Me levante temprano, como siempre. Me puse el uniforme, como siempre. Desayune, como siempre. Y me fui al instituto, como siempre.
Pero claro, no toda mi vida es de color rosa. Anthon, quien hace años era el chico de mis sueños, se ha hecho mi bravucón. Pero claro, lo hace mientras nadie lo vea, ya que sabe que si se me acerca, la mitad del instituto me defenderá ya que para ellos yo soy su dueña, su ama.
Iba llegando cuando de pronto me encuentro con esos fastidiosos ojos color verde y un cabello negro chamuscado. Anthon, quien al verme se acercó y me rodeo con su brazo llevándome lejos de los demás. Cuando me fijaba a donde me llevo, era hacía uno de los salones abandonados donde supuestamente murió un chico al cual le hacían bullying.
— ¿Para que me traes aquí? —Lo mire, y al no obtener respuesta comencé a forcejear para zafarme de su agarre.— ¡Dejame! ¡Que me dejes he dicho!
— O te callas o...
— ¿O qué? ¿Qué? ¿Me harás algo? ¡Contesta maldición!
Me introducido en el salón y me lanzó al suelo. Cerro la puerta con mesas viejas que yacían allí y me miro fijamente.
— ¿Ya no eres virgen, cierto?
— ¿En que te afecta eso a ti?
— Tu solo responde.
Me levante.
— No. Ya no soy virgen.
— ¿Con quién perdiste tu virginidad?
— ¿Por qué me preguntas eso? ¡Dime por que me trajiste aquí!
— Eso no te importa. –Se acerca a mi.
— ¡Claro que me importa! Responde y luego yo te respondo.
— No. Habla.
— Bien. Entonces, te diré...
— Así me gusta. Empieza.
Corrí hacia el y le di un puñetazo en el rostro. El solo se sobo, aproveche para empujar las mesas y salir de allí. Pero el me agarró de la cintura y me apegó a el.
— ¡¿Qué haces?! ¡Sueltame!
Me giro y me besó. El beso fue largo y se torno apasionado, rodee su cuello con mis manos y el apretó mi trasero con las suyas. De pronto me mordió el labio, lo que hizo que yo abriera la boca, oportunidad perfecta para introducir su lengua en mi boca, fue como comenzó una batalla de lenguas, la que yo me asegure de ganar.
De pronto nos separamos por la falta de aire. Nos miramos fijamente y me volvió a besar, esta vez me acorralo contra las mesas mientras me sentaba sobre una de estas y desataba mi blusa.
Entonces, se oyen voces cerca.
— ¿Por aquí los viste? —Esa es la voz del profesor de artes.
— ¡Si! Estaba con Ryler. —¿Evan? Ese mocoso engreído. Me hace la vida imposible solo porque no quise tener sexo con el.
Maldito. Arruinaste el momento.
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El Sueño De Un Vampiro.
FanfictionRyler es una chica de 14 años. Cuando pequeña nunca fue aceptada por sus sentimientos, así que su hermana Alexandra lo obtuvo casi todo. Después de pasar por una infancia algo trágica llena de violaciones. Regresó para jugar con los corazones de los...