Sonrojo [Yoonmin]

Capitulo 2

"En la sala de música"

Jimin era, de alguna forma, conocido por su baile, con movimientos elegantes que captaban la atención del público, todo este resultado por muchos años de practica y ese día no era la excepción.

El muchacho iba corriendo apresurado, no podía llegar tarde a su practica, no toleraría otro regaño mas de parte de su maestro. Se había atrasado porque tenia que soportar los llantos de su amigo al cual lo habían abandonado de nuevo, si, Taehyung no era muy bueno en el amor.

En el pasillo se escuchaba solo a el corriendo y sus jadeos por el cansancio.

Paso, paso, paso, jadeo, paso, paso, musica...

¿Musica?

El castaño desacelero poco a poco creyendo que su mente le estaba jugando una broma pesada, pero no, el seguía escuchando el sonido dulce que salia de un salón. Jimin no se aguanto y espió por la puerta encontrándose al rubio de espaldas moviendo sus brazos mientras tocaba las teclas del piano.

Su cuerpo sintió un leve cosquilleo, era su hyung el que estaba tocando esa encantadora melodía.

–Que bonita– soltó inconscientemente.

El sonido del piano paró, asustando un poco al menor, ¿lo había escuchado?

El rubio volteó y observó la pequeña cabeza que se asomaba en la puerta.

–Park– lo llamó feliz.

Ese niño lo ponía de buen humor de alguna forma.

–Ah, lo siento interrumpí su concentración.

Suga negó con la cabeza.

–Para nada, tu nunca molestas– miró  el puesto vacío a su lado– ven– palmeó el asiento a su lado.

El llamado sorprendió al otro y cauteloso fue acercándose al lado del otro hasta quedar sentado.

–¿Sabes tocar?

–Para nada, los instrumentos no se me dan, solo soy un poco bueno en el baile.

"¡EL BAILE!" se acordó de ello.

–Debería ir a verte algún día...¿Te encuentras bien?– le preguntó al ver que se levantó de la nada.

–¡Llegare tarde de nuevo!

–¿De que hablas?– soltó una pequeña risa al ver la inesperada acción.

–Hyung yo– dio un vistazo al reloj y luego al otro, se quedó pensativo un momento, hasta que decidió sentarse de nuevo.
Su cabeza estaba cabizbaja, ¿que era lo que le sucedía al pequeño Jimin?

–¿Si?

–¿Podría seguir tocando...un poco mas?

Suga volteó a ver a su lado, su querido doanseng estaba mirando hacia las teclas, moviendo sus dedos nerviosos asentados en su propio regazo y un claro sonrojo se coloco en sus mejillas.

Sonrió internamente y se dedicó a tocar varias canciones esa mañana.

¿Saltarse una clase estaría mal?
No se sentía así con el a su lado.

(...)

-¡Park Jimin! Te dije que era la ultima vez que llegabas tarde y no solo hiciste eso, sino además te saltaste una clase completa.

El castaño estaba dando una reverencia de disculpa.

–Realmente lo siento, no volverá a pasar.

–Eso espero niñato– el maestro revolvió el pelo de Jimin de manera cariñosa–Solo quiero que tu presentación salga perfecta ¿de acuerdo?

El muchacho solo asintió repetidamente logrando que el mayor sonriera.

–Entonces ¿como se llama la muchacha?

–¿E...EH?

–Ya soy bastante maduro para que la excusa del perro ya no me afecte.

–N...no se trata de una mujer, usted se esta equivocando– negó ahora.

–Oh vamos Jimin puedes hablarme de cualquier problema amoroso que tengas.

–¡Maestro!

Aunque internamente el no podía decir que aquella "chica" era el rubio.

Provocando otro sonrojo.