Capítulo 29.

5.3K 255 19
                                    

29 | A tus pies

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

29 | A tus pies.


Él me observó por un momento y después pregunto.

—¿Estas bien?
—Sip.

Lo vi tragar saliva y movió la mano que estaba en mi vientre a una de mis mejillas y con su pulgar acaricio un poco mis labios mientras sus ojos estaban en los míos.

—Solo quiero estar cerca de ti. No pasara nada.—Dijo susurrando y acerco sus labios a los míos.

No sé si sentirme más tranquila por el echo de que no quiere hacer nada. Creo que me dejo igual de inquieta. Me moví un poco debajo de él, lo que provocó que se alejara un poco de mi. Me volvió a observar por un momento y después se sentó. También me enderecé un poco. Ahora me sentía mal. Creo que él pensó que yo no....

No dijimos nada. El silencio que siguió después fue incomodo y frustrante. Suspiré y me levante de la cama para ir al ventanal. Joder. Lo eche a perder. Me mordí el labio y cerré los ojos horrorizada por la situación. Me cruce de brazos y un segundo después lo sentí detrás de mí.

Me abrazo y puso un pequeño beso en mi mejilla derecha. Y se quedó en esa posición.

—Oye. ¿Qué pasa? No quería incomodarte. Lo siento.—Me abrazo más fuerte.

—No. Yo lo siento.—Me di la vuelta en sus brazos y eche la cabeza atrás para poder ver sus ojos. —No quería arruinarlo. Es solo que.... que yo....

—Shhhh.... lo sé. Está bien. No voy a forzarte hacer nada que no quieras. Solo quería recostarme un rato y abrazarte.

Susurro dejando un beso en mi frente y me golpee mentalmente. Estúpida. Lo arruinaste y bien. Él solo quería estar ahí y sostenerte y tú vas e imaginas toda una película en tu mente. Idiota.

Mordí más fuerte mi labio enojada conmigo misma y negué un poco con la cabeza. Él ni siquiera pensaba en eso. Por supuesto que no te quiere para eso. ¿Para que? ¿Después de las mujeres que ha tenido? Eres solo una niña a su lado Gokari. Que ilusa.

Él se dio cuenta y levanto mi barbilla para que lo viera a los ojos. Pero me negué hacerlo.

—Mírame.—Negué con la cabeza. Sentía tanta vergüenza. —Nena mírame.

Me obligó a verlo a los ojos agarrando con ambas manos mi cabeza.

—¿Qué sucede? ¿Gokari?

Suspiré. — Lo siento. Sé que no pensabas en eso. Yo solo..... Se que solo soy una niña al lado de todas ellas y que tú no...... que yo no..... Que tu.... Y yo....

—Detente.

—Se que no soy....

—Ya basta. Hablo en serio. Deja de hablar.—Me calle ya que elevó un poco su voz. —¿Estas escuchándote? Por Dios Gokari. En primera....

Un Destino Inevitable •Trunks•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora