Día 59 - Constancia, Perseverancia

3.9K 242 21
                                    

"¿No saben que los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, pero solo uno lleva el premio? Corran de tal manera que lo obtengan. Y todo aquel que lucha se disciplina en todo. Ellos lo hacen para recibir una corona corruptible; nosotros, en cambio, para una incorruptible. Por eso yo corro así, no como a la ventura; peleo así, no como quien golpea al aire. Más bien, pongo mi cuerpo bajo disciplina y lo hago obedecer; no sea que, después de haber predicado a otros, yo mismo venga a ser descalificado."
1 Corintios 9:24-27
🌸

Estos últimos días he decidido empezar a ejercitarme y a comer saludable otra vez porque me di cuenta de que estaba dejando dañar mi cuerpo por no cuidar de él, y ¿sabes de qué me di cuenta?
De que es difícil, muy difícil volver a ser "fit" luego de un año sin hacer ejercicios, y es muy difícil volver a comer saludable luego de un año comiendo chucherías.
Y al darme cuenta de esto solo pensé, —Si yo hubiera seguido y perseverado, quizás hoy estuviera en forma y saludable.

Pero así son las cosas, lo bueno es que nunca es tarde para comenzar.

Pero el punto de este día no es decirte que estés fit, que hagas ejercicios o comas saludable (aunque sí te lo aconsejo), pero a donde quiero llegar es que muchas veces eso me pasa (y quizás a ti también) en mi vida espiritual.

Un día estoy súper feliz y súper metida en las cosas de Dios, estoy con un fuego súper encendido en mi ser y quiero hacer cosas para Dios y cambiar el mundo y puedo durar hasta meses así, pero luego llega un momento en que digo,
Bueno, me desperté tarde hoy, déjame dejar el devocional para mañana.
O también,
—Bueno, ayer leí, así que si no leo hoy no es nada, leo mañana.
y me quedo dormida, o me pongo a hacer otra cosa y dejo las cosas de Dios para "el otro día" pero, ¿Qué pasa? ese día se vuelve dos días, esos dos días se hacen dos semanas, esas dos semanas en día meses... y así sin darme cuenta ese fuego por lo de Dios que antes tenía lo dejo apagar y entonces después estoy preguntándome por qué Dios no me usa como usa a tal persona, o porqué no puedo escuchar la voz de Dios como esta o aquella persona.

La razón es la misma de por qué no puedo tener un cuerpo como aquella chica o chico que sí hacen ejercicios y sí comen bien. No puedo porque no lo hago, no puedo porque no lo intento y cuando lo intento pierdo constancia y no persevero y por eso no avanzo.

¿Qué te quiero decir con esto?
Dios tiene grandes planes para tu vida que van con los dones y sueños que Él puso en tu corazón, pero para tu alcanzar esos planes y para poder escuchar la voz de Dios que te guíe a ellos debes de ser constante y perseverante en la búsqueda diaria de Dios.
No te conformes con oraciones express o lecturas superficiales, profundízate en El Señor, busca más de Él, llénate de Su presencia todos los días y así vas a poder alcanzar esa meta que Él puso en tu corazón.

Yo sé que no es fácil, pero por experiencia te digo, que es mejor ser constante y seguir que dejarse enfriar, porque entonces se vuelve más difícil comenzar otra vez.
Pero, al igual que con los ejercicios y comer saludable, nunca se es tarde para empezar de nuevo (a menos que estés muerto/a pero, cómo estás leyendo pues obviamente no lo estás... ¿verdad?👀).

Aunque sea difícil sacar el tiempo, aunque se te haga súper pesado, aunque no sepas que decir, habla con Dios, busca de Él en Su palabra, que así mismo como cuando poco a poco te acostumbras al ejercicio y te deja de pesar y empiezas a disfrutarlo, así mismo es con las cosas de Dios, pero tú debes de poner de tu parte también.

No dejes enfriar ese fuego de Dios en ti, ni esos sueños que Él puso en tu corazón.
Mantén esa llama ardiendo y, si llega el día en que sientas "dejarlo para después" ora con más ganas.

Dios es tu meta.
La Biblia es tu alimento.
El Espíritu Santo es tu Entrenador.
Y Jesus es tu ejemplo a Seguir.

Dale que tú puedes.
No te rindas.
Y dilo fuerte conmigo,
"Constancia y Perseverancia!"

Dios te bendiga love!❤️👋🏽

Mi tiempo con Dios ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora