Una píldora al día.

Los que nunca se callan.

"Fantasmas de mi mente,
cada vez que se asoman
el escenario es diferente.

Fantasmas de mi mente,
cadenas que arrastran
un recuerdo inexistente.

Fantasmas de mi mente,
dañinos, entrometidos,
sin futuro, ni presente.

Fantasmas de mi mente,
¿Porqué me asedian
noche y día?"

Siempre están allí
Hablando y discutiendo.
Jamás pueden decidir que es lo que realmente quieren que haga.

Son tantas voces, tantas ideas, tantas ordenes.
Nunca nada es suficiente para callarlas.

Gritan, aullan de dolor, ríen de forma demente.
Ordenando de manera impotente.

Cuándo parece que por fin hay paz,
Callan un momento, sólo para comenzar de nuevo.
Más fuerte, más rápido
Con un hambre voraz por destruirme .

Se alimentan de mi,
Alimentando su sed de miedo.
Atormentando mis sentidos y destruyen mis razón.

Luchan por él poder,
Pelean por salir,
Por apoderarse de mi,
Por burlarse y mostrar su poder.

No debo de escucharlos.
No puedo darles poder y mucho menos darles libertad.

Todos tenemos fantasmas que nos atormentan.
Gritando y ordenando a nuestro ser.

Fantasmas o demonios
Son igual, al final ambos te atormentarán.

Los tiene él preso, los tiene él líder, los tiene él buen hombre y tu también.
Él hombre está condenado
a vivir atormentado
y jamás ser liberado.