Mi tiempo con Dios ©

Día 145 - Como Esaú

"y de que nadie sea inmoral ni profano como Esaú, quien por un solo plato de comida vendió sus derechos de hijo mayor."
‭‭Hebreos‬ ‭12:16‬ ‭NVI‬‬
🥘

Si has leído la historia de cómo Esaú, por un plato de lentejas, vendió su primogenitura (Génesis 25:29-34).

Probablemente pienses, igual que yo, algo así:

"Eso fue algo estupido, ¿vender mi bendición sólo por algo que yo mismo(a) puedo hacer, sólo por comida?

Esaú, al parecer, no era muy brillante."

Y es cierto.

Esaú, dejándose vencer por la desesperación y sus emociones del momento, despreció algo de muchísimo valor, y eso le trajo consecuencias que hasta hoy vemos.

Esaú fue ancestro de los edomitas, un pueblo que aborreció al pueblo de Israel hasta el final y un pueblo que recibió varias profecías del Señor en contra de ella hasta su desaparición como nación (Isaías 63:1-6, Jeremías 49:7-32, Amos 1:11, Esequiel 35...)

Esaú probablemente, en el momento, no pensó en lo mucho que le afectaría esto.

Él no sólo perdió su bendición, sino que también, por su desobediencia, marcó a toda su descendencia, tanto que hay un libro de la Biblia dedicado exclusivamente a la caída del pueblo de Edom (El libro de Abdias).

El verso que más me choca de este libro es el verso 18. Abre tu Biblia y léelo. Te puede servir de ejemplo como a mí.

Pero pensando en esto hasta causa hasta risa, como por comida, algo tan sencillo, Esaú se dejó llevar y lo perdió todo.

Pero te hago una pregunta,

¿No lo has hecho tú también?

Puede que culpes a Jacob por lo que le pasó a Esaú y prefieras estar en lo correcto, pero el hecho de que Esaú tuvo una opción sigue ahí, y el decidió actuar sin pensar en las consecuencias. Como muchas veces lo hacemos también y al final terminamos culpando a otros por nuestras propias decisiones.

Muchas veces se nos hace tan fácil criticar a estos personajes históricos por sus malas decisiones y no nos damos cuenta que nosotros estamos haciendo lo mismo.

Te explico:

Quizás no estés vendiendo tu "primogenitura" o tu bendición por un plato de lentejas literal, pero es probable que lo estés haciendo por otras cosas que sólo brindan placer temporal.

Por ejemplo, quizás tu "plato de lentejas" no sea comida, pero puede ser una relación amorosa o una amistad que te está haciendo desobedecer y por lo tanto te aleja de Dios, pero tú te rehusas a apartarte de ella o el (o ellos/as).
En esto estás siendo Igual que Esaú, estás vendiendo tu bendición por un plato de lentejas (por una relación).

O puede ser que sea el trabajo.
Sabes que Dios dice en Su palabra que Él va a proveer para todas tus necesidades, pero por dudar en la veracidad de esa promesa te ves en un trabajo que te quita todo el tiempo de asistir a la Iglesia o de hacer tus devocionales.
Sé que el trabajo es importante, ¿pero no crees que si Dios te quiere bendecir te puede dar un trabajo en el que si puedas tener tiempo para Él?
Estás vendiendo tu bendición por un plato de lentejas (un trabajo).

O puede ser la ambición al dinero.
Estás tan enfocado o enfocada en "tener más" que no te importa hacer algunas cosas deshonestas con tal de obtener más dinero.

Y no me vengas con eso de "pero puedo diezmar más y así bendecir a la Iglesia", porque Dios no necesita tus diezmos deshonrados. Él necesita tu obediencia.
Estás vendiendo tu primogenitura por un plato de lentejas (el dinero/ la ambición).

O puede que sean tus estudios.
Acabo de terminar la universidad, y sé que muchas veces no tenemos tiempo para muchas cosas, pero sé también que eso nos pasa por no administrar bien el tiempo que Dios nos da, entonces cuando nos vemos en aprietos tendemos a sacrificar el tiempo de Dios.
Estás vendiendo tu primogenitura por Un plato de lentejas (estudios).

O puede que ser aceptado(a) sea tu plato de lentejas, entonces por agradar a tus amigos o por ser "popular" andas de bar en bar, de fiesta en fiesta (no que todas las fiestas son malas, pero sabes a cuales me refiero) y estés yendo a lugares o haciendo cosas que sabes que te alejan de Dios.
Estás vendiendo tu primogenitura por Un plato de lentejas (la aceptación).

O, y creo que está es la más común, pero es de la que menos se habla.
Puede que tengas algún tipo de adicción (el alcohol,las drogas, la pornografia o algún otro tipo de inmoralidad sexual...)
Y estés vendiendo tu bendición solo por 15 minutos de placer.
Estás vendiendo tu "primogenitura" por llevarte de tus deseos carnales y no darle espacio a Dios para ayudarte.
Estás vendiendo tu bendición y alejándote de Dios solo por los deseos de tus ojos o por las hormonas que te traicionan.
Entonces, como Esaú, estás vendiendo tu primogenitura por Un plato de lentejas (tus deseos o emociones).

Y sé que estas cosas son algo difícil de manejar, pero si de verdad quieres agradar a Dios, no es imposible.

Cada uno tiene sus propias luchas, cada uno tiene su "plato de lentejas" con el que lidiar, pero el punto es que también, al igual que Esaú, tenemos una salida y tenemos la oportunidad de, contrario a Esaú, no dejarnos llevar por la emoción del momento, y pelear por nuestra bendición, incluso si eso significa pelear contra nosotros mismos sólo para agradar a Dios.

Y sí, puede ser una gran y dura batalla, pero tú tienes las de ganar, ¿Sabes por que? Porque cuando te decides a no vender tu primogenitura, cuando decides que vas a agradar a Dios por sobre todo, Dios no te deja sólo(a), sino que te da toda la armadura que necesitas para protegerte y te fortalece en la batalla.
Y no sólo eso, sino que también pelea por ti.

Así que love, este día quiero que pienses en esto.

Puede que te hayas identificado con algunos de los ejemplos de más arriba, o puede que estés luchando con otras cosas.

Pero recuerda que, sea lo que sea que te esté tentando o alejando de la voluntad de Dios, no vale la pena.

No seas como Esaú, que por un plato de lentejas vendió su bendición.

Se más brillante.

Versos de apoyo: 

Lee Hebreos 12 completo (es de mucha ayuda... bueno toda la Biblia lo es haha, pero en este tema ayuda mucho 😌).

También puedes leer a Efesios 6:10-20 que habla de la armadura de Dios.

El Salmo 18 en cuanto a la batalla.

1 Corintios 10:13
Filipenses 4:13
Y, uno de mis favoritos, Hebreos 12:4
En cuanto a la tentación 😌👌🏽

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¡Dios te bendiga love!❤️👋🏽