Hey tu, la rubia:
Perdón, pero no logro sacarte de mi cabeza desde esta mañana.
Pasaste por mi lado, miraste a mis amigos y corriste mi mirada hacia mi, cuando lo hiciste sonreíste, al ver tus dientes y tus labios carnosos moverse hacia arriba sentí algo en mi estomago, algo que me hizo sentir como un idiota, no podía ponerme torpe por una chica, y menos por una que no conozco.
ESTÁS LEYENDO
Hey tu, la RUBIA!!
Short StoryEs que a veces no son necesarias las palabras, a él, por ejemplo, solo le basto una sonrisa para enamorarse perdidamente.