labios húmedos a esa zona, saboreando su piel a gusto.

El omega se sintió un poco intranquilo cuando sintió sus labios empezaron a besar justo en el cuello, sabía lo que quería y él también lo deseaba. Luke tiró de sus muñecas y Calum las soltó, estaba muy distraído besando su cuello y dejando marcas por todas partes, era posesivo, quizá demasiado.

Luke se abrazó a su alfa con fuerza, estaba a punto de llegar a su límite, Calum lo estaba llevando a su límite. El rubio llevó una de sus manos a su oscuro cabello y tiró de este, le causaba cierta excitación tenerlo contra su cuello, sus instintos dominaban sus acciones y no, no era algo favorable.

— Mío. — Murmuró en su oído. Fue todo lo que necesitó Luke para llegar a su orgasmo y para que Calum mordiera su piel, marcando al omega como suyo para siempre.

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