Extra

2.1K 102 13
                                    



Todo parecía en penumbras a pesar de ser de día, camine por los pasillos desolados rápida pero sigilosa. Si me encontraba con alguien; quien fuera, estoy segura que moriría de vergüenza. Aún traía el vestido vintage de ayer, sería muy obvio y facial de adivinar porque aún tenía esta ropa. Así que suspiré aliviada cuando vi la puerta de nuestra habitación.

Abrí despacio y asome la cabeza por si Gokari seguía durmiendo no la despertara. Pero mi sangre subió a mi cabeza cuando la vi parada frente a la cama con su maleta abierta y me miraba con una sonrisa burlona. Demonios lo sabía. Di un paso y casi estaba a punto de vomitar una excusa cuando ella levanto una mano callándome.

—Ahórrame los detalles. Solo date prisa llegaremos tarde.

Entre por completo y tome mi maleta subiéndola igualmente a la cama, la sentí observarme así que la mire. Traía el cabello seco y se veía muy despeinada. La mire de pies a cabeza dándome cuenta de que esa bata no es de ella, acentuando de que le queda enorme y tiene un aroma a hombre.   Arquee una ceja interrogándola.

—Que?
Pregunto sacando su jean.

—Tampoco pasaste la noche aquí.

—Jamás dije que si.

Esa perra tampoco paso la noche aquí?? Abrí la boca sorprendida y di unos pequeños saltitos.

—Cuéntame. Como estuvo? Lo hicieron?

—Tori tenemos menos de 15 minutos para llegar a la escuela. No es momento.

—Si lo es. En serio, júralo. Tuvieron sexo??

—No fue solo sexo. Hicimos el amor, sus palabras.

Abrí la boca sorprendida y emocionada y no me dejo hacer más preguntas porque me apuro a arreglarme para irnos rápido a la escuela. Y cuando busco su ropa interior y no la encontró me miró mal. Sonreí y después la ignore. Trunks debía agradecer que le haya regalado esa ropa sexy, su madre por supuesto nunca la compraría. Cuando terminamos de arreglarnos fue a una ventana la abrió y me hizo subir en su espalda. Sería más rápido el viaje de esta manera. Y llegamos justo 5 minutos antes de que tocaran el timbre, fuimos rápidamente a los casilleros y cuando vi por mi visión periférica algo rojo caer me acerqué a ella mientras sostenía en sus manos una hermosa rosa roja. Era la más grande que había visto en mi vida.

—Wooow.

Dije aún asombrada, leyendo lo que decía la nota. Tengo ganas de tres cosas: verte, abrazarte y besarte.
El chico si que sabía sorprender. Cuando sonó el timbre fuimos a nuestras clases aburridas y después a la cafetería, mientras le hablaba de anoche durante el evento, estuvo súper animado con ese grupo que contrató Bulma. Y por supuesto también mencione lo de después. La mujer desprendía el aroma de Trunks por cada poro de su cuerpo y... más de algún estudiante lo noto. Sin embargo estaba muy feliz por mi amiga, nunca la había visto tan contenta y feliz por nada.

—Demonios esto no avanza.
Me queje en la fila para la comida.

—La señorita Son??? Son Gokari??
Se acercó un tipo con el logro de la Corporación en su uniforme.

Ella me miró extrañada. Y yo solo me encogí de hombros. Debía ser cosa de Trunks. Le entregó una canasta de mimbre y después se fue. Me acerqué y tome la tarjeta que se asomaba.

—Se que odias la comida de la cafetería. Así que buen provecho. Lamento no haberlas llevado yo mismo.
Te amo, Trunks.

O esto es genial.

—Posdata. También hay unas para Tori.

Ella río por eso y fuimos a sentarnos. En serio si había una fresas para mí. Su tazón era por lo menos tres veces más grande que el mío pero era obvio que yo no podría comer toda la ración de ella. Solo ellos con ese metabolismo que tienen podrían. Y todo esto es por qué lo hicieron ayer por primera vez?? Qué romántico.

Un Destino Inevitable •Trunks•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora