iv

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En el momento en que TaeMin comenzó a juntarse más con MinHo, se le hizo inevitable no olvidarse del resto o de cómo era antes. Se le hizo inevitable olvidarse de lo preciadas que eran las cosas, de las reglas que había que cumplir, de cómo se vivía la vida normal y no de joven rebelde que dejaba de creer en lo comercial y que no se preocupaba por nada.

Cuando TaeMin dejó de preocuparse por quedarse fuera de su casa sin avisar, se dio cuenta que había cambiado; que el dormir en un colchón en un lugar en donde no habían ventanas, ya no le importaba y que el beber cervezas un lunes a las once de la mañana, no parecía tan pecado ni tan terrible como antes creía que era.

Es por eso, que cuando se ve obligado a ir a la facultad a retomar un examen que debía dar hace una semana y del cual se olvidó, lo hace de malas ganas, con mal humor, sin arreglarse y arrastrando los pies en cada paso que da, mientras su ropa, ahora, de un claro estilo despreocupado y andrajoso, daba a entender las pocas ganas que tenía de hacer las cosas.

Su rostro no cambia cuando le obligan a unirse a una chica que se había ausentado a causa de una licencia médica, ni sus ganas aumentan ni se hacen ver cuando ésta le hace ir a la biblioteca a investigar sobre un tema del que él ni siquiera había escuchado.

TaeMin sube los pies a la silla continua cuando se sientan en una mesa de la biblioteca y sonríe cuando observa a su alrededor y nota a MinHo a la distancia, mirándole con una ceja alzada, mientras se levantaba de manera lenta y caminaba hasta él. Solo que cuando se sienta en su mesa y deja un libro sobre ésta, nota que MinHo no le sonríe a él sino que a la chica que ahora miraba al más alto por sobre el libro que buscaban, observándole entre avergonzada y coqueta.

TaeMin lo nota. MinHo probablemente también, pero le es más fácil hacerse el tonto.

— ¿Y tú eres...?

— Hey.

MinHo ignora la pequeña patada que le da TaeMin en la pierna y sigue mirando a su compañera, como si ese mínimo golpe ni siquiera lo hubiera sentido.

TaeMin mira a SuWan y frunce el ceño y aprieta los labios, sintiendo un molesto sabor al final de su estómago. No sabe porqué, pero lo siente.

— MinHo.

Pero le ignoran. Ambos le ignoran.

MinHo le ignora cuando él le llama y le ignora cuándo le dicen que vayan a comer por ahí porque ya estaba libre. MinHo le ignora cuando oye el nombre de SuWan y le ignora cuándo se queda con ellos, distrayéndolos.

MinHo le ignora por primera vez y TaeMin no lo soporta.

No entiende porqué.

Tell Me What To DoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora